Metales pesados
Tryno Maldonado
El pasado 26 de septiembre tuvo lugar la XCVI Acción Global por Ayotzinapa. Las movilizaciones nacionales e internacionales para exigir justicia por los 43 normalistas desaparecidos por el Estado mexicano y sus tres compañeros caídos ocurrieron a ocho años de los sucesos que conmocionaron al país. En el camino, cinco padres han muerto a causa de complicaciones de salud debido al nivel de vida que demandan búsquedas y marchas sin fin por todo el país y el extranjero. Pero no sólo eso. Impensablemente, las familias de los estudiantes han llegado a un año más sin avances sustanciales en la obtención de verdad y justicia en medio de un ambiente sumamente enrarecido por las autoridades. Todo indica que desde las entrañas de las instituciones del Estado mexicano hay un afán por entrampar el caso. Especialmente en lo tocante a la participación de las fuerzas armadas (Ejército y Marina), cuya imagen se ha visto seriamente cuestionada estos días a partir de las filtraciones del grupo de hacktivistas Guacamaya y la denuncia por espionaje contra periodistas y activistas en este sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
Durante el mitin que realizaron los familiares de los normalistas de Ayotzinapa al término de la marcha, Vidulfo Rosales, abogado y vocero, resaltó: “Mientras no se tengan pruebas que digan lo contrario, que digan que los 43 estudiantes ya no están con vida, esta consigna –‘Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos’– será la que seguirán levantando mes con mes. A pesar del dolor que han llevado estos ocho años, no han parado de levantar la voz”.
El mismo día Blanca Nava, madre de Jorge Álvarez Nava, preguntó: “¿Qué pasó con nuestros hijos? Es mucho dolor, mucho sufrimiento el que estamos pasando. Lo que estamos viendo, lo que están sacando entre tanta información… nada más siento que se están burlando de una. No nos han dado respuesta. Tanto el gobierno anterior, como este nuevo gobierno. Yo le digo a este nuevo gobierno que ya no se burlen de nosotras como madres, que ya no se burlen del dolor, del sufrimiento, por no saber qué pasó con nuestros hijos. Queremos saber la verdad. Exigimos que nos digan qué pasó. Que ya no estén ocultando a los verdaderos responsables. Porque nada más los están deteniendo por delincuencia organizada, cuando todos sabemos que son responsables de la desaparición de los 43. Exigimos que ya no los estén cubriendo como lo hizo Enrique Peña Nieto; nunca dijo que los militares eran responsables, pero nosotros sí lo sabíamos. A pesar de que ellos ocultaron la verdad, a nosotras como madres nunca nos engañaron: sabíamos que unos pocos alumnos de la normal fueron llevados al Batallón 27; de ahí los desaparecieron y ocultaron que estuvieron ahí.
“Gracias a los expertos (del GIEI) pudimos saber la verdad. Exigimos que se investigue a los militares. Y que se castiguen. ¿O qué piensa el gobierno? ¿Que se va a seguir burlando de nosotras? ¿Que aquí nos va a tener más tiempo? No, señor presidente: queremos la verdad; porque mientras usted nos diga que están muertos pero no nos dé pruebas, nosotras seguiremos en las calles, luchando por nuestros hijos. Porque los amamos y los queremos de regreso. No nos van a callar. Ni nos van a dejar aquí, abandonadas como ha sucedido en otros casos. Queremos verdad y justicia, y que se castigue a los responsables. Queremos que se cumplan esas 81 órdenes de aprehensión, no que los estén liberando.
“Usted mismo lo dijo, presidente: fue un crimen de Estado. Y si fue un crimen de Estado queremos que todos caigan: desde abajo hasta arriba. Así como lo dijo una vez que nos reunimos, que usted no iba a ser tapadera de nadie. Pues espero que lo cumpla y que nos dé respuestas. Pero respuestas científicas. Siempre han dicho que no hay indicios de vida. Pues yo les digo que no hay indicios de muerte, porque no nos han dado pruebas científicas. No son nada más 43 que están desaparecidos. Hay miles que están desaparecidos, esperando a su padre, a su madre, a su hermano… Yo ando buscando a mi hijo y lo quiero ver de regreso. No me voy a detener hasta que lo encuentre.
“Le pido a este presidente y al fiscal Gertz Manero que, si no pueden hacer su trabajo, que le dejen el puesto a otra persona. Él (el fiscal) es el que está desistiendo de las órdenes de aprehensión contra culpables y militares.
“Así que, de ahorita para adelante, nosotras queremos respuestas contundentes. No nos van a callar. Aquí estamos de pie. A ocho años. No nos rendimos. Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Hasta ahí la intervención de Blanca Nava. Doña Joaquina García Velázquez, madre de Martín Getsemaní, dijo: “Hoy el presidente en su mañanera afirmó que estábamos de luto. Pues nosotras las madres le decimos que no sentimos ese luto porque no tenemos ninguna prueba científica que nos dé respuesta de que nuestros hijos están muertos. De los militares nada más hay cuatro detenidos porque sacaron un amparo.
“Para nosotras son ocho años de sufrimiento. Ocho años de andar calle por calle. Nuestra lucha no se va a quedar en la impunidad. ¿Qué pasó con ellos? ¿Qué pasó con nuestros hijos? Le pedimos a la gente que no nos deje. Que nos sigan acompañando. Porque no vamos a parar. Vamos a llegar a la verdad. Por muy dura que sea. Queremos la verdad. Queremos justicia”.
