Ciudad de México, 7 de agosto de 2022. Activistas advirtieron que Claudia Morales Reza, la primera mujer indígena en dirigir el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred), tendrá como principales retos conseguir mayor presupuesto, incluir a todos los sectores sociales, influir entre autoridades y sociedad, y, quizás el más inmediato, mostrar independencia ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien la nombró en el cargo apenas en julio pasado.
“Será interesante ver si es capaz de llamarle la atención al presidente cuando descalifique a alguien sólo porque le lleva la contra”, consideró Zenaida Pérez Gutiérrez, activista mixe y representante de la Asamblea Nacional Política de Mujeres Indígenas.
Aunque reconoció la importancia de que las mujeres indígenas asuman puestos de poder, lamentó que López Obrador -quien ha dicho que el “feminismo” es un invento “neoliberal”- haya realizado el nombramiento sin hacer caso a los colectivos de mujeres indígenas y a la asamblea del Conapred que le presentaron una lista de 15 mujeres y le solicitaron que la designación se hiciera mediante consulta.
Al final, el Mandatario nombró a Morales Reza, indígena wixárika de Jalisco, sin una trayectoria reconocida fuera de su comunidad, quien no figuraba entre las propuestas, pero es cercana al titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes.
Pérez Gutiérrez también puso en duda el verdadero interés de López Obrador sobre la causa indígena y de las mujeres, en vista de la reducción de presupuesto que el Gobierno federal ha hecho en el Conapred, el INPI e incluso a los refugios de mujeres violentadas, además de que se tardó dos años para nombrar a la nueva responsable de la política contra la discriminación.
“Es muy diferente trabajar para la comunidad que para el Gobierno y es lamentable que ello (el nombramiento de una mujer indígena) se utilice para confundir”, afirmó la activista.
En julio de 2020, tras la renuncia de Mónica Maccise, anterior presidenta del Conapred, López Obrador amenazó con desaparecer al organismo por caro y por ser, según dijo, otro “invento neoliberal”.
Un mes después se reunió con Morales Reza y otras dos de sus candidatas; sin embargo, el nombramiento lo hizo hasta dos años después.
“Todo esto es un mensaje más del desprecio que se tiene hacia la agenda de las mujeres indígenas”, acusó Fátima Gamboa Estrella, activista maya de la Red Nacional de Abogadas Indígenas.
A pesar de esto, Zenaida Pérez y Fátima Gamboa consideraron importante apoyar a Morales Reza ante la resistencia que podría encontrar para realizar su labor dentro del mismo Gobierno.
Por su parte, la poeta zapoteca Irma Pineda, representante de los Pueblos Indígenas de Latinoamérica y el Caribe ante la ONU, consideró que la nueva titular tiene el reto de posicionar su figura como mujer indígena capaz de desarrollar acciones contra la discriminación en cualquiera de sus formas, sentar las bases para que las políticas públicas sean totalmente incluyentes y ubicar al Consejo como una instancia con capacidad de influencia tanto en los gobiernos como en la sociedad.
“Por lo menos ya tiene titular el Conapred”, destacó la zapoteca Amaranta Gómez, primera candidata muxhe/ trans a diputada federal.
“Lo importante aquí es que el presidente había amenazado con desaparecerlo y, finalmente, después de dos años la nombraron.
Eso evidencia una posibilidad de que la política antidiscriminatoria de Estado siga prevaleciendo”, sostuvo.
Por primera vez en su historia el Conapred tiene a una mujer indígena como presidenta, pero también tiene el presupuesto más bajo en cinco años. En 2017, ejercía 173 millones 865 mil 359 pesos, y en el actual, 142 millones 742 mil 448 pesos. En 2020, la Auditoría Superior concluyó que no tenía personal suficiente.
“Si tan cercana es al presidente, que lo convenza de dar mayor presupuesto para poder ejecutar sus programas”, dijo la diputada Cynthia López Castro, secretaria de la Comisión de Igualdad de Género.
La directora de la Red Nacional de Refugios, Wendy Figueroa, también puso en duda el verdadero interés del Gobierno en la causa de las mujeres, pues el monto mayor del presupuesto para atender la igualdad de género se asigna en los programas sociales.
“El verdadero interés se debe de ver no sólo en un nombramiento, sino en dar atención, asignar presupuestos, que ayuden a la nueva presidenta a hacer su trabajo”, dijo.
Texto y gráficos: Agencia Reforma
