México / Madrid, 21 de abril de 2020. La rápida propagación de la enfermedad del nuevo coronavirus en América Latina pone a la población en la disyuntiva de mantener las restricciones implementadas por los gobiernos para frenar el virus o salir a las calles en busca del sustento diario.
En la ciudad brasileña de Río de Janeiro el número de muertos y de casos positivos ha aumentado en las favelas, en medio de las dificultades de su población para mantener la cuarentena y el aislamiento social decretados por las autoridades.
Al menos 14 personas han muerto en estas favelas y unos 100 casos han sido confirmados en las comunidades, aunque se teme que existan miles de casos sospechosos, pero de nada sirve ello cuando la gente se enfrenta a la disyuntiva de quedarse en casa o salir a trabajar para comer, aunque tengan miedo a un “enemigo invisible”.
El Ministerio de Salud reportó ayer 40 mil 581 infectados, de los cuales han muerto 2 mil 575, una tasa de letalidad del 6.3 por ciento; sin embargo, hay ciudades que ya abrieron las tiendas luego de un mes de cierre obligatorio, como es Florianópolis, una isla turística que es la capital del estado de Santa Catarina (sur).
En Argentina, a un mes de establecido el aislamiento obligatorio para mitigar la propagación de la Covid-19, uno de los principales desafíos del gobierno es mantener la actividad económica, donde amplios sectores ya reportan caída de ventas, a lo cual se suma un mercado laboral deprimido.
Según la consultora Ecolatina, “la pandemia ha puesto en riesgo la mitad de los puestos de trabajo en Argentina”, y en la medida que se extiende el confinamiento crece el riesgo de que “no se puedan pagar salarios o que cierren empresas”.
Por lo pronto, al país, donde hay 3 mil 031 casos, con 142 fallecimientos, llegó ayer un cargamento con 14 toneladas de material médico procedente de China en un avión de la estatal Aerolíneas Argentinas.
En Chile, donde se reportan 10 mil 507 casos, con 139 muertos, la subsecretaria de la Salud, Paula Daza, dijo que “se deben seguir manteniendo todas las medidas de prevención y particularmente cuidar a nuestras personas mayores y enfermos crónicos, y de una manera muy responsable retomar nuestra vida”.
Chile se ha inclinado por cuarentenas “estratégicas y dinámicas” por zonas, lo que varía cada semana de acuerdo con el número de casos nuevos, así como con la fragilidad de personas mayores y enfermos crónicos en cada comuna.
Ecuador alcanzó los 10 mil 128 infectados y 507 decesos por el nuevo coronavirus, por lo que el gobierno decidió endurecer la política de salvoconductos, tras detectar un manejo inadecuado del documento.
Perú se encuentra en la fase más aguda de la pandemia desatada por el nuevo coronavirus, con un índice de contagios que llegó a los 16 mil 325 casos positivos, informó ayer el ministro de Salud, Víctor Zamora.
El funcionario anotó que en el trigésimo sexto día del estado de emergencia, se han reportado 445 muertes.
“No olvidemos que estamos en la fase más aguda de la enfermedad y el número de casos aumentará. Eso ya lo habíamos previsto, ya habíamos anunciado que en estas dos semanas iba a aumentar”, expresó a la cadena Radio Programas del Perú.
El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, advirtió ayer que el país sudamericano enfrentará “momentos muy difíciles” como consecuencia de la caída histórica este lunes del precio del petróleo en el mercado internacional que llegó inclusive a menos de cero.
En Colombia, con 3 mil 977 casos y 189 muertos, la alcaldesa de la capital colombiana, Claudia López, aseguró que no permitirá que sea reabierto el aeropuerto Eldorado de Bogotá el próximo 27 de abril, cuando finalice el Aislamiento Preventivo Obligatorio o cuarentena nacional.
El gobierno colombiano amplía la cuarentena hasta el 11 de mayo con excepciones para algunos sectores.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha garantizado a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, que su país hará nuevos envíos de material médico a Venezuela para ayudar a la nación caribeña a superar la pandemia de coronavirus, en el marco de la conversación telefónica que han sostenido ayer.
Por otro lado, se han referido a las sanciones impuestas por Estados Unidos a ambos países, lamentando que “las ilegales e inhumanas medidas coercitivas unilaterales” sigan vigentes “durante tiempos tan difíciles para la Humanidad”.
A este respecto, Putin ha recordado una de las propuestas rusas ante el G-20, en coordinación con el G-77 + China, sobre “Pasillos Verdes que permitan a los países bajo sanciones y guerras comerciales adquirir los suministros necesarios para atender a sus pueblos durante la pandemia”.
En Cuba, el Ministerio de Salud Pública informó de dos nuevas víctimas fatales del coronavirus, con lo cual la cifra total de fallecidos ascendió a 36, mientras que la cifra de casos confirmados llegó a 1 mil 087.
El director nacional de Epidemiología, Francisco Durán García, alertó que entre los más recientes contagios hay una cantidad importante de los que no se puede establecer el contacto y solo se logra conocer una cadena de personas con las que han tenido relación, lo que hace más difícil detener la propagación.
Por otro lado, la OMS dijo ayer que continuarán los vuelos de solidaridad para transportar suministros médicos vitales a toda África con el fin de proteger a los trabajadores de la salud.
Bolsonaro niega que tuviera carácter golpista la manifestación de Brasilia
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, negó ayer que la manifestación en la que participó el domingo a favor de una “intervención militar” del país tuviera un carácter golpista, esgrimiendo que él ya está en el poder.
“La gente normalmente conspira para llegar al poder. Yo ya estoy en el poder. Ya soy presidente de la República. Realmente, soy la Constitución”, declaró en una comparecencia desde el Palacio de Alvorada.
Bolsonaro ha asegurado además que “la democracia y la libertad están por encima de todo”, aclarando que solo quería destacar el papel de las Fuerzas Armadas, “nada más”. “Vean mi discurso. No hablé nada en contra de otro poder” del Estado, ha retado a la prensa.
El líder ultraderechista ha acusado a los medios brasileños de tergiversar los hechos para “intentar llevar a la opinión pública a la idea de que quiere un retroceso”. “¿Y contra quién estoy conspirando? Falta un poco de inteligencia entre quienes me acusan de ser dictatorial”, ha espetado.
Así, se ha negado a responder a las preguntas de algunos medios, como Folha o Estado de Sao Paulo. “Aquí quien va a hablar soy yo. Quien no me quiera escuchar, está disculpado”, ha señalado.
Bolsonaro participó en la multitudinaria manifestación en contra de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para frenar el contagio del coronavirus, algo que ya ha hecho en ocasiones anteriores.
Esta vez se trataba de pedir una “intervención militar” del país y en contra del Congreso y del Supremo, que han cuestionado las medidas adoptadas por su gobierno, tanto en relación con la pandemia como con otras cuestiones.
“No queremos negociar nada (…) Queremos acción para Brasil”, dijo a sus seguidores. “Ahora, Brasil por encima de todo y Dios por encima de todos”, remachó, de acuerdo con Folha.
Por otro lado, el presidente ha vuelto a criticar a “algunos gobernadores” por las medidas de confinamiento, expresando su deseo de que “esta sea la última semana de cuarentena” para empezar a “combatir con todo el mundo fuera de casa. La masa no tiene cómo permanecer en su casa, con la nevera vacía”, dijo el mandatario de ultraderecha ante sus seguidores al salir de su residencia oficial en Brasilia.
“Esas medidas restrictivas son en algunos estados excesivas, no alcanzaron su objetivo. Aproximadamente 70 por ciento de la población se va a contagiar, no tiene sentido querer huir de eso”, dijo Bolsonaro ayer.
Texto: Agencias / Foto: Xinhua
