14 marzo,2020 5:20 am

Busca el Frente de Comunitarias acabar al Cártel del Sur; sospecha que el Ejército lo apoya

Se rompió una tregua con Guerreros Unidos tras la liberación de algunos de sus líderes como El Gil, “porque esa era gente con ideas muy malas por el hecho de haber desaparecido a los 43”, dice el vocero Salvador Alanís. Onésimo Marquina, El Necho, aporta dinero para las policías comunitarias, reconoce

Chichihualco, Guerrero, 14 de marzo de 2020.Atrincherado en Filo de Caballos al frente de la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo (Tlacotepec) que en noviembre de 2018 irrumpió en el corredor Filo de Caballos-Xochipala, el vocero del Frente Unido de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero (FUPCEG), Salvador Alanís Trujillo se propone a corto plazo acabar con el Cártel del Sur, y después ir contra Guerreros Unidos, como ya lo hizo con Los Tequileros de Jacobo Reybel Almonte y Santiago Hernández, El Carrete.

“Estamos haciendo un trabajo que no nos corresponde, pero el Gobierno ha olvidado su responsabilidad de darnos el derecho a la seguridad y otros como la vida, el libre tránsito, la educación y la salud, por eso existen hoy las policías comunitarias”, justifica el líder del FUPCEG en una entrevista el jueves en la base de la Policía Comunitaria en Filo de Caballos.

Equipado con un radio de comunicación y una pistola calibre .45 colgando en una funda del cinturón, Alanís Trujillo reprocha que a pesar de este trabajo que hacen y que le corresponde al Gobierno, el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador haya suspendido el diálogo con las policías comunitarias.

Se pregunta: “entonces, ahora, ¿cómo nos vamos a comunicar?, ¿con balas?, ¿y quién se va a hacer responsable de los muertos? Hasta ahora no hay una autoridad que diga ‘yo soy la responsable’”, cuestiona a cinco días de que comenzó una nueva racha de violencia en la zona que ha dejado nueve muertos (tras confirmarse ayer la muerte de una maestra que resultó herida en un ataque a una Urvan del transporte público), cuatro heridos, una Urvan del servicio de transporte y una camioneta particular atacadas.

La Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo entró al corredor Filo de Caballos-Xochipala en noviembre de 2018. Ahora controla nueve comunidades de los municipios de Leonardo Bravo (Chichihualco) y Eduardo Neri (Zumpango), según el vocero del Frente, quien expresa sus sospechas de que el Ejército quiere recuperar el territorio para entregárselo otra vez al Cártel del Sur.

“Nosotros siempre hemos visto que el Gobierno no trabaja para los ciudadanos, prueba de eso es que estamos aquí. Trabajamos ocho meses pidiéndole al Gobierno que recuperara este corredor y nunca lo hizo, y hoy que nosotros lo hacemos ahora sí tenemos mucha presencia de ellos”, reprocha durante la entrevista en la base donde la madrugada del domingo pasado irrumpieron sicarios del Cártel del Sur, sacaron a seis comunitarios y ejecutaron a cinco en el centro del pueblo.

Agrega: “es falso que el Gobierno esté del lado del pueblo, nunca hemos confiado en él, por esa razón estamos armados, ellos han olvidado su responsabilidad y por eso es que existen hoy las policías comunitarias, para hacer lo que estamos haciendo los ciudadanos.

–Decías que han enviado oficios al presidente Andrés Manuel López Obrador para dialogar sus demandas, ¿cuál ha sido la respuesta?

–Obrador nunca ha contestado ningún oficio, lo único que sabemos por una entrevista que dio fue que cortó todas las pláticas con las policías comunitarias, acto que yo repruebo porque las policías comunitarias somos pueblo y muchos de nosotros votamos por él, porque dijo que iba a escuchar al pueblo.

Sigue: “nosotros somos un pueblo que se armó por la ineficiencia del Gobierno federal para darnos el derecho a la seguridad y otros derechos como la vida, el libre tránsito, la educación, la salud.

Entonces estamos haciendo un trabajo que no nos corresponde y no está bien que el Gobierno corte el diálogo, porque ahora, ¿cómo nos vamos a comunicar?, ¿con balas?, ¿y quién se va a hacer responsable de los muertos? Hasta ahora no hay una autoridad que diga yo soy la responsable”.

–¿Cuál es la presencia y la correlación de fuerzas que tienen en la zona?

–Nosotros hemos desarticulado grupos importantes, uno de ellos Los Tequileros de Raybel Jacobo Almonte. Hemos seguido en la idea de acabar con cualquier remanente del Tequilero, si sabemos que hay uno por ahí lo buscamos y lo eliminamos. Terminamos con El Carrete, Santiago Mazari Hernández, y estamos trabajando para que todos los remanentes vayan siendo eliminados.

“Ahorita trabajamos contra uno de los grupos más importantes que es el Cártel del Sur y estamos recopilando toda la fuerza y todo lo que tenemos para poder erradicarlo. Esperamos que pronto superemos ese problema como lo hemos hecho en otras ocasiones.

–¿Están en la postura de ir sobre el Cártel del Sur o solamente cuidar que no entre en su territorio?

–La postura es exterminarlo y lo vamos a hacer. Ahorita estamos concentrados en acabar con este grupo del Cártel del Sur.

–¿Cual es el plazo que se han fijado?

–Estamos hablando de pocos días.

Se rompió la tregua con Guerreros Unidos

Alanís Trujillo informó que otro de los grupos con los que actúa el FUPCEG es el de Guerrero Unidos. Dice que tenían una tregua de paz y de respeto con este grupo, pero se rompió cuando algunos líderes que salieron de la cárcel llegaron a Iguala e intentaron retomar los mandos y las plazas.

“Se rompió la tregua porque esa era gente con ideas muy malas por el hecho de haber desaparecido a los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa, quiere decir que son gente con mucha maldad en su mente, y a raíz de que ellos regresan e intentan retomar el control de Guerreros Unidos se pierde ese acuerdo de paz, y ahorita estamos peleando con ellos en algunos puntos de la región”.

–¿Quiénes son los líderes visibles de esta gente que salieron de la cárcel y que están generando la violencia en Iguala?

–Yo tengo conocimiento del Gil (Gildardo López Astudillo), y algunos que se decían policías municipales pero que sabíamos que eran miembros activos o directos de  Guerreros Unidos, pero es información que tenemos y que vamos a ir reservando para que en el futuro actuemos.

Cuenta que esta decisión de accionar contra Guerrero Unidos fue lo que provocó la fisura del Frente con la Policía Comunitaria Tecampanera de Teloloapan, con la que ya rompió.

“No han seguido los acuerdos que se tomaron cuando el Frente se formó, de que decisiones importantes se deberían tomar entre todos, hay algunos líderes que por estar en su territorio toman decisiones propias que afectan a todo el grupo de policías comunitarias y no debería ser así. Como Frente tenemos que tomar en cuenta a todos los líderes para realizar alguna acción”.

Aclara: “La idea del Frente no es ir matando y matando gente, en algunos terrenos tenemos que conciliar bajo el diálogo, en algunos casos no nos queda más que tirar balas, en otros casos tenemos que ver las estrategias para que se compongan los terrenos, porque finalmente la función del Frente es pacificar la zona. No todo lo podemos arreglar con armas”.

Su relación con El Necho

–¿Qué respondes del señalamiento de que ustedes también están protegidos por algunos grupos delictivos?

–Nosotros no pertenecemos a ningún grupo, ni local, ni nacional. No recibimos apoyo de ningún cártel ni de ningún grupo. No obtenemos dinero de manera ilícita como robos, extorsiones. Por eso hacemos un operativo ahorita y otro en tres meses, porque tenemos que recuperar la cuestión de las balas. Nos toma dos o tres meses reponer nuevamente el inventario porque tenemos cierta capacidad de cuántas horas de combate podemos aguantar, de acuerdo al número de balas que tenemos.

–¿Por qué se les vincula, entonces, con Onésimo Marquina, El Necho, de Tlacotepec?

Necho ha sido una persona importante en Tlacotepec porque es uno de los que tiene más dinero en Heliodoro Castillo, y él aporta para las policías comunitarias, quienes lo cuestionan si tienen problemas personales con él que los arreglen con él, pero la Policía Comunitaria es una organización social del pueblo y nosotros vamos a seguir avanzando pese a cualquier señalamiento que nos hagan. En general la Policía Comunitaria y el Frente vivimos de aportaciones.

–¿Cuál es su relación con el Ejército y la Guardia Nacional?

–Es de respeto y de tolerancia. Ellos han sido respetuosos con nosotros y nosotros con ellos. Nos han tolerado en el trabajo que hemos y nosotros también a ellos. Nosotros controlamos la entrada a 600 comunidades de la sierra y por ende ellos tienen que pasar por aquí para hacer pagos, recorridos y para todas las actividades como destrucción de plantíos. Nosotros hemos tenido ese respeto para que ellos transiten y vengan, porque nosotros creemos que hacemos un trabajo muy parecido al que hacen ellos. Nos identificamos mucho con los soldados.

Sin embargo, sostiene que no existe ninguna coordinación oficial con ellos y que así van a seguir.

–¿Han pensado cuánto tiempo van a seguir aquí?, ¿cuánto tiempo podrán resistir si en corto plazo no logran abatir a sus objetivos por los que llegaron aquí?, ¿van a permanecer aquí de por vida?, ¿o cuánto tiempo?

–Vamos a permanecer el tiempo que sea necesarios, si son años vamos a permanecer años. El proyecto de nosotros era que en tres meses íbamos a recuperar todo el corredor y lo recuperamos en un mes, ahorita estamos considerando un tiempo corto para exterminar al Cártel del Sur, si se cumple bien, y si no tenemos capacidad para aguantar uno o 10 años, lo que sea necesario.

Texto: Zacarías Cervantes / Foto: Lenin Ocampo Torres