Aunque siguen con vida por un lugar en la postemporada, los Acereros se rezagan respecto a los Bengalíes en la disputa por el Norte de la Conferencia Americana, donde la pelea está candente
Kansas City, EU, 27 de diciembre de 2021. El sexto título consecutivo de la AFC Oeste le llegó a los Jefes de la mejor forma posible: con una paliza 36-10 ante los Acereros de Pittsburgh.
Con Patrick Mahomes de vuelta en su mejor nivel, Kansas City consiguió una octava victoria al hilo que significó, además del boleto a los Playoffs, mantener la distancia de un juego sobre los Titanes de Tennessee en la lucha por ser el mejor equipo de la AFC.
Mahomes lanzó para 258 yardas y tres anotaciones, dos de ellas a Byron Pringle, quien hizo que la afición olvidara la ausencia de Travis Kelce, fuera por Covid-19.
Además, el corredor Clyde Edwards-Helaire tuvo un acarreo de touchdown, antes de dejar el juego a principios de la segunda mitad por una lesión en la clavícula. Darrel Williams y Derrick Gore llevaron el peso de la ofensiva el resto del partido.
La derrota para los Acereros fue especialmente dolorosa, en parte porque complica terriblemente sus aspiraciones de Postemporada, y principalmente porque se convirtieron en el primer equipo en la historia de la NFL en colocarse en desventaja de al menos 23 puntos al medio tiempo en tres juegos en fila fuera de casa.
Aún peor, los Steelers no han conseguido un touchdown en la primera mitad en cinco partidos consecutivos, por primera vez desde 1940.
Aunque siguen con vida por un lugar en la postemporada, Pittsburgh se rezagó respecto a los Bengalíes en la disputa por el Norte de la AFC, donde la pelea está candente.
Ben Roethlisberger pasó para 159 yardas y un touchdown en el cuarto final por Pittsburgh, aunque también tuvo una intercepción y perdió un balón.
Complica Baltimore su futuro
Las bajas por Covid-19 y lesiones afectaron a los Cuervos de Baltimore, que se alejaron de puestos de Playoffs al perder 41-21 ante los Bengalíes de Cincinnati.
Aunque la máxima preocupación era tapar el hueco que dejaron los quarterbacks Lamar Jackson y Tyler Huntley, ambos en la lista Reservas/Covid, el problema real de los Cuervos estuvo en la defensiva secundaria.
Las múltiples ausencias por lesiones y posibles contagios dejó descubierta la zona profunda de la defensa de Baltimore, misma que Joe Burrow y sus Bengalíes aprovecharon para vencer a su rival Divisional, afianzar su lugar en la cima del sector y ayudar al QB de segundo año a romper una marca de la franquicia.
Burrow estableció un récord de Cincinnati al lanzar 525 yardas, superando la marca en un partido de 522, impuesto por Boomer Esiason.
Además, Joe sumó cuatro pases de anotación para enterrar a los Cuervos, que deben ganar sus siguientes dos duelos y esperan combinaciones de resultados si quieren entrar a Postemporada.
Mientras tanto, los Bengalíes disfrutan de una campaña en la que las cosas han salido mejor con Burrow en los controles y Joe Mixon como corredor.
Por primera vez desde 2015, Cincinnati barrió la serie de dos juegos ante Baltimore, pues también salió victorioso el 24 de octubre por pizarra de 41-17.
En Baltimore, Josh Johnson, QB emergente, lanzó 304 yardas, dos touchdowns y una intercepción.
Texto: Staff / Agencia Reforma
