Ex candidato a diversos cargos de elección en Chilapa, donde no ganó ninguno, Raymundo Casarrubias se mantuvo cercano al controvertido ex perredista David Jiménez Rumbo y era el favorito de López Betancourt
Chilpancingo, Guerrero, 19 de noviembre de 2021. El presidente electo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Raymundo Casarrubias Vázquez, fue perredista, y a pesar de que renunció a su militancia hace aproximadamente diez años, sigue siendo muy cercano a su ex correligionario David Jiménez Rumbo, quien según fuentes de El Sur, operó para que ganara la elección ayer.
En el contexto de la cercanía de la elección en el TSJ, trascendió que Casarrubias era candidato impulsado por Eduardo López Betancourt, conocido jurista que participó en la campaña del candidato de Morena, Félix Salgado Macedonio para gobernador, y de Evelyn Salgado Pineda cuando le quitaron la candidatura al senador.
López Betancourt forma parte de la vieja clase política de Guerrero, aunque su carrera ha sido sobre todo en la UNAM y en la Ciudad de México.
El 13 de octubre organizó en su lujosa casa de Acapulco una comida en la que el invigtado especial era el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero y a la que asistieron también los ex alcaldes de Acapulco, Manuel Añorve y Luis Walton.
Se supo que Casarrubias apoyó a los dos sucesivos candidatos de Morena, y el 19 de agosto encabezó a un grupo de magistrados y jueces en una reunión con la entonces gobernadora electa.
Según una nota publicada en El Sur, ese día le presentaron a Evelyn Salgado un plan de 10 puntos donde le plantearon la capacitación del personal del TSJ, fortalecer la carrera judicial, transparencia y fortalecimiento del Consejo de la Judicatura, y destinar el 3 por ciento del presupuesto estatal para el Poder Judicial a fin de atender el rezago.
Casarrubias Vázquez fue postulado en 2008 por el PRD candidato a la alcaldía de Chilapa. En ese entonces la tercera sala unitaria del Tribunal Electoral del Estado anuló 21 casillas de la elección municipal, donde participaron funcionarios del gobierno de Alicia Zamora, y ordenó al Consejo Distrital Electoral con sede en Chilapa dar la constancia de mayoría a Casarrubias Vázquez.
No obstante, en la segunda instancia, el TEE revocó la sentencia de la sala unitaria y ratificó el triunfo del PRI-PVEM, cuyo abanderado fue Sergio Dolores Flores, asesinado el 18 de marzo de 2020.
En 2009, Casarrubias fue candidato del PRD a diputado federal del distrito 06. Compitió con la priista Alicia Zamora Villalva, proceso electoral que también perdió.
Después de que Casarrubias Vázquez perdió en 2008 cuando fue postulado por el PRD a alcalde de Chilpa, continuó con su militancia en el PRD. En ese tiempo pertenecía a una de las corrientes más importantes de ese partido, Grupo Guerrero (GG) que dirigía su amigo David Jiménez Rumbo, ahora cercano a Morena después de coquetear con el PRI y de apoyar a Luis Walton para candidato a gobernador de los morenistas .
Pero antes de 2011 Casarrubias renunció a su militancia, pues su equipo político lo impulsaría para ser magistrado, cuando el PRD tenía una amplia representación en el Congreso local, que nombra a los magistrados.
En 2011 fue designado magistrado de la Tercera Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) con sede en Iguala, cargo en el que permaneció hasta 2018 cuando fue ratificado en el cargo por un periodo de ocho años.
Estaba como magistrado de esa sala cuando ocurrió la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa en Iguala, el 26 de septiembre de 2014. Un hecho destacado fue la desaparición de las grabaciones de las cámaras de seguridad de las instalaciones del Palacio de Justicia, frente a las cuales fueron detenidos por policías y desaparecidos parte de los normalistas que viajaban en un aurobús; las exigencias de la entrega de las grabaciones de esos hechos han sido dirigidas a la entonces presidenta del TSJ, Lambertina Ga-leana y es una demanda que mantienen los padres de los 43.
En esta segunda ocasión fue magistrado de la sala penal unitaria del nuevo sistema acusatorio con jurisdicción en los distritos judiciales de los Bravo, Álvarez y Gue-rrero con sede en Chilpancingo.
Raymundo Casarrubias es originario de Ayahualco, municipio de Chilapa, y es licenciado en Derecho por la UAG.
Inició en 1989 como secretario de Acuerdos, adscrito al Juzgado Tercero de Primera Instancia del Ramo Penal del Distrito Judicial de Tabares, y con el mismo cargo estuvo en otros dos juzgados.
En 1998 fue secretario técnico y de organización del Consejo del Instituto para el Mejoramiento Judicial del TSJ, en el mismo año también fue coordinador de Asuntos Periciales, después en 2001 secretario general de acuerdos del Consejo de la Judicatura.
En 2011 designado magistrado de la Tercera Sala Penal y en 2018 magistrado de la sala penal unitaria del nuevo sistema penal acusatorio con jurisdicción en los distritos de los Bravo, Álvarez y Guerrero.
La cercanía del ahora presidente del TSJ electo con el grupo perredista de David Jiménez es tal que en 2012 ese equipo postuló a su hermano Jorge Casarrubias a la alcaldía de Chilapa, y en otros gobiernos municipales también hubo regidurías para la misma familia.
Pavel Casarrubias Sánchez, hijo del electo presidente del TSJ, actualmente se desempeña como subsecretario de Asuntos Políticos y Religiosos en el gobierno de la morenista Norma Otilia Hernández Martínez en Chilpancingo.
Texto: Rosalba Ramírez García y Luis Daniel Nava
