Dice el doctor en ciencias forestales que aún cuando se trata de una “gran área de reserva” con 348 mil 140 hectáreas protegidas ésta se debe ampliar más, pues Guerrero es una de las entidades con mayor diversidad. Plantea que la Conanp debe elaborar un programa y tener equipo especializado con un director al frente para arrancar el proyecto. Señala que en la zona hay “ciertas condiciones de gobernabilidad” para trabajar, aunque podrían darse amenazas de grupos criminales
Ciudad de México, 11 de enero de 2024. El biólogo y doctor en ciencias forestales Octavio Klimek Alcaráz calificó como una buena noticia la declaratoria que nombra a la Sierra Tecuani como Área Natural Protegida, pero considera que debe tener una partida presupuestaria para que no quede en “un mero decreto de papel” y se tengan así los recursos necesarios para un proyecto de tal magnitud.
Consultado por El Sur, donde publica un artículo semanal, Klimek señaló que a pesar de que Guerrero es considerado como una de las entidades de mayor diversidad en el país, no había suficientes espacios considerados para la protección de sus ecosistemas.
“Guerrero es un estado que, pese a ser uno de los estados más diversos en términos biológicos del país, ha sido un estado en el que realmente se ha hecho poco en términos de conservación. No se compara, por ejemplo, con las reservas que hay en el noroeste, por ejemplo, la península de Baja California o Chiapas” aseguró.
Por lo anterior reconoció que si bien sigue siendo poca la superficie respecto a la importancia de biodiversidad en el estado, es una buena noticia la protección que se brinda al área de la Sierra Tecuani.
“Son pocas áreas, es poca la superficie, insisto, pese a la importancia para la biodiversidad que contiene el estado, pero es una buena noticia, que se decrete en el área de la Sierra Madre del Sur una nueva área en estos municipios, la reserva de la biosfera Sierra Tecuani” dijo.
Explicó que al considerar una superficie como Área Natural Protegida, se busca conservar los ecosistemas que en ella viven y que al catalogarla de tal forma, es debido a que existe un interés por las especies en esa zona.
“Es porque esa zona además tiene, digámoslo así, un interés porque es representativa de un determinado ecosistema, de un grupo de especies que son necesario que se cuiden ante las tasas de extinción, actualmente derivadas de las actividades humanas en el planeta” agregó.
Mencionó que la Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conanp) es la encargada del cuidado de la superficie, pero deberá tener una partida presupuestaria para que no quede en lo que señaló “un mero decreto de papel” y se tengan los recursos necesarios para un proyecto de tal magnitud.
“Tenemos que apoyar al área. Obviamente la Conanp lleva mano aquí dentro porque va a tener que coordinar a partir del programa de manejo toda la inversión pública” añadió.
Agregó que cuando se declara un Área Natural Protegida, sirve como un catalizador para la zona y llegan a ser importantes para el desarrollo donde se ubican y que en el caso de que eso se logre en la Sierra Tecuani resultaría positivo.
“Las Áreas Naturales Protegidas, sobre todo las de reserva de la biósfera son catalizadores o potencian el desarrollo, más en las áreas de influencia. Si se logra que esta área tenga éxito con desarrollo, sería muy positivo” comentó.
Señaló que se han tenido “pocas áreas” en Guerrero y que en el proyecto recientemente declarado se debe considerar la importancia de las uniones de ejidos que participaron activamente.
Klimek consideró que la Sierra Tecuani es “la gran área de reserva” que se logra en Guerrero, pero aún con las más de 340 mil hectáreas consideradas para su protección, se debe ampliar más.
Aceptó que en el contenido del decreto, “salta” que la zona de núcleo sea de sólo mil 611 hectáreas, lo que es una “pequeña parte”. Explicó que la zona de núcleo es donde “prácticamente dejas libres los procesos del ecosistema” y se permite que sigan transcurriendo y no existe la intervención humana.
“Lo idóneo sería que Guerrero tuviera más. Un poco más de zona de núcleo, mucho más grandes para que pueda ser más relevante” opinó el especialista.
Indicó que una de las primeras acciones que debe tomar la Comisión tras el decreto, es la expedición de un programa especial para el manejo de la reserva de Sierra Tecuani.
De igual forma externó que se debe nombrar a un director de la reserva, por la importancia de la misma, además de considerar un equipo especializado para hacer cumplir con lo pactado.
“Ahora yo esperaría que junto con el área, se desginara a un director de la reserva. Va a ser la reserva más importante del estado. Director de la reserva, un equipo de staff para que realmente se aboquen a trabajar con las comunidades y hagan cumplir el decreto y que haya recursos para esto” comentó.
Sobre las amenazas que se pueden generar en la zona de influencia de la Sierra Tecuani, aceptó que las condiciones de delincuencia organizada están presentes, pero reiteró la inversión en la zona para mejorar las condiciones.
“Hay ciertas condiciones de gobernabilidad en esa zona, obviamente las amenazas siempre imperantes actualmente de la delincuencia organizada, siempre pueden estar, necesitamos inversión, aquí es donde viene el problema”.
Este 8 de enero se publicó el decreto por el que se declara un Área Natural Protegida con la categoría de reserva de la biósfera, el sitio Sierra Tecuani, ubicado en los municipios de San Miguel Totolapan, Ajuchitlán del Progreso, Tecpan de Galeana, Coyuca de Catalán y Atoyac de Álvarez, estado de Guerrero, abarcando 348 mil 140 hectáreas.
Texto: Juan Luis Altamirano Uruñuela
