Falla la afición, Rayados no. Pobres de aquellos abonados del Monterrey que anoche decidieron ver el triunfo de su equipo (1-0 sobre el Santos Laguna) por la televisión. Se perdieron un gran encuentro… y un gol espectacular.
Querétaro / Monterrey, 29 de noviembre de 2018. Cruz Azul demostró que quiere dejar atrás las penumbras, tras vencer 2-0 al Querétaro por la ida de cuartos de final del torneo Apertura 2018, anoche en el estadio La Corregidora.
Pasaron más de cinco años para que La Máquina volviera a ganar en liguilla, tras hacerlo por última vez en el primero de la serie de la final del Clausura 2013.
Después, sólo hubo oscuridad, con tres años incluso en los que ni siquiera disputó la fase final.
Pero el conjunto cementero dejó claro que no planea cargar fantasmas, ni le teme al liderato, posición en la que cinco veces ha sido eliminado justamente en cuartos de final.
El defensa Pablo Aguilar, al 16’, y Édgar Méndez, al 59’, le dieron forma al triunfo cementero, con una Máquina que fue superior a los Gallos Blancos, dando un golpe de autoridad al abrir la Liguilla.
“El equipo lleva mandando mensajes durante todo el torneo, la verdad que es un equipo muy sólido, todos trabajamos, todos defendemos, todos sumamos, todos corremos, todos atacamos”, explicó Méndez tras el duelo.
“Llevó un año y medio, y siempre que me lo han preguntado, no siento la presión de los fantasmas, pero yo vine a cambiar la historia”.
El mediocampista español robó el balón en media cancha, para que Roberto Alvarado metiera disparo que pegó en el poste y, en el contrarremate, Elías Hernández dejó el esférico en el área para que Méndez se estirara cuanto pudo para enviarlo al fondo.
Ya antes, el VAR había salido al auxilio de La Máquina, porque los celestes abrieron el marcador con un cabezazo de Aguilar, a quien en primera instancia le habían señalado fuera de lugar, lo que rectificó el silbante Diego Montaño tras apoyarse en el videoarbitraje.
A La Máquina no le pesó volver a una cancha en la que había ligado tres caídas como visitante en fase regular, para hilvanar cuatro triunfos en Liga MX, inco si le agregamos la victoria en Copa.
Cruz Azul puede caer incluso 2-0 el sábado en el estadio Azteca y aun así meterse a las semifinales, porque ya hizo su tarea en el primero de la serie.
Texto: Félix Zapata y Juan Carlos Jiménez / Agencia Reforma
Foto: @Cruz_Azul_FC
Falla la afición, Rayados no
Pobres de aquellos abonados de Rayados que anoche decidieron ver a su equipo por la televisión.
Se perdieron de un gran partido de liguilla y sobretodo, de un súper gol de Rogelio Funes Mori en un Estadio BBVA Bancomer al que sólo asistieron 24 mil 700 aficionados, para un aforo de 53 mil espectadores.
Una espectacular chilena del Mellizo le dio la victoria 1-0 a los Rayados de Monterrey sobre el campeón Santos, y el sábado en Torreón se decidirá cuál equipo estará en semifinales.
Fue un eléctrico partido, digno de una liguilla, entre el último campeón de la Liga MX y unos Rayados que quieren ser protagonistas en la fiesta futbolera más atractiva en México.
Y sí, falló la gente, pero no faltó el futbol. Desde el inicio del juego y hasta el final, el partido mostró una cara muy agradable. Dos equipos con intensidad, futbolistas de muy buen pie y arqueros de calidad comprobada.
Si el primer tiempo estuvo entretenido, en el segundo llegó lo mejor, cuando el canterano Carlos Rodríguez desbordó a su marcador y metió un centro al pecho de Funes Mori, quien enseguida se tiró una chilena que venció a Jonathan Orozco.
La gente saltó de sus butacas. No era para menos, Funes Mori había metido el gol de la temporada en el “Gigante de Acero”.
Texto: Agencia Reforma
