14 noviembre,2023 4:28 am

Daña Otis unos 4 mil restaurantes entre Pie de la Cuesta y Barra Vieja: Canirac

 

Los que tuvieron pérdida total son los que se ubican en zona de playa, informa el presidente Enrique Castro Soto. Advierte que las “consecuencias serán muy complicadas para el puerto de Acapulco” si no los apoya el gobierno, pero no con las prórrogas del IMSS, ISR ni con los créditos del Bienestar o de los bancos que al final son un negocio

 

 

 

Acapulco, Guerrero, 14 de noviembre de 2023. El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Acapulco, Enrique Castro Soto informó que en Acapulco hay unos 4 mil inmuebles de venta de comida que resultaron afectados por el paso del huracán Otis, los de la zona de playa tuvieron pérdida total en su infraestructura.

En declaraciones ante de una reunión con de empresarios locales en el restaurante El Camarón de Jackie, Castro Soto indicó que el sector restaurantero es uno de los más afectados por el impacto del huracán, que dejó daños en la estructura de los inmuebles, pero también por el robo que se dio con la rapiña.

El dirigente dijo que a diferencia de las afectaciones que tuvieron los hoteles tanto en las fachadas como en el interior, no hubo daños en las estructuras como sí ocurrió con los restaurantes, además de que la inversión en este sector son de familias locales, y emprendedores que tardaron años en hacerse de un patrimonio propio.

Agregó que en Acapulco desde Pie de la Cuesta, hasta Barra Vieja hay unos 4 mil establecimientos de venta de alimentos, que incluyen a las fondas, “el daño de manera directa está en un 90 por ciento de los negocios en diferentes proporciones”, dijo.

El restaurantero reclamó que a 20 días del paso del fenómeno el sector que agrupa no ha podido realizar la cuantificación de los daños por las fallas en las comunicaciones y estimó que de los 90 agremiados que tiene, ha entablado comunicación con unos 50 socios, y de este número la mitad reporta pérdida total de sus instalaciones.

Además de que la gran mayoría sufrió robos durante el saqueó a comercios. Detalló que en el caso de los restaurantes, se llevaron estufas industriales, licuadoras industriales, mobiliario, televisores y hasta la vajilla “esto nos preocupa como uno de los sectores más afectados”, señaló.

Castro Soto reclamó que hasta ayer sólo se sabía de tres programas de ayuda para los afectados, enfocados a las viviendas de 8 mil pesos, los créditos de bienestar de 25 mil a 60 mil pesos, y los créditos de los bancos, pero recordó que los créditos del Bienestar no alcanza para quienes tienen un restaurante con palapa que va de 100 mil hasta un millón y medio de pesos su edificación.

Para quienes perdieron las cocinas industriales no les alcanzará comprar una estufa industrial que está entre los 40 y 45 mil pesos, “es un reto”, y recordó que tampoco los créditos de Nacional Financiera les convienen porque este sector no es atractivo para los bancos, que además analizan la situación crediticia de los solicitantes, “la banca al final del día es un negocio”.

Agregó que para el comercio local es difícil porque vienen arrastrando los dos años de la crisis por la pandemia por Covid-19, y un año de la crisis inflacionaria, que afectó más a algunos comercios por el incremento de precios en los insumos.

Dijo que ha estado gestionando ante la Secretaría de Economía federal un apoyo específico para este sector, “estamos muy preocupados porque tenemos el compromiso de los sueldos, del aguinaldo para diciembre”, y estimó que unos 10 restaurantes afiliados a Canirac en la actualidad han abierto, ocho financiados con la compra de comida de la organización World Central Kitchen, y el resto para diciembre tal vez comiencen a operar “muy limitados”.

El restaurantero dijo que al sector de nada le sirve las prórrogas para el para el pago de IMSS, ISR, “de nada me sirve que yo no pague una deuda que se va a acumular, trayendo todos los compromisos de renta, de levantar mi negocio, de la nómina”.

“Requerimos forzosamente del apoyo del gobierno para salir adelante con nuestros negocios, o de plano las consecuencias serán muy complicadas para el puerto de Acapulco”, resaltó.

 

 

 

 

 

 

 

 

Texto: Jacob Morales Antonio/ Foto: Carlos Carbajal