El equipo de Ancelotti gana 4-0 y logra el campeonato español número 35 de su historia, cuando restan cuatro jornadas para que finalice la competencia al llegar a 81 puntos. Barcelona, segundo, suma 66 unidades, luego de imponerse 2-1 al Mallorca que dirige el técnico mexicano Javier Aguirre
Madrid, España, 2 de mayo de 2022. El Real Madrid se proclamó ayer campeón de la Liga de España por 35ª vez en su historia después de completar uno de los mejores partidos del campeonato, de la mano de un inspirado Rodrygo Goes, ante el Espanyol por 4-0, desatando la alegría en las gradas del Santiago Bernabéu.
Apenas hubo historia en un duelo con solo un color, el blanco. Los de Ancelotti, que además se convierte en el primer entrenador de la historia en conquistar las cinco grandes ligas (España, Inglaterra, Italia, Alemania y Francia), salieron a morder desde el comienzo, con ganas de exhibirse para mostrar sus armas de cara a la vuelta de Champions.
Y debe haber tomado buena nota Pep Guardiola. Con hasta cuatro cambios en su once habitual, el conjunto madridista se mostró nuevamente intratable, incisivo y letal. Avisó pronto con un remate de cabeza de Mariano que sacaron entre el palo y Diego López, pero emergió entonces la figura de Rodrygo Goes.
Superada la media hora, una galopada por banda de Marcelo culminó con un centro al delantero brasileño, que tras librarse de dos defensas batió al guardameta gallego con un tiro raso cruzado (min.33). Solo diez minutos después, Mariano presionó la salida de balón de los pericos y Rodrygo recuperó el esférico para ampliar la cuenta con un remate pegado al palo (min.43).
Solo una posible mano de Lucas Vázquez dentro del área al borde del descanso y descartada posteriormente por el VAR dio esperanzas a los de Vicente Moreno de acercarse en el luminoso, una sensación que revivió al inicio de la segunda mitad con dos ocasiones consecutivas de Raúl de Tomás y de Vilhena.
Fue solo un espejismo que Marco Asensio se encargó de desenmascarar al aprovechar un pase en profundidad de Eduardo Camavinga para hacer el tercero y desatar la fiesta en el Bernabéu (min.55). Los gritos de “Campeones, campeones” solo quedaron interrumpidos por una espectacular parada de Thibaut Courtois a Aleix Vidal y por los aplausos a las entradas de Kroos, Benzema y Vinícius en el terreno de juego.
Isco se unió al festival goleador en una acción que el colegiado anuló por fuera de juego previo de Rodrygo, y, cómo no, Benzema se ocupó de cerrar la goleada 4-0 rematando de primera un pase atrás de Vinícius (min. 81).
Fue el francés el que junto al capitán Marcelo, que con este título supera el récord de Paco Gento como jugador blanco, el que levantó la copa al cielo de Madrid, que arropará también a los madridistas el próximo miércoles, en el que afición y equipo deberán volver a ser uno para remontar el 4-3 de la ida ante el Manchester City. PSG y Chelsea ya han sufrido la épica del Bernabéu, que quiere vivir otra noche épica camino de la “Decimocuarta”.
Vence Barcelona al Mallorca del Vasco
El Barcelona regresó a la senda de la victoria en el Camp Nou, luego de derrotar ayer 2-1 al Mallorca del mexicano Javier Aguirre.
Ya con la Liga definida, el conjunto culé sumó los tres puntos en su lucha por amarrar el pase a la siguiente Champions League.
Los tantos fueron de Memphis Depay y Sergio Busquets, al minuto 25 y 54’, respectivamente.
Tras un tanto anulado al uruguayo Ronald Araújo por fuera de juego, revisado por el VAR, el Barça pudo abrir el marcador en el 25, con un certero disparo en el área de Depay, que había recibido un pase largo de Jordi Alba.
Poco después, Gerard Piqué salió de cambio, cerca de la media hora de partido, con problemas físicos.
En la segunda mitad, Sergio Busquets amplió la cuenta con un disparo cruzado en el área.
Por el Mallorca descontó Antonio Raíllo, al 79’, tras un centro que el defensor alcanzó a desviar con la rodilla.
El Barcelona llegó a 66 puntos, mientras que el cuadro de Aguirre se queda con 32 unidades y se mantiene en la posición número 16, por arriba del Cádiz, Granada, Deportivo Alavés y el Levante.
En Granada, el Celta de Vigo empató 1-1 con el equipo local; Néstor Araujo jugó 77 minutos y Orbelín Pineda se quedó en la banca.
Texto: Europa Press
