Texto: Apro / Foto: El Sur. De izquierda a derecha: Muna Dora Buchahin, Salim Orci Magaña y Javier Pérez Saavedra.
Ciudad de México, 6 de junio de 2018. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) aseveró que los despidos recientes de funcionarios clave respondieron a una “innovación institucional”, así como a una “renovación de cuadros” y a un “proceso de reestructuración” iniciado en la administración de David Colmenares Páramo, nombrado al frente del órgano fiscalizador en diciembre pasado.
En un boletín, la dependencia respondió a un comunicado de organizaciones de la sociedad civil en el que expresaron su preocupación ante las remociones de los auditores Muna Dora Buchahin, Salim Orci Magaña y Javier Pérez Saavedra, de las que se tiene conocimiento “sin que se hayan dado a conocer a la opinión pública las razones que las motivaron”.
La ASF aseveró que el “proceso de reestructuración” responde a dos objetivos: reorientar las funciones auditoras para aumentar su impacto en el marco del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) y que “los funcionarios de la ASF no tengan negocios relacionados con las actividades que desempeñan”.
Además, justificó el despido de Buchahin de la Dirección General de Auditoría Forense –quien exhibió los esquemas de desvíos multimillonarios de recursos públicos conocidos como La Estafa Maestra–, por un supuesto conflicto de intereses en el que habría incurrido la funcionaria al contratar asociaciones civiles de las que integraba el equipo directivo.
En su comunicado, la ASF señaló que “ninguna revisión” de la auditoría a la Cuenta Pública 2017 “se verá afectada por la renovación de cuadros”.
Buchahin denunció que la Unidad de Asuntos Jurídicos de la ASF se negó en iniciar auditorías basadas en dos denuncias “documentadas” sobre nuevos desvíos presuntamente operados por el equipo de Rosario Robles Berlanga en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
