17 agosto,2023 9:17 am

Abandonan al Centro Cultural Acapulco, cuyas instalaciones se deterioran a grandes pasos

 

La fachada de la Gran Galería se cae a pedazos, no hay aire acondicionado, el agua se filtra durante las lluvias y los baños no funcionan. No hay dinero para atender el principal recinto de la ciudad, dice la titular de la Secultura de Guerrero, Aída Martínez Rebolledo

 

Acapulco, Guerrero, 17 de agosto de 2023. Mientras el gobierno de Evelyn Salgado Pineda presume la recuperación de espacios como el Auditorio Sentimientos de la Nación, en Chilpancingo, Casa Borda en Taxco, o la Casa de Los Vientos en Acapulco –los dos últimos con el apoyo del gobierno federal– el Centro Cultural Acapulco (CCA) se deteriora de manera acelerada y si bien es un tema que involucra la administración anterior, durante ésta no ha recibido mantenimiento necesario.

A pesar de que se siguen llevando a cabo actividades, los espacios están abandonados, sin aire acondicionado, filtraciones de agua tras las lluvias y baños sin servicio son la imagen general en el lugar, que depende directamente del gobierno del estado y sobre el que, en su momento, la secretaria de Cultura de Guerrero, Aída Martínez Rebolledo, se limitó a decir que no había manera de atender las necesidades del lugar –el principal de la ciudad– por falta de presupuesto.

Durante un recorrido por el CCA, ubicado en la avenida Costera, en la colonia Costa Azul, es fácil darse cuenta de las condiciones que tiene, por ejemplo, la Gran Galería, que recibe de frente a los usuarios.

Dicha galería fue abandonada en marzo del 2021 luego de que el artista plástico guerrerense Héctor C. Massiel presentó su exposición Huellas del tiempo, y cerrada durante la epidemia de Covid-19, fue reabierta de manera parcial para una exposición de la Secretaría de la Defensa Nacional en octubre de 2022.

Actualmente, el recinto está cerrado, quedó en desuso y abandonado, mientras que en su parte exterior la fachada se cae a pedazos.

A un costado de la entrada principal se encuentra la Galería Ixcateopan, cuyo aire acondicionado falla con frecuencia.

Lamentablemente, las últimas actividades, como la presentación del libro Una mirada a la biodiversidad de Guerrero, de la autora Laura Elena García Reyes, en julio pasado, se realizaron sin el aire acondicionado, agobiando a los asistentes.

El auditorio Juan García Jiménez se encuentra en la misma situación: la duela de madera para ballet y danza contemporánea está estropeada; el lugar, que ha sido usado también como salón de conferencias y otras actividades, recientemente se quedó sin aire acondicionado.

Ante ello, el próximo lunes 21 de agosto el Ensamble de AMusca de Cuerdas y Oboe hará un concierto a beneficio para recaudar fondos y reparar el auditorio, ante la pasividad de las autoridades.

Mientras tanto y al fondo, junto a las oficinas centrales del lugar, donde también falla el aire acondicionado y hay filtraciones de agua durante las lluvias, se encuentra el espacio que fue en su tiempo el Centro de Lectura y Formación Lectora Carlos Fuentes, y que lleva abandonado unos ocho años.

En la visita al lugar, se observa el polvo que lo inunda, y sólo eventualmente se le ve abierto para recibir a los alumnos del taller de escultura, que encontraron ahí un espacio para trabajar.

Los muebles, principalmente sillas y sillones así como su acervo bibliográfico, son cosas del pasado, siendo su última gran actividad –registrada en sus redes sociales– el V Festival del Libro y la Palabra Acapulco en su Tinta, en 2015.

Según la Secultura, respondiendo a una serie de solicitudes al Instituto Nacional de Transparencia (Inai), se invirtieron en esta administración 65 mil pesos para su presunta reapertura (El Sur, edición del 21 de abril de 2023).

Dicha reapertura consistió solamente en la impartición de talleres literarios sabatinos de corta duración y con mobiliario prestado de otras áreas.

Por otra parte, los jardines apenas reciben algo de mantenimiento, y si se va de noche, las luces de las Rejas Solares no sirven y más allá de dejar a oscuras la calle y a merced de la delincuencia, es imposible disfrutar de la exposición de folclor guerrerense que aún se encuentra en ellas.

En su momento, la titular de la Secretaría de Cultura (Secultura) estatal, Martínez Rebolledo, se limitó a decir que no había manera de intervenir el lugar –que dirige Víctor Hugo Jasso– insinuando que era por problemas presupuestarios.

En entrevista para El Sur, publicada en junio del 2022, sólo aceptó que las instalaciones del centro estaban en el abandono, pero no de ahora, sino de tiempo antes, rechazando hablar de la posibilidad de trabajar para echarlos a andar; “el tema de los presupuestos es complicado”, dijo. (El Sur, edición del 11 de junio de 2022).

Desde entonces nada ha pasado.

 

Texto: Óscar Ricardo Muñoz Cano / Fotos: El Sur