3 junio,2023 5:16 am

¿Cómo está la seguridad pública en Guerrero?

Primera parte

Héctor Manuel Popoca Boone

 

Hace 8 años, en 2015, una buena radiografía de la delincuencia, violencia e inseguridad pública que existía en Guerrero, la realizó mediante ponencia magistral el doctor Alonso Concheiro, reputado especialista en la materia. Reproduzco partes sustantivas de la misma para que nos sirvan como punto comparativo más realista de qué tanto hemos avanzado, a la fecha, en el combate de esos flagelos sociales.
En aquel entonces, el doctor Concheiro manifestaba: “La seguridad, o la falta de ella, es un asunto complejo y multifactorial en Guerrero. Su orografía y condiciones naturales del suelo, su falta de desarrollo económico, con altos niveles de pobreza y de informalidad en el empleo; el bajo nivel educativo de su población; la alta dispersión de las comunidades rurales, el insuficiente desarrollo de vías de comunicación e infraestructura de transportación y conectividad, entre las comunidades y ciudades; los altos niveles de violencia asociados con el crimen organizado; junto con la ineficacia del sistema judicial y las violaciones a los derechos humanos, forman partes de un todo. Por ende, para mejorar los niveles de seguridad pública en el estado se requerirán también diversas intervenciones de política pública en más de un campo y en los tres niveles de gobierno.”
“…la inseguridad y la violencia son de los problemas más serios que enfrenta Guerrero. El 80 por ciento de los habitantes del estado se sienten inseguros habitando en él. Cuando se habla de inseguridad, el centro de atención suele ser el crimen organizado. Es un factor importante, pero no el único: entre otros está la presencia y proliferación de grupos de autodefensa ciudadana y de policías comunitarias, algunos con reconocimiento oficial y apoyo por parte del Estado y otros no; que si bien en teoría surgieron para realizar tareas de vigilancia ciudadana y evitar que las organizaciones criminales penetrasen en sus comunidades, con frecuencia son cooptados por dichas organizaciones; atentando ocasionalmente contra los derechos humanos (detenciones arbitrarias, aplicación de justicia por propia mano, tortura o incluso asesinatos)”.
“…también son factores de inseguridad pública el uso ilegal de la fuerza para dirimir disputas políticas, siendo Guerrero uno de los estados con mayor número de asesinatos de funcionarios públicos y de políticos, donde los sospechosos de los crímenes son del mismo gremio; así como la corrupción de funcionarios públicos y policías, cuya cooptación por las organizaciones del crimen organizado evita que actúen en contra de ellas, convirtiéndose en parte del problema y no de su solución”.
“El clima de inseguridad y violencia genera otro tipo de violencias como “la intrafamiliar… y dado que la mayoría de las victimas son mujeres puede considerarse también violencia de género”.
“No pueden obviarse los factores que provienen de la pérdida de valores y principios, en donde se le da primacía el poseer en el presente, bienes, privilegios y placeres, legales e ilegales, de fácil e inmediato acceso; en contraposición a todo aquello que es producto del esfuerzo, tenaz, permanente y honrado, realizado a lo largo de la vida”.
“Guerrero tiene uno de los más altos índices delictivos del país. Esto incluye secuestros, homicidios simples o del crimen organizado; lesión dolosa con arma blanca; extorsión; secuestros; robo a peatón o vehículo, con o sin violencia. Estos delitos muestran la complejidad de la situación de violencia e inseguridad prevaleciente. Esta combinación, junto con un clima y suelos propicios, hacen que estas tierras del sur, particularmente la región de Tierra Caliente, Norte, Montaña, Sierra y Costa Grande, sean lugares fértiles para el cultivo de la mariguana y la amapola; de ésta última, algunas estimaciones señalan a Guerrero como una de las tres entidades federativas de mayor producción; además que sus costas son propicias para el arribo y ruta de paso de la cocaína proveniente de América del Sur”.
“Las organizaciones del crimen organizado también son complejas empresas de negocios, involucradas en una amplia variedad de actividades ilegales de altos ingresos económicos como son la extorsión y el secuestro. Sus actividades de lavado de dinero son amplias y abarcan una diversidad de actividades empresariales con fachada legal”.
“… se estima que en el estado están activas al menos nueve organizaciones de narcotraficantes. Entre mayor número haya, mayor influencia y penetración tienen en las comunidades locales. Hoy no existe ninguna fuerza policiaca local con el armamento, tecnología, o capacidad organizacional, capaz de competir con las que poseen las organizaciones criminales”.
Adenda: En la administración municipal de Luis Walton en Acapulco, fue cuando se certificaron, auténticamente, el mayor número de policías de la comuna. De mil 589 elementos evaluados en centros federales de la PGR, CISEN y Policía Federal (donde se les aplicó las pruebas: toxicológica, poligráfica, psicológica, médica y un estudio socioeconómico), aprobaron 487 elementos (30.6 por ciento) y fueron reprobados mil 70 elementos (67.3 por ciento). De estos últimos, por limitaciones presupuestales, sólo pudieron ser finiquitados conforme a la ley laboral, 403 elementos (26 por ciento), a un costo de 60.8 millones de pesos”.
Es por eso que la mayoría de las policías municipales en Guerrero permanecen infiltradas por “los chicos organizados”.

PD. Reconozco el esfuerzo inicial que ha emprendido la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, para transformar el infame “Gabinete de la Tómbola” que le impuso su “papá incómodo”, por un gabinete de trabajo itinerante, encabezado por ella misma, para llevar servicios, dádivas y obras a los habitantes en cada una de las regiones del estado. Ojalá no sea “flor de un solo día” o conlleve proselitismo preelectoral intra-partidario camuflajeado.

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