21 agosto,2020 4:17 am

Unos cien vecinos de Cruz Grande impiden a Astudillo inaugurar un centro de salud

Retienen por dos horas al secretario del ramo, Carlos de la Peña, y a la directora de Comunicación Social, Erika Lührs. En la protesta participan personas identificadas con Morena y “Servidores de la Nación” que dicen que AMLO prometió un hospital. “Quienes realizaron este miserable acto deberían avergonzarse”, dice en un mensaje el gobernador. Deslinda el subdelegado federal Alberto Salgado a los “Servidores” de promover la protesta, pero dice que se investigará su presencia en el lugar 

Cruz Grande, Guerrero, 21 de agosto de 2020. Alrededor de cien personas, varias identificadas con Morena y otros que trabajan como “Servidores de la Nación en los programas federales”, impidieron que el gobernador Héctor Astudillo Flores pusiera en funcionamiento el Centro de Salud con Servicios Ampliados en Florencio Villarreal (Cruz Grande), argumentando que quieren un hospital porque así se los ofrecieron.

Los manifestantes retuvieron posteriormente al secretario de salud Carlos De la Peña Pintos y a la directora general de Comunicación Social, Erika Lührs Cortés por casi dos horas, luego de que éstos entraron al edificio a transmitir el mensaje diario sobre la situación de casos de Covid en el estado. Asimismo y por seis horas a unas 30 personas, la mayoría personal del sector Salud.

Durante ese mensaje del mediodía, sobre las cifras de coronavirus, Lührs Cortés aseguró que por “intereses políticos” no se permitió que se pusiera en operación el nuevo Centro de Salud de Cruz Grande, y más tarde en declaraciones por teléfono el subdelegado del gobierno federal en esa región, Alberto Salgado Rodríguez, reconoció que hubo “Servidores de la Nación” pero que no encabezaron protestas sino que sólo observaban la actividad, pero se  investigará.

Antes de mediodía los manifestantes se colocaron en la entrada del centro de salud para evitar el ingreso del gobernador, quien llegó acompañado del alcalde del municipio, el perredista Wilbert García Trujillo, y del rector de la UAG Javier Saldaña Almazán, y se negaron a formar una comisión para que fueran atendidas sus demandas como lo pedía De la Peña.

Los manifestantes todo el tiempo estuvieron agresivos con los funcionarios que intentaron hablar con ellos, pues De la Peña Pintos les solicitó a los que encabezaban el movimiento que pidieran a la gente que tuvieran la sana distancia y les dijo que era una irresponsabilidad convocar a esa protesta sin tomar en cuenta las medidas sanitarias que se tienen por el Covid-19 como es el cubrebocas, porque ese lugar era un foco de infección para la propagación del virus y uno de ellos contestó: “es nuestro problema”.  El funcionario responsable de salud respondió: “No señor, esto es una irresponsabilidad”.

Y es que los manifestantes estaban amontonados en la entrada de la puerta y la mayoría no llevaba cubrebocas. Hubo personas visibles que pedían a las gente gritar y después azuzaron para no dejar pasar al gobernador, entre ellas, una mujer de nombre Yukari Maldonado y su esposo Santos García, así como un grupo del regidor de Morena, Francisco Manzo Ventura, de acuerdo con personas que las identificaron en el lugar.

También el doctor Eloy Rodríguez Felipe, quien trabajaba en Ayutla, pero ya estaba en la plantilla del nuevo centro de salud y alentó la protesta porque quiere ser el director al ser uno de los promotores para la terminación del Centro de Salud, y según algunos habitantes de ese municipio busca la alcaldía.

Entre los organizadores de esa protesta se mencionó a Demián Miranda Morales, coordinador de giras del delegado federal Pablo Amílcar Sandoval, quien posteriormente en una llamada telefónica desmintió tal situación, pues dijo que él tiene problemas de salud y que este día estaba en consulta en un hospital, por lo que no tenía nada que ver y no sabía por qué se usó su nombre.

Pocos minutos después llegó el gobernador para dialogar con quienes estaban ubicados delante de la entrada del centro de salud y les pidió que formaran una comisión para que hablaran sobre su inconformidad, pero los manifestantes, sobre todo mujeres, comenzaron a gritar: “Queremos hospital, no centro de salud”. Algunos le dijeron que no lo dejarían pasar, se pusieron frente a él y empezaron a empujar, por lo que fue rodeado por los guardaespaldas mientras otros vecinos pedían que se calmaran.

Al ver la negativa, Astudillo Flores optó por retirarse y al estar de espaldas unas personas aventaron agua y hubo quien arrojó un bote de refresco que estuvo a punto de darle en la cabeza. Eso tensó el ambiente, el gobernador se regresó y le dijo a uno con los que había dialogado, “no creo que esos sean los modos” y se retiró del lugar protegido por sus guardaespaldas hasta su camioneta.

La situación causó enojo en algunos manifestantes, pues reclamaron la actuación señalando: “somos gente civilizada, no burra”, y otros reclamaron a las personas más agresivas qué habían ganado con su actuar.

En declaraciones, una vez que se fue el gobernador, la señora Alma Delia Gallardo Avilez dijo que estaban inconformes con la situación porque les habían dicho que sería un hospital y resulta que es un Centro de Salud. “La gente se está manifestando porque no está de acuerdo y no lo dejamos inaugurar y no lo dejaremos hasta que sea un hospital, ya estamos hartos de tantas mentiras del gobierno”.

La inconformidad de la mujer fue en referencia a la promesa que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador durante su visita a Costa Chica en marzo pasado cuando fue detenido en la carretera por vecinos de Cruz Grande. A esto mismo se refirió el gobernador Astudillo en la conferencia mañanera del presidente el viernes pasado en Acapulco cuando informó a López Obrador que estaría listo esta semana.

“Vale la pena decir que en su última gira que hizo usted por la Costa Chica hubo un compromiso especialmente con Cruz Grande en donde nos recibieron en el pueblo muchísimas personas, hombres y mujeres que reclamaban la instalación y operación del hospital de Cruz Grande. Quiero comunicarle, señor presidente que a más tardar en una semana va a operar el hospital de Cruz Grande”, dijo entonces el gobernador.

El domingo el gobernador informó que este jueves inauguraría el “hospital comunitario”, así lo llamó, en Cruz Grande, el cual desde el 2010 había empezado a construirse y fue en este sexenio cuando se concluyó para pasar a ser un Centro de Salud de Servicios Ampliados.

Después de la transmisión de mensaje sobre coronavirus cinco personas entraron a la fuerza al centro de Salud, De la Peña Pintos les dijo que les mostraría el lugar para que conocieran el equipo pero “ya traían una consigna bien marcada”, indicó posteriormente el funcionario en declaraciones por teléfono.

Indicó que los manifestantes a él y a Lührs Cortés “no nos dejaban salir” del Centro de Salud, “sí, estuve retenido”, pero al final salió de lugar.

Explicó que personal de Salud estuvo retenido luego que unas 30 personas permanecían afuera del Centro de salud y cerraron con  candado la reja.

En su cuenta de Facebook, el gobernador minutos antes de las 7 de la noche informó, acompañado de un video donde se observa a varios vehículos salir del estacionamiento del Centro de Salud, que personal de Salud estuvo retenido seis horas y afirmó: “quienes realizaron este miserable acto deberían avergonzarse”.

Añadió que “el personal de salud merece todo nuestro respeto, es inaceptable que hayan sido retenidos por más de seis horas por un pequeño grupo que, por intereses políticos y en plena pandemia intentó impedir el inicio de operaciones del Centro de Salud con Servicios Ampliados de Cruz Grande”.

Astudillo Flores subrayó que esa obra por más de diez años estuvo inconclusa y agregó que entiende las diferencias, pero “no aceptamos el atentado contra la salud pública. Ponerlo en marcha es un asunto de bienestar social para la Costa Chica”.

Fue “un grupo muy reducido de personas” que politiza la salud: Lührs

Durante la conferencia de mediodía de la actualización diaria de la información del nuevo coronavirus que se llevó a cabo después de la protesta, Erika Luhrs pidió a los manifestantes evitar “buscar un conflicto político dentro de un problema de salud”.

Afuera de las instalaciones, la directora de Comunicación social del gobierno estatal comentó que la intención de hoy era “echar andar el centro de salud con servicios ampliados en esta comunidad”.

“Lamentablemente un grupo muy reducido de personas, y esto lo digo a título personal, con toda la responsabilidad que implica lo que voy a comentar, pero un grupo de personas más ligadas a intereses políticos que de otro tipo no permitió que se pusiera en operación este centro de salud”.

Recordó que cuando Héctor Astudillo Flores tomó posesión como gobernador “esta obra ya tenía más de cinco años abandonada. No se había ni siquiera terminado la obra negra y mucho menos equipado”.

Aseguró que el mandatario estatal dispuso al inicio de la pandemia como “asunto prioritario” terminar este centro de salud y, a pesar de la manifestación, es un compromiso brindar el servicio de salud “a la comunidad de la Costa Chica que es mucho, mucho más que el grupo que lamentablemente hoy no permitió que se pusiera en operación”.

Lührs Cortés confió en que “ya llegará el momento en que pondremos en marcha este Centro de Salud con la gran capacidad que tiene el gobernador Astudillo de atender cada uno de las demandas que se le presentan”.

Llamó “a quienes confunden la política con la salud que este no es el momento, estamos en un momento de emergencia nacional por la pandemia del coronavirus y no es el momento realmente de buscar un conflicto político dentro de un problema de salud”.

Agregó que “como bien lo ha dicho el gobernador, esto empezó siendo como un problema de salud, lamentablemente también tenemos un problema económico, no permitamos que se convierta en un tema político”.

Carlos de la Peña Pintos informó que el Centro de Salud de Cruz Grande con servicios ampliados cuenta con una sala de quirófano, una sala de expulsión, tiene ultrasonido, rayos X digital, ventiladores para algún paciente Covid y todos los consultorios “están computarizados para que las radiografías que se tomen lleguen al consultorio de cada uno de los médicos que está atendiendo”.

Aseguró que conoce muy bien el otro centro de salud ubicado en la cabecera municipal de Cruz Grande, el cual “tiene demasiados años, que está obsoleto y que no presta un servicio adecuado a la ciudadanía”.

De la Peña Pintos indicó que las actuales instalaciones del nuevo Centro de Salud son una primera etapa de construcción y “de acuerdo a los estudios que se tengan de la población y de acuerdo a las necesidades propias, se tiene que ampliar o se tiene programado poder tener una ampliación”.

Informó que “ya está en marcha” el hospital de Ayutla que tendrá 30 camas y que el próximo año, junto con el INSABI, se planea ampliar otras 30 camas. También se está construyendo el hospital de San Luis Acatlán que sustituirá al actual y un Centro de Salud con servicios ampliados en la comunidad de Buenavista del mismo municipio.

En declaraciones telefónicas, Salgado Rodríguez deslindó al gobierno federal de la protesta y subrayó que hay una excelente relación con el gobierno del estado en todas las áreas.

“Lamentamos muchísimo estos sucesos, no deben llevarse a cabo y mucho menos repetirse. Como gobierno federal reprobamos está situación y nos deslindamos, porque algunos medios mencionaron ahí que “Servidores de la Nación” habían participado, por lo que estamos haciendo una investigación profunda, a fondo y sí algunos empleados federales asistieron por iniciativa personal, en horarios de trabajo serán sancionados”.

Sobre si sabía que había estado gente del gobierno federal en esa protesta respondió que en ese lugar hubo “Servidores de la Nación por lo que están haciendo precisamente la investigación y “lo que hasta ahorita tenemos recabado es que sí estuvieron físicamente tres ‘Servidores de la Nación’, no encabezando, sino como ciudadanos que observaban el evento, pero estamos en ese proceso porque no es conveniente que ellos en horario de trabajo hayan estado ahí”.

Salgado Rodríguez dijo que el hecho que hayan estado ahí en horarios de trabajo es una falta, pero “la información que hasta ahorita tenemos es que ellos no encabezaron acciones política sino más bien como ciudadanos atentos a un evento de importancia de la inauguración de un hospital”.

Sin embargo, dijo que “estamos en ese proceso y de, antemano, de manera institucional lamentamos este hecho, nos deslindamos como institución de esta situación y estamos avocados a investigar y sancionar si algún ‘Servidor de la Nación’ participó porque era horario de trabajo y tenían que estar enfocado en sus actividades, independientemente del evento por la importancia que haya tenido”.

Texto: Karina Contreras y Ramón Gracida / Foto: Karina Contreras