29 noviembre,2018 5:21 am

Revelan en NY que el Cártel de Sinaloa lavaba 9 mdd al mes en el sistema bancario mexicano

Miguel Ángel Martínez, El Tololoche, testigo protegido y en libertad en EU, incrimina a El Chapo en amplia serie de actividades ilegales que le generaron cuantiosas ganancias en los primeros años de la década de 1990.
Nueva York, 29 de noviembre de 2018. Miguel Ángel Martínez, El Tololoche, quien fue operador de El Chapo Guzmán entre 1987 y 1993, aseguró en el juicio contra Joaquín Guzmán Loera en Nueva York que el Cártel de Sinaloa lavaba entre 8 y 9 millones de dólares al mes mediante el sistema bancario mexicano.
Cuatro jets privados a su servicio, casas en cada playa de México, ranchos y un zoológico propio, fueron algunos de los lujos que se permitió Joaquín El Chapo Guzmán con las ganancias del tráfico de estupefacientes a Estados Unidos.
El Tololoche testificó este miércoles por segundo día consecutivo en el juicio contra el caído capo sinaloense en una Corte de Nueva York, en donde lo incriminó en una amplia serie de actividades ilegales que le generaron cuantiosas ganancias durante los primeros años de la década de 1990.
Martínez señaló ante el jurado que él se encargó de almacenar e importar varias toneladas de cocaína hacia EU a través de distintos medios bajo las órdenes directas del sinaloense.
También señaló que realizó pagos a proveedores de cocaína de Colombia y se encargó de lavar dinero al introducirlo al sistema bancario mexicano.
Ante las preguntas de la Fiscalía que intenta probar que Guzmán era el verdadero jefe del Cártel de Sinaloa, El Tololoche aseguró que en la década de los noventa su jefe se benefició del boom de la cocaína, y que empleó parte del dinero en pagar sobornos para poder mantener su negocio.
Entre 1987 y 1990 el Cártel de Sinaloa envió a EU entre 25 y 30 toneladas de drogas al año por un túnel ubicado entre Agua Prieta y Arizona. Esto generó ingresos por unos 500 millones de dólares, 45 por ciento de los cuales era de Guzmán.
El testigo, que se encuentra en libertad gracias a un acuerdo de cooperación con el gobierno estadunidense, refirió que gracias a sus ganancias, Guzmán compró de cuatro jets a principios de la década de 1990.
En este época, agregó, El Chapo recibía desde Tijuana jets que contenían el dinero en efectivo generado por la venta de drogas en la ciudad de Los Ángeles.
“Al principio se recibían tres, cuatro, cinco millones de dólares por mes, y aumentó hasta 20 millones de dólares”, dijo Martínez.
El testigo destacó que ese fue el auge del Cártel de Sinaloa y como consecuencia de las ganancias señaló que introdujo enormes cantidades de dinero al sistema bancario, para lo cual pagaba sobornos a los empleados de las instituciones financieras.
Con sus ganancias, manifestó el testigo, El Chapo tenía propiedades en todos lados en México, en todas las playas, así como ranchos. En uno de estos últimos en Guadalajara, contaba con un zoológico con tigres, leones, panteras y venados.
En otra parte del interrogatorio, El Tololoche narró como en 1987 pidieron autorización a Juan José Esparragoza El Azul para matar a los líderes del cártel rival de Tijuana.
Reveló que él junto con Guzmán lo visitaron en su celda del Reclusorio Sur de la Ciudad de México en donde contaba con todas las comodidades de atención y servicios que incluía un menú de “top sirloin, langosta y codorniz”, así como “whisky, coñac y diversas drogas”. Todo pagado con sobornos.
Y en su primer día como testigo revela también los sobornos a González Calderoni
El narcotraficante mexicano que trabajó durante más de una década para Joaquín El Chapo Guzmán describió el lunes el camino al éxito del Cártel de Sinaloa, que llegó a funcionar como una empresa de más de 200 empleados, incluidos secretarias y contadores, y dueña de aviones y barcos que transportaban y recibían cocaína colombiana, además de proveedora de pagos millonarios en sobornos.
Durante el juicio a El Chapo, que se celebra en Brooklyn, Miguel Ángel Martínez, quien se describió como un cercano aliado de Guzmán, dijo que el capo pagó dos o tres veces 10 millones de dólares a Guillermo González Calderoni, ex director de la PGR en México y ex jefe de la desaparecida Policía Judicial Federal.
“Me dijo que era un policía muy inteligente”, testificó Martínez, alias El Tololoche, al describir lo que Guzmán pensaba de Calderoni.
Calderoni fue asesinado en Texas para proteger la identidad de Martínez, el juez Brian Cogan ordenó a los dibujantes en el tribunal que no definieran en sus dibujos los rasgos de la cara del testigo ni su peinado.
El Chapo tomó notas durante el testimonio de su ex colaborador y le observó con los brazos cruzados. También habló a menudo a la oreja de uno de sus abogados, Eduardo Balarezo.
Texto: Agencia Reforma
Foto: Fotograma cadena Telemundo