14 diciembre,2020 9:11 am

Descifra Zidane la fórmula secreta de Simeone y vence 2-0 al Atlético

Con goles de Casemiro y Carvajal, el Real Madrid se impone a su histórico rival de la capital española, le quita el invicto y debilita su condición de candidato al título de la Liga. Llegan a 23 puntos y se acercan a tres de los colchoneros, que comparten el liderato con la Real Sociedad

Madrid, España, 14 de diciembre de 2020. El Real Madrid resolvió el enigma que ningún otro equipo había podido resolver esta temporada en la Liga española después de tumbar al invicto Atlético de Madrid 2-0, con goles de Casemiro y Carvajal, que apagan la condición de candidato al título de los colchoneros, lejos de su mejor versión esta campaña durante todo el encuentro.

El equipo del Cholo Simeone, que había rechazado todos los piropos en la previa, ya solo tiene tres puntos de ventaja sobre su incómodo vecino, al que las crisis le tocan de refilón pero nunca le parten. El sábado pasado volvió a tirar de galones, motivado como en las grandes ocasiones, los de Zidane firmaron uno de sus mejores partidos de la 2020/21.

Ya ocurrió en Milán, en Sevilla, en Barcelona o incluso el pasado miércoles en Valdebebas ante el Borussia. Cuando hay que dar la talla, la dan. Ese es el Real Madrid de este curso, capaz de lo mejor y de lo peor, y sobrado de talento cuando la “vieja guardia” funciona engrasada. Es decir: Modric, Kroos y Benzema. Esa columna vertebral que sigue siendo inigualable por mucho que pasen los años.

El croata fue el primero en avisar al vecino del Metropolitano, rozando el palo a los cinco minutos, y metiendo el miedo en el cuerpo a un Atleti que no se encontró a gusto en ningún momento. Cinco minutos después apareció Benzema, varita y sombrero incluidos, para estampar el cuero en el poste -previa mano de Oblak-.

Cinco más tarde, sin gran oposición, llegó el 1-0 en un córner botado por Kroos y rematado por Casemiro. El centrocampista brasileño se vio beneficiado por un resbalón del mexicano Herrera y cabeceó a placer. Esta era la primera vez que el Atlético estaba por debajo en el marcador en la presente Liga. Ante la dificultad, los de Simeone dieron un paso al frente.

Joao Félix se abrió hueco y Carrasco, sustituido al descanso, estuvo cerca del gol olímpico al borde del descanso, pero no habría más movimiento. El marcador daba la razón a un Real Madrid que encontró más petróleo en el segundo asalto, precisamente cuando más asentado estaba el conjunto rojiblanco. En el peor momento, tras un nuevo aviso de Lemar que terminó en el lateral de la red.

En esta ocasión fue Dani Carvajal, que volvió al once tras su suplencia en Champions, celebró su regreso y -su reciente paternidad- con un gol de bandera. El de Leganés golpeó el cuero desde fuera del área, pegó en el poste y Oblak, en su intento por detenerlo, acabó marcándose en propia puerta. No había remedios, ni atajos ni soluciones milagrosas que evitaran la primera derrota de la Liga.

El Atlético de Madrid fue completamente anulado, casi sin presencia de Luis Suárez, y alejado de la verticalidad que ha mostrado en las últimas fechas. Saúl, que salió desde el banquillo, tuvo la más clara pero se topó con Courtois, dejando el derbi sin historia y el campeonato, más igualado. Para unos: un resbalón en el Di Stéfano; para otros: un puñetazo sobre la mesa.

Sale Messi al rescate y el Barça vence a Levante

Por su parte, el Barcelona logró una victoria un tanto agónica ayer ante el Levante gracias a un gol de Leo Messi en el minuto 76 (1-0), tres puntos obligados para el equipo de Ronald Koeman en la jornada 13 de la Liga española celebrada en el Camp Nou, que los deja en la octava posición de la tabla con 17 unidades.

Con un bagaje desastroso en la competición doméstica, el Barça saltaba más que exigido un nuevo fin de semana y el paso de los minutos se tradujo en una angustia azulgrana peligrosa. Messi, en su décimo remate de la noche, logró el 1-0 de la victoria aunque no tanto de la tranquilidad hasta el pitido final.

Tras los dos últimos bochornos, ante el Cádiz y la Juventus, el Barça ve el liderato a nueve puntos, aún desde la octava posición. Koeman cambió de esquema para dar a los jugadores un 4-3-3 que venía sonando los últimos días. El Levante sin embargo fue mejor en el inicio, superando una débil presión de los locales.

Una falta de intensidad que no se podía permitir el Barça y que cerca le estuvo de costar el 0-1 de De Frutos, en mano a mano con Ter Stegen. El cuadro culé logró corregir esa falta de ritmo y comenzó a tener sus ocasiones, hasta llegar a asediar en el tramo final del primer tiempo, sin gol por culpa de Aitor Fernández.

Griezmann la tuvo en una falta que le puso Messi en la cabeza y Alba y de nuevo el galo también estuvieron cerca de ver la red. No le sentó bien el descanso al Barça, que pareció empezar de nuevo de cero, en busca de motivación o juego en sus botas. Sin embargo, el Levante dio varios pasos atrás y se quedó sin amenazas.

Así, con Pedri dando más movilidad al ataque, los de Koeman volvieron a coleccionar llegadas, pero sin inspiración suficiente. Los focos señalaban a un Messi que esta temporada no termina de sonreír, quizá porque quiso irse a otro equipo. Messi sin embargo fue quien más lo intentó y al final quien salió al rescate.

En una mala salida de balón, el robo culé lo transformó en asistencia de gol De Jong, para que Messi celebrara un zurdazo de los que no parece haber olvidado. Los de Paco López aún inquietaron, con Morales de revulsivo, pero esta vez no hubo tragedia en el Camp Nou, con tensión final por una posible mano y penalti de Umtiti, y sí un poco de aire, con Messi de protagonista.

Texto: Europa Press