30 agosto,2023 4:32 am

Denuncia familia de marino desaparecido que la Semar se llevó documentos del juzgado de Caleta  

 

Extraen la declaración de ausencia de Adrián Marcelo Guzmán Nava porque aún está registrado como un agente activo y que sigue cobrando su salario después de dos años de que no ha sido localizado

 

 

Acapulco, Guerrero, 30 de agosto de 2023. La familia del marino desaparecido Adrián Marcelo Guzmán Nava denunció que empleados de la Secretaría de Marina (Semar) se llevaron recientemente los documentos de la declaración de ausencia del juzgado de Caleta y no reconoce su desaparición porque aún está registrado como un agente activo y que sigue cobrando su salario después de dos años de que no ha sido localizado.

En entrevista con El Sur, señalaron que la Base Naval ha ocultado información de su desaparición y afirmaron que sólo favorecen a su esposa, Nayeli Rosales Sotero, a quien culpan de la desaparición. Revelaron que la hoja de seguro de su hijo que tiene a sus papás como beneficiarios fue alterada y que en las oficinas centrales de la Semar en la Ciudad de México tiene otro documento en el que sólo están registrados la pareja del desaparecido y su hija.

Adrián Marcelo Guzmán Nava, de 22 años, desapareció en la noche del viernes 23 de julio de 2021 después de que salió de la Base Naval con algunos de sus compañeros marinos, entre ellos el teniente Néstor Ocampo Montalvo, a convivir primero en el bar Tóxica y luego en el departamento del teniente en Puerto Marqués. Dos de sus compañeros, Pedro Evaristo y Silviano Villanueva, lo vieron por última vez afuera del Oxxo que está en el crucero de Puerto Marqués a las 11:30 de la noche.

La mamá de Adrián, Clementina Nava, había quedado de verlo en su casa en la comunidad de El Bejuco, perteneciente a los Bienes Comunales de Cacahuatepec, el sábado, pero no llegó. Fue hasta el lunes que su nuera Nayeli Rosales Sotero le contó por teléfono que Adrián ya llevaba tres días de que no aparecía.

Clementina fue rápidamente a buscarlo a las instalaciones de la Octava Región Naval Militar, donde le confirmaron la ausencia de Adrián y el teniente Ocampo Montalvo le dijo que su hijo iba a ir al Coloso a ver a una amiga, pero Clementina dijo que eso no es verdad porque tiene esposa, “eso es una vil mentira”.

El martes 27 de julio Clementina puso la denuncia, primero en la Fiscalía General de la República (FGE) por recomendación del teniente Ocampo y después puso otra en el Ministerio Público de Costa Azul. El mismo teniente le recomendó preguntarle a agentes de la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), y Clementina fue, pero le negaron que lo tuvieran.

El capitán Tailer, cuyo nombre completo no les han querido dar, le dijo que la última señal que se tiene del teléfono de Adrián es en Tres Palos y luego Clementina concluyó que los “comunitarios” de la UPOEG eran responsables porque en marzo de 2021 dos veces fueron a su casa por un supuesto pleito con un vecino, “la segunda vez eran como 15 y todos armados rodearon mi casa, con las armas apuntando”, relató.

Denunció, al igual que en su protesta afuera de la Base Naval en el segundo aniversario de la desaparición de Adrián, que Nayeli Rosales Sotero “lo entregó” a agentes de la UPOEG por un préstamo que le hizo Adrián a su suegro Alberto Rosales Claudio de 80 mil pesos y que ya no le quiso pagar. También responsabilizan a su mamá, Irlanda Sotero Gabino.

Clementina señaló a Nayeli Rosales de extorsionarla y contó que un hombre le marcó, supuestamente desde un teléfono de su nuera, el 23 de octubre de 2021 para pedirle 25 mil pesos a cambio de su hijo. No entregaron el dinero porque no les dieron pruebas de vida de Adrián.

Clementina recibió otra llamada en 2022 y le pidieron 50 mil pesos y el punto del intercambio fue en terminal de Costa Line que está frente al parque Papagayo. Llegó en un taxi a las 10:20, pero luego salió huyendo porque un hombre “sospechoso” apareció y pensó que sería una trampa para matarla.

Entregó los números telefónicos con los que la extorsionaron al agente del Ministerio Público adscrito a la unidad de investigación sector Costa Azul, Miguel Rosete Rodríguez, para que los investigara y también le pidió que revisaran los videos de la terminal de autobuses. Sin embargo nunca vio los videos y el agente le dijo que el juez no aceptó las pruebas.

Después, una persona le habló por teléfono a Clementina para decirle que Joana J. Calderón intentó extorsionar y amenazar a Adrián por la supuesta relación de Nayeli con su esposo, quien era su jefe cuando trabajaba en el hotel Princess. El capitán Tailer y el teniente Ocampo Montalvo le confirmaron estas amenazas y que Adrián quiso poner una denuncia en la Marina, pero ellos dos le dijeron “que tenía que ir a Fiscalía de Costa Azul para que procediera” y fueron, pero no le tomaron la denuncia porque los “mensajes no contaban”.

Al año de la desaparición de Adrián, Clementina acudió a la Base Naval porque recibió un citatorio en su casa. María Luisa Muñoz Patiño, teniente jurídica, le pidió empezar los trámites de la declaración de ausencia de Adrián porque su esposa Nayeli no los quiso hacer y así poder cobrar los seguros.

El 23 de enero de 2023 salió la sentencia dictada por Saraí Díaz Rojas, juez Sexto de Primera Instancia en Materia Familiar del Distrito Judicial de Tabares, a favor de Clementina como representante legal de su hijo. El documento, que pudo ser leído durante la entrevista, dicta que se tenían que publicar edictos en un periódico de Chilpancingo y otro en la Ciudad de México, y tuvieron que empeñar su casa para pagar.

Les pidieron esperar un mes más para regresar al juzgado por el documento final y mientras tanto el 6 de julio acudieron a la Ciudad de México para preguntar sobre el caso de Adrián y urgir que le dieran el dinero del seguro “porque ya estoy hasta acá de deudas”, dijo Clementina.

Expusieron el caso en las oficinas centrales de la Semar, pero allá “no sabían que había un marino desaparecido” y lo buscaron en su base de datos y aparece que “Adrián está activo y sigue cobrando” su quincena, contó Clementina. Les preguntaron si existía una carpeta de investigación y si hicieron el trámite de declaración de ausencia, lo que evidencia que “ellos no tienen esa documentación porque la Marina de Acapulco ha ocultado la desaparición de mi hermano”, afirmó Griselda.

Mostraron en la entrevista un documento con fecha del 19 de junio y firmado por el contralmirante Jorge Medina Antonio que supuestamente era la respuesta de la Ciudad de México de que aceptaba la sentencia por declaración de ausencia.

Asimismo, empleados de la Semar les mostraron la hoja de trabajo de Adrián donde salen como beneficiarias su esposa y su niña y no sus papás como el documento que ellos tienen y mostraron y que especifica que el 50 por ciento es para cada uno de ellos. “A ella la protege Marina porque hasta le ayuda a rellenar su documentación y si Nayeli no tiene acceso a los documentos de mi mamá, entonces va a la Marina para que ellos los saquen y se los entreguen a Nayeli”, afirmó Griselda.

En enero de 2021, antes de ser mandado por un tiempo a Sonora, Adrián le contó por video llamada a su hermana Griselda que “las cosas se están poniendo tensas aquí en Base” porque se estaba dividiendo en dos grupos y si fuera a desaparecer, “ustedes pues lo que tienen que hacer es ver la hoja de beneficios, ahí está ya todo repartido y ellos les van a dar a ustedes lo que por derecho les pertenece”.

Los familiares de Adrián regresaron a Acapulco y se presentaron este 7 de agosto a los juzgados de Caleta, pero “el coordinador Raymundo” les dijo “que se llevaron la hoja, se llevaron documentos, el certificado de su hijo”. La juez Díaz Rojas les dijo que eran cuatro personas de la Marina, entre ellos una mujer, pero no supo dar sus nombres cuando Clementina se los pidió y tampoco dejaron algún escrito.

La familia de Adrián no ha regresado desde entonces a la Marina porque así como fueron “a sacarse los documentos de mi hermano, también tememos que un día vaya y nos saque en la noche”, dijo Griselda. Una parte de su familia ya se fue de Acapulco y expuso que probablemente se vayan de la ciudad por las amenazas que reciben cada vez que acuden a la Fiscalía, aseguró.

Clementina responsabilizó de la desaparición de su hijo al teniente Ocampo Montalvo, al capitán Tailer y al comandante Pablo Lesley Cruz Bello, este último porque el 23 de noviembre de 2021 le dijo que Adrián se había visto con una mujer en el crucero de Cayaco, que hasta tenían su número, pero cuando fue citado a declarar a la Fiscalía, negó sus palabras.

El 27 de julio la carpeta de investigación por la desaparición fue trasladada a Chilpancingo, pero tampoco hay avances con la licenciada Victoria Buda porque ella misma les dice que “tiene miedo” del caso y otras evasivas.

Clementina pidió que le ayuden a encontrar a su hijo vivo o encontrar sus restos si fue asesinado cuando lo desaparecieron. Pero si “mi hijo aparece muerto en esta fecha, que aparezca su cuerpo, fue personal de la Marina y Nayeli y sus familiares, madre y padre”, sentenció.

La última irregularidad es una tarjeta de Bienestar a nombre de Adrián Marcelo Guzmán Nava de la que supieron a mediados de julio. Preguntaron quién la tramitó, pero no les supieron decir y la Fiscalía no investiga, señaló su papá Modesto Guzmán Medel.

 

Texto: Ramón Gracida Gómez / Foto: Jesús Trigo