15 octubre,2024 4:38 am

Denuncian que a siete años sigue impune el asesinato de Ranferi Hernández y su familia

 

Chilapa, Guerrero, a 15 de octubre de 2024.-  Familiares y líderes de organizaciones sociales exigieron justicia, a siete años del crimen del dirigente social Ranferi Hernández, su esposa Lucía Hernández, suegra Juana Dircio y ahijado Antonio Pineda. Acusaron que este multihomicidio permanece en la impunidad.

Propusieron la creación de una fiscalía especial o mecanismo para esclarecer las violaciones a derechos humanos y crímenes de luchadores sociales en Guerrero.

A las 11 de la mañana familiares y amigos de las víctimas colocaron una ofrenda de flores silvestres, veladoras, elotes hervidos, calabazas y semillas nativas en el lugar donde aquella noche del 14 de octubre de 2017 fueron encontrados sus cuerpos, en la carretera hacía Ahuacuotzingo, a la altura de la localidad de Nejapa, municipio de Chilapa.

Lo que parecía ser una conmemoración breve se convirtió en un homenaje a Ranferi Hernández y su familia, así como en una serie de exigencias a las autoridades, ahora de Morena, que no han dado seguridad ni justicia en estos casos.

El acto inició a las 10:50 de la mañana y concluyó a las 12:20 de la tarde. En ese lapso la vía fue cerrada a la circulación. Una patrulla de policías estatales llegó al lugar.

Asistieron dirigentes e integrantes del colectivo de desaparecidos Lupita Rodríguez Narciso; del Colectivo contra la Tortura y la Impunidad; Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG); Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y un comité de padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos en 2014.

Son siete años que seguimos luchando, dijo Diana Hernández, hija del extinto dirigente.

“Este acompañamiento es por la exigencia de justicia y romper la impunidad que prevalece, el coto de impunidad que prevalece en todas las instituciones del Estado del mexicano.

“Hasta la fecha no hay respuesta, somos los invisibilizados, un movimiento que ha sido aislado y finalmente tenemos nuestra digna rabia y queda la tarea pendiente de justicia”, expresó la también ex candidata a diputada local.

En la campaña de 2021, los hijos de Ranferi Hernández, así como integrantes de la organización Vicente Guerrero que fundó, participaron en la campaña a la gubernatura de Félix Salgado y luego de su hija la hoy gobernadora Evelyn Salgado.

A Diana Hernández le dieron una dirección en el Instituto Guerrerense para la Atención Integral de las Personas Adultas Mayores (IGATIPAM); renunció en febrero último para participar de nuevo en el proceso interno de Morena.

En el acto, la representación del colectivo Lupita Rodríguez denunció que en el país existen 116 mil 335 desaparecidos, de los cuales 4 mil 249 son de Guerrero.

“Todos hemos sido víctimas delito, pero no nos debemos quedar callados pese a la inseguridad que se vive a diario”.

Dijo que se siguen viviendo hechos lamentables como el asesinato del presidente municipal de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán.

Apuntó que Chilapa es uno de los municipios más inseguros de la entidad y del país en donde la prensa y la ciudadanía tiene que quedarse callado porque conocen el riesgo de lo puede pasar.

“Todo el país es exactamente lo mismo que este lugar”, enfatizó.

Nicolás Chávez Adame, de la APPG y también ex funcionario del gobierno de Evelyn Salgado. Expresó que a siete años del caso continúan reclamando justicia en un ambiente de inseguridad.

“Responsabilizamos a los tres niveles de gobierno de lo que le pueda pasar a los diferentes activistas, en un estado donde se les exige el respeto a los derechos humanos.

“Recordamos a Ranferi Hernández como hermano de lucha, a doña Lucía, a doña Juanita y Antonio. Que Dios los tenga en su santa gloria y seguro están viendo que siguen los procesos de lucha con dignidad en Guerrero en su memoria y de muchos compañeros”, añadió Nicolás Chávez.

Por los padres de los 43 de Ayotzinapa tomó la palabra Bernabé Abraham Gaspar para contar parte de su experiencia en la búsqueda de verdad y justicia.

“Al presidente (Andrés Manuel) López Obrador le brindamos el apoyo, confiamos en él, sin embargo, las palabras que dijo se los llevó el viento porque ninguna respuesta, ninguna línea nos dio que llevara al paradero de los muchachos. Al contrario, nos estuvo atacando.

“Sabemos que participo el Ejército, pero este gobierno no quiere que se les toque”, dijo.

Raymundo Diaz Taboada, del Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad, dijo que la familia de Ranferi vive siete años de impunidad. “Gobiernos van, gobiernos vienen, partidos cambian en el poder y sin embargo la situación es la misma”, afirmó.

La exigencia para que haya justicia es que el Estado reconozca su responsabilidad y no nombrar a chivos expiatorios para lavarse la cara, dijo.

“El Estado ha cometido crímenes de lesa humanidad que están impunes y mientras no haya justicia las victimas seguirán siendo víctimas. Y la impunidad regirá independientemente del partido que este en el gobierno.

“Estamos aquí exigiendo justicia porque no puede haber democracia si hay desaparecidos, torturados y gente que tiene que abandonar su tierra porque no hay condiciones de derechos humanos dignas”, agregó Díaz Taboada.

El director del Centro Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, rememoró que Ranferi Hernández tuvo que pelear con los caciques, reivindicar la lucha de los campesinos de la sierra de Atoyac y de Coyuca y defender a los asesinados de Aguas Blancas.

“Estaba en la trinchera y no tuvo ninguna garantía para pelear. Ese es el problema de los luchadores sociales que dentro del escenario de Guerrero implica poner en riesgo la vida.

“Implica colocarse contra un paredón, contra un sistema que sigue protegiendo a los perpetradores”.

El defensor de derechos humanos consideró que el atentado y el crimen atroz contra Ranferi y su familia es un mensaje de terror. “Es el terror que se instala en nuestra sociedad y que se permite por parte de las autoridades que son cómplices.

“Imagínense acá hay un retén militar y la criminalidad se esparce por todos lados. Los que hicieron este crimen sabían que no iba a haber ninguna reacción”, indicó.

El abogado de Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, recordó que en sus tiempos universitarios Ranferi Hernández les enseñó a alzar la voz.

“Era de la casta de luchadores sociales que no se doblegaba de los cuerpos policiacos, de las autoridades de gobierno, ante los caciques, que eran lo mismo en ese tiempo caciques y gobierno, pero no le temblaba la mano ni la voz para denunciar las injusticias”.

Señaló que hoy en día cuestionar al gobierno te vale que te tachen de conservador y que estas en contra de las buenas causas.

“Ese es un error que hay en el país y hoy debemos retomar la acción del compañero Rafael. Hoy no podemos callar que este gobierno que este gobierno no analizado el tema de la justicia en el país”.

Planteó la creación de una Fiscalía especial o un mecanismo para esclarecer la violación a los derechos humanos y los asesinatos de luchadores sociales.

Abel López, yerno de Ranferi y dirigente de la Organización Campesina Vicente Guerrero, coordinó el mitin y entre cada participación leyó semblanzas de Ranferi, Lucía Hernández, Juana Dircio y Antonio Pineda.

El acto estuvo acompañado de consignas y concluyó con el himno Venceremos.

Texto y foto: Luis Daniel Nava