15 mayo,2018 7:18 am

Caducan medicinas en la casa de salud de San Martín, Alcozauca; no hay médicos que las prescriban, se quejan

Cuentan con instalaciones donde está el medicamento, y equipo de curaciones y atención básica, que recetaban un médico, un enfermero y un técnico de las Caravanas de la Ssa, pero hace más de un año que se las quitaron, dicen.

Texto: Carmen González Benicio y Antonia Ramírez
Foto: Antonia Ramírez
San Martín, Alcozauca, Guerrero. Los pobladores de la comunidad na savi de San Martín, anexo de Zoyatlán, municipio de Alcozauca, pidieron médicos que los atiendan y que se usen los medicamentos antes de que caduquen en la casa de salud, porque no cuentan con alguien que se los prescriba cuando están enfermos.
Contaron que, por falta de atención médica una mujer de la comunidad murió luego de dar a luz, dejando a su hijo huérfano, a causa del recorrido que hicieron los familiares para llevarla a Zoyatlán, comunidad cercana donde hay un centro de salud, y de ahí a la cabecera municipal de Alcozauca, de donde regresó muerta.
Agregaron que, como hay más datos de la familia sólo saben que su hijo sobrevivió, pero no cuáles fueron los motivos de la muerte de la mujer, ya que la familia tampoco habla del tema.
Por ello pidieron al comisario, Mario Salazar Guerrero, que exija la atención a la salud de la población para prevenir más muertes.
Las madres de familia comentaron que no han tenido médicos en el lugar, y que habilitaron una casa de salud donde está el medicamento y equipo para curaciones y atención básica, que recetaban un médico, un enfermero y un técnico de las Caravanas de la Secretaría de Salud, pero hace más de una año que se las quitaron.
Acudieron a la Jurisdicción Sanitaria 04 de la Montaña, en Tlapa, para preguntar sobre estas demandas, y les respondieron que serían atendidos por el IMSS-Prospera, pero tampoco iban con frecuencia, y cuando lo hacían la atención era deficiente.
Remarcaron que no tienen atención médica en el lugar, y ahora para el control de sus padecimientos las citan en el centro de salud de Zoyatlán, y de ahí las envían a Alcozauca o a Tlapa, según el tipo de enfermedad.
Una madre de familia contó que, para su control como beneficiarias del programa Prospera, tienen que ir a Zoyatlán, “caminar más de dos horas para llegar al centro de salud sólo para que les tomen el peso y talla a nuestros hijos”, se quejó.
Otra madre dijo que eso es difícil porque algunas mujeres tienen hasta 10 hijos, por lo que no puedan llevarlos a todos, o no todos son atendidos el mismo día y tienen que quedarse en Zoyatlán sin un lugar donde hospedarse.
Una madre contó que a ella le asignaron sus citas en el centro de salud del 11 al 14 de mayo, “no puedo quedarme muchos días allá, tendré que viajar todos los días para que los pesen y los midan, eso me parece mal, porque saben que aquí no hay carros, que debemos caminar, por qué no en un solo día atienden a una familia”, sugirió.
Agregaron que están dispuestos a apoyar al personal médico que asignen de manera permanente a la comunidad con los alimentos y hasta con la gasolina, “ya lo hemos hecho, nos hemos cooperado para pagarle la gasolina al doctor, y que venga de Zoyatlán”, dijeron.
“Aportamos cinco pesos todas la de Prospera, y de ahí le damos 200 pesos para la gasolina de su carro, así cuando vienen nos atiende a todas y no tenemos que ir una por una caminando hasta allá”.
El comisario y los pobladores desconocen quién les brindará los servicios, pues ya no tienen las caravanas de la Secretaría de Salud ni las unidades Móviles del IMSS-Prospera, que les dijeron que en abril de 2017 llegarían, pero la atención no la han recibido de manera oportuna.
Por ello, han hecho uso de remedios caseros, pero las enfermedades complicadas los obligan a trasladarse a Zoyatlán, mientras los medicamentos que hay en la casa de salud caducan porque no hay nadie que se los dé.
Insistieron en que les asignen médicos y enfermeras, “sería mejor que esté al menos una enfermera, para ya no ir hasta Zoyatlán, a veces por un medicamento para una gripa cuando aquí hay, pero están guardados porque no sabemos cuál se ocupa para cada enfermedad”, dijo el comisario.
La casa de salud cuenta con un espacio donde están los medicamentos, las básculas, una camilla, y un consultorio que se deteriora por la falta de uso.
Las mujeres insistieron en la necesidad de tener médicos para las emergencias y para que lleven el control y no tengan que trasladarse con sus hijos a Zoyatlán, “sólo para que los pesen y los midan, porque aquí hay una báscula”, y así no sean afectadas en el programa Prospera por no acudir a la cita.
En la localidad de Zoyatlán no se pudo obtener información sobre los médicos del centro de salud, que estaba abierto, pero nadie respondió al llamado.
Para la Jurisdicción Sanitaria 04 Montaña, en su formato de pirámide poblacional la comunidad de San Martín/Arenal tiene 315 habitantes.
En el municipio sólo estamos de apoyo: IMSS-Prospera
Por su parte el supervisor medico zonal del IMSS-Prospera, César Sierra comentó que en enero de este año empezaron a recorrer el municipio de Alcozauca con las Unidades Médicas Móviles, que incluyen un médico, una enfermera y un técnico, que también atienden el municipio de Huamuxtitlán.
Sin embargo, no tienen población asignada del programa Prospera y sólo están de apoyo en responsabilidad compartida con la Secretaría de Salud, porque no les han dado la lista de las usuarias, como en Olinalá y Acatepec, donde atienden a 700 derechohabientes de Prospera.
Lamentó que los médicos no quieran trabajar en La Montaña, por lo que es frecuente que sólo lleguen unos meses y luego se vayan, como ocurrió recientemente en esta unidad, que está vacante desde marzo.
Dijo que la atención que brindan es para las enfermedades más comunes, respiratorias, gastrointestinales, de piel, de crecimiento y desarrollo del menor de cinco años, mujeres en edad fértil y control de embarazos.
Informó que la unidad médica estuvo ahí por última vez el 16 de abril, y que en mayo ya habían ido en la primera semana y no tenía la fecha exacta, aunque al 9 de mayo, los pobladores dijeron que no habían acudido.
Comentó que fue este año que el IMSS-Prospera entró a Alcozauca y que la localidad de San Martín es una ruta nueva, donde van para reforzar las acciones de Salud, ya que es un anexo de la comunidad de Zoyatlán, donde hay un centro de salud que se encarga de la atención de las usuarias de Prospera.
En Alcozauca no tienen derechohabientes de Prospera, acuden cada mes a las localidades de Zaragoza, Nuevo Zaragoza, Pueblo de Dios y San Miguel el Grande para dar consulta general, porque no tienen población cautiva.
Los trabajadores comentaron que, para las unidades móviles, atender las comunidades es difícil porque los carros no tienen las características para andar en los caminos sinuosos, que empeoran en la temporada de lluvias.
La comunidad
En la comunidad na savi de San Martín la población de 15 años en adelante tiene la educación básica incompleta en un 100 por ciento y su población es analfabeta en un 70 por ciento, de acuerdo con los datos de microrregiones.
En esta localidad la población sin derechohabiencia a servicios de salud, es 58. 74 por ciento.
Las viviendas no cuentan con baño, drenaje ni agua entubada, por lo que su grado de rezago social es muy alto y aumento de 1.21775 en 2005 a 2.17269 en 2010.
Su población también aumentó de 122 en 2005 a 223 en 2010, 109 mujeres y 114 hombres.
Es una de las comunidades alejadas del municipio de Alcozauca, colinda con el estado de Oaxaca con el que tiene un conflicto agrario.
No cuenta con servicios de transporte de ruta del servicio público, por lo que sus pobladores tienen que caminar entre hora y media y dos horas a la comunidad más cercana, Zoyatlán, donde pueden tomar una “pasajera” a la cabecera municipal de Alcozauca o a Tlapa, aunque sólo hay dos corridas, en la mañana y en la tarde.
El recorrido es sinuoso, entre las barrancas y los senderos que los pies de los niños, hombres y mujeres han marcado ante la falta de transporte y dinero para costear el pasaje cuando algún particular acude y quieran aprovechar el traslado en carro.
Los pinos y encinos los han cobijado con su sombra durante el recorrido, que cubren en cuatro horas, dos de ida y dos de regreso, que puede aumentar si llevan alguna carga.
El acceso de los carros tampoco es sencillo, pues la tierra suelta, las subidas empinadas y la falta de rastreo hacen que patinen o no suban si no es empujando; y el riesgo de patinar en el lodo podría significar irse al cerro, en el mejor de los casos, y en el peor a alguna barranca.
(En la imagen: Pobladores de San Marín, anexo de Zoyatlán, municipio de Alcozauca, piden a las autoridades de salud que designen personal médico permanente para que atienda a más de 300 habitantes. Foto: Antonia Ramírez)