Texto: Lourdes Chávez / Foto: Jesús Guerrero
Chilpancingo, Guerrero, 26 de septiembre de 2018. Unos 300 alumnos de normales rurales del país integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) marcharon en esta ciudad, hicieron pintas en la 35 Zona Militar a la que le arrojaron cohetes y bombas molotov.
Al exigir la presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa hace 4 años, denunciaron que el exgobernador Ángel Aguirre Rivero fue quien los desapareció.
La protesta comenzó al norte de la ciudad a las 5 de la tarde con una manta al frente que decía, “Ángel Aguirre Rivero, asesino, no mereces un cargo político, mereces cárcel y castigo”.
En el mitin político en la explanada de la plaza Primer Congreso de Anáhuac, un normalista de Ayotzinapa denunció que “salimos a las calles a decir que no nos cansamos, que somos el aliento de los padres de los estudiantes que Ángel Aguirre y sus secuaces desaparecieron”.
Otro de los oradores urgió a que las autoridades ya digan en dónde están sus compañeros, y que haya justicia para los tres normalistas asesinados la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre en Iguala, Julio César Mondragón Fontes, Daniel Solís Gallardo y Julio César Ramírez Nava.
Subrayó que Mondragón Fontes, “tuvo una muerte ruin (le desollaron el rostro) para causar terror, miedo, pero no les tenemos miedo”.
Aclararon a la población que no protestan por gusto, “estamos por nuestros compañeros, desde el día que se los llevaron tenemos una consigna: porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Reconocieron también la fortaleza de los padres y madres de los estudiantes desaparecidos que no han dejado de exigir la presentación con vida de sus hijos “al gobierno opresor que tiene las manos llenas de sangre”.
Alrededor del mitin se vio a cientos de personas, pero sólo algunas estuvieron atentas al mensaje de los estudiantes. Unas pasaron de largo, muchas se mantuvieron alrededor del Zócalo donde la banda de música del Ayuntamiento tocó a unos 20 metros la protesta estudiantil.
A su paso por la ciudad algunos jóvenes con playeras en la cabeza para cubrirse el rostro hicieron pintas en las fachadas de edificios de públicos y de gobierno.
En la Comisión Estatal de Defensa de Derechos Humanos dejaron escrito “nos faltan 43”, en el Ayuntamiento “ni perdón no olvido”, entre otros.
Frente a la escuela de Enfermería profesores en paro aplaudieron a su paso en señal de apoyo.
Nadie trató de huir a su paso, todos observaban pasar a los manifestantes que cantaba con fuerza sus consignas. En los locales comerciales salieron los encargados a la calle para evitar pintas en sus paredes, aún cuando no fueron del interés de los alumnos.
