19 mayo,2020 4:44 am

Al tope de pacientes de Covid-19 hospitales de la capital, Iguala y Acapulco, asegura el sindicato

La líder sindical Beatriz Vélez Núñez indica que suman 94 trabajadores del sector salud infectados en varias regiones del estado, de los cuales seis están graves e internados

Chilpancingo, Guerrero, 19 de mayo de 2020. Este lunes ya sumaba 94 los trabajadores infectados por Covid-19 en el sector salud y los hospitales  estaban al tope de pacientes en las áreas críticas, a donde siguen llegando enfermos sospechosos de coronavirus, incluso de Cruz Grande, Tecoanapa y Ayutla, informó la secretaría de la Sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud (Sntsa), Beatriz Vélez Núñez.

En consulta telefónica, la líder sindical indicó que hay trabajadores del sector salud infectados en varias regiones del estado, de los cuales seis están graves e internados: dos en Chilpancingo, dos en Iguala, uno de Huitzuco y un doctor en Acapulco.

Cuestionada sobre la protección al personal médico en el servicio, aclaró que en este momento el abastecimiento ya tiene un ritmo apropiado, que hay suficiente equipo e insumos. Aunque precisó que fue a partir de la semana pasada cuando el gobierno federal comenzó a enviar las dotaciones necesarias, antes de eso, sólo contaban con los materiales que distribuía el gobierno estatal, principalmente.

Advirtió que el problema que enfrentan ahora es que están llegando demasiados pacientes a los hospitales de Acapulco, en Renacimiento y El Quemado, y las camas equipadas para la atencion de pacientes graves ya están ocupadas.

Precisó que hay más camas que no cuentan con oxigeno, ni ventiladores, y el secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, ha insistido en se amplíe el número de camas. Aclaró que para ello, deben capacitar a otro grupo de trabajadores de base o de contrato, para seguir recibiendo a los enfermos.

Además, dijo que “se necesita en cada cama una toma de oxigeno, conexión al respirador y monitor, todo el equipamiento. Podemos llenar las 120 camas de un hospital, el problema serán que no todas tienen las condiciones de atención”.

Detalló que en el hospital Donato G Alarcon, de Renacimiento, tenía 19 pacientes instalados, que la madrugada de ayer recibieron a un paciente de traslado de la capital del estado, que había pedido atención en Chilpancingo. Ahí, dijo que el personal tuvo que dividir la aplicación de oxigeno, pese al riesgo, porque no tiene la misma fuerza de aplicación.

Informó que el hospital general de Chilpancingo puede recibir como máximo 25 pacientes con camas equipadas. Antes, trabajadores del hospital protestaron porque la capacidad del personal médico y de enfermería era para atender sólo a 20 y se había cubierto esa cifra, luego hubo nuevas contrataciones.

Vélez Núñez añadió que el límite para el hospital general de Acapulco, en El Quemado, es de 40 camas; y el de Renacimiento, de 20. En el hospital general de Iguala, el máximo es de 28, y en Taxco de diez. Asimismo, dijo que en el hospital de Coyuca hay 10 camas equipadas, en Tlapa y en Zihuatanejo, seis.

Señaló que en los hospitales de Iguala había 21 pacientes, en Chilpancingo 24, en Renacimiento 21, en El Quemado 28, en Taxco y en Zihuatanejo tres, en Tlapa cuatro y en Coyuca de Catalán uno.

Adelantó que ayer en la tarde esperaban el traslado de un niño, sospechoso de Covid-19, de Cruz Grande, así como de dos pacientes adultos, de Tecoanapa y de Ayutla.

Aclaró que en los hospitales no pueden rechazar a los pacientes, que los instalarán en los espacios que dejen los pacientes dados de alta o que lamentablemente haya fallecido. Si está lleno y no tienen a dónde remitirlos, los atenderán en el área de urgencias o medicina interna, aún sin condiciones apropiadas.

Aseguró que la semana que concluyó fue muy dura en la atención de enfermos, tanto en el sector estatal como en el ISSSTE, y el seguro social. Como ejemplo, indicó que en el hospital general de Iguala murieron seis.

Insistió en que por esa razón urgió al secretario de Salud a que abriera el hospital general de Chilapa, que manejarán los militares, pues ellos están enviando pacientes a los hospitales estatales, “queremos que se abra otro nosocomio, porque sería muy riesgoso ampliar el número de camas, para los pacientes y el personal médico”.

Estimó que los contagios identificados actualmente dentro del personal médico, ocurrieron en el periodo en que escaseaban los materiales de protección. Sin embargo, señaló que también han observado que en hospitales no se lleva a cabo el protocolo de protección al cien por ciento, “a veces no sanitizan luego, luego. Los trabajadores se exponen cuando se les baja el cubrebocas. Donde hay material se están contagiando dos o tres, porque la labor es muy pesada y están cansados. Depende mucho del estado inmunológico de cada trabajador”. Añadió que el uso de cubrebocas todo el día produce hipoxia, que es una deficiencia de oxígeno.

Del mayor número de contagios que ocurrió en el hospital de El Quemado, señaló que entonces les dijeron que no usarán cubrebocas N-95 en el área urgencias, sino el modelo quirúrgico, y empezaron a recibir a enfermos con diferentes patologías, que resultaron infectados de Covid-19.

Por otro lado, habló de las contrataciones de personal de atencion médica para los enfermos de coronavirus y confirmó que respondieron enfermeras a la convocatoria y muy pocos doctores; y sobre todo, confirmó que los médicos que fueron contratados con anterioridad, renunciaron por temor al contagio.

“Ya empezó a llegar personal de enfermería, porque médicos casi no. Renuncian los médicos cuando se enfrentan a la realidad”. Señaló que se mantiene la oferta del sindicato, para tramitar los cambios de médicos en las regiones a Chilpancingo y Acapulco.

Texto: Lourdes Chávez / Foto: Jesús Eduardo Guerrero