Texto: DPA / Foto: Cuartoscuro
Ciudad de México, 2 de mayo de 2018. La violencia provocó el desplazamiento interno de casi 330 mil personas en México desde 2006, con unos 20 mil desplazados el año pasado, de acuerdo con un informe difundido hoy en la Ciudad de México.
“La causa principal del desplazamiento interno forzado es la violencia causada por grupos armados organizados”, dijo Brenda Pérez, encargada del estudio de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción a los Derechos Humanos (CMDPDH), una organización civil.
El informe “Episodios de Desplazamiento Interno Masivo en México 2017”, presentado en una conferencia de prensa, señala que hubo 25 episodios de éxodo el año pasado, que afectaron principalmente a indígenas, mujeres y niños.
Al menos 14 personas fallecieron mientras se encontraban en situación de desplazamiento interno.
Además de la acción de los grupos criminales, los conflictos políticos, sociales o territoriales, sobre todo en comunidades rurales, son causa de desplazamiento, según el informe.
“Nosotros solamente reportamos los registros de desplazamiento interno masivo”, dijo el director ejecutivo del CMDPDH, José Antonio Guevara.
Por eso “cremos que el número es mucho mayor”, añadió, ya que el recuento no incluye la salida forzosa de grupos pequeños o personas individuales.
De los desplazados en 2017, unos 4 mil 800 ya han regresado a sus hogares. “Eso significa que 15 mil 548 continúan hoy en situación de desplazamiento interno forzado”, afirmó Pérez.
De acuerdo con la CMDPDH, a lo largo de los años el problema del desplazamiento interno forzado “se mantiene o tiende incluso a incrementarse”.
Guevara dijo que muchas veces no se reconoce la condición de víctimas a las personas desplazadas, debido a que las autoridades no desean admitir la gravedad del problema, en un país en el que no hay un conflicto armado declarado.
Los lugares de México con más desplazamientos en 2017 fueron los estados de Chiapas, Guerrero, Sinaloa, Oaxaca, Michoacán y Chihuahua. En todos los episodios de desplazamiento masivo se registró la presencia o uso directo de la violencia.
Pérez dijo que el éxodo está precedido por actos violentos, violaciones a los derechos humanos o amenazas, lo que significa que “el desplazamiento interno forzado es un eslabón en la cadena de victimización”.
En 2006 el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón puso en marcha una estrategia militarizada de combate al crimen organizado, que derivó en un alza en la violencia de los grupos criminales y denuncias de violaciones a los derechos humanos.
El año pasado fueron asesinadas más de 29 mil personas y en el país hay, además, unos 35 mil desaparecidos.
(En la imagen: desplazados del estado de Chiapas en 2017)
