7 marzo,2024 4:04 am

En Chilpancingo, siguen los estragos de la violencia contra choferes de hace un mes  

 

Coinciden vendedores ambulantes y artistas urbanos del Zócalo que la gente ya no sale por las tardes, pues los conductores de Urvan dejan de operar a partir de las 8 de la noche y en consecuencia los negocios también cierran temprano. Las ventas diarias bajaron entre 40 y 80% durante la crisis de violencia, afirma el presidente de Coparmex, Iván Salgado

 

Chilpancingo, Guerrero, 7 de marzo de 2024. A un mes del ataque armado contra cuatro unidades del transporte público, que derivó en una suspensión total del servicio durante 10 días, en Chilpancingo aún hay estragos económicos y sociales, pues los choferes de Urvan y taxis redujeron su horario de servicio, igual que las tiendas de conveniencia.

En el problema económico, vendedores ambulantes y personas que viven de la afluencia diaria de personas en el centro de la capital aún no se recuperan de estos hechos.

Alicia es adulta mayor y vende empanadas y productos de temporada en el Zócalo de Chilpancingo, a un costado de la catedral de la Asunción de María, y contó que este último mes hubo una disminución en sus ventas.

Dijo que la falta de transporte público durante 10 días le afectó porque “no había gente a quién venderle”. A pesar de que el servicio de Urvan y taxis poco a poco se comienza a regularizar, en el negocio de Alicia es todo lo contrario.

“Elaboraba alrededor de 150 empanadas diario y ahora sólo 60, incluso, a veces no las vendo todas”, comentó.

Una de las tradiciones en la capital, es la tarde de payasos frente a la catedral en donde habitualmente se reunían familias o se detenían traseúntes a disfrutar el show, pero hoy es notoria la escasa asistencia de personas y la reducción de horarios en establecimientos y transporte.

Tatay Dicaprio lleva 22 años como payaso dando espectáculo en el Zócalo de Chilpancingo y contó cómo la violencia mermó su economía.

“Son las 7 de la tarde y ya está bien vacío, ya no hay gente viendo el espectáculo, antes de todo este tema de la violencia la gente venía de a montones y se iba después de las 8:30”, dijo.

“Es la primera semana que nos presentamos después de todo esto, sabíamos que era obvio, si no hay transporte la gente no sale, y aunque nos presentáramos sabíamos que no era correcto hacer como que no pasa nada”, agregó.

A las 7:30 de la tarde los negocios del centro de la capital cierran sus cortinas y suspenden sus servicios, esto porque el transporte deja de operar a las 8 de la noche.

De acuerdo con el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Chilpancingo, Iván Salgado Ramírez, las ventas de los negocios en Chilpancingo durante los días sin transporte público disminuyó entre  40 y 80 por ciento.

“Desafortunadamente estos días que pasamos de inseguridad y que no hubo transporte tuvimos una afectación económica, calculamos que las ventas diarias bajaron un 40 al 80 por ciento, dependiendo el giro comercial”, dijo Salgado Ramírez en entrevista telefónica.

 

Ante la falta de seguridad toman sus propias medidas, dice chofer

Entre el 5 y el 15 de febrero, en distintos hechos violentos, asesinaron a siete conductores del transporte público y 10 vehículos fueron atacados. Esto generó una psicosis entre los habitantes y el transporte público.

Algunas rutas de transporte como la de Las Torres-Mercado, Villas Laurel-Jacarandas, Mercado-Plan de Ayala y PRD-Mercado, dejan de brindar el servicio entre las seis y siete de la noche como medida de seguridad.

Un conductor de una de estas unidades, que pidió omitir su nombre por seguridad, contó que no hay garantías de seguridad para ellos, por lo que tienen que tomar sus propias medidas de precaución.

“Todavía está complicado, ya no andamos tan noche, paramos temprano por seguridad y no sabemos hasta cuándo, yo creo que hasta que nos sintamos seguros”, dijo el conductor.

Existen también rutas del sur de la ciudad que el transporte no recorre por completo por su cercanía con el poblado de Petaquillas.

Es en esta ruta donde se produjeron algunos hechos de violencia contra choferes de transporte público.

Algunas tiendas departamentales también redujeron los horarios de atención; la plaza comercial Galerías Chilpancingo, labora con horarios reducidos, de cerrar a las 9:30 de la noche ahora lo hacen a las 8:30.

Las tiendas de autoservicio modificaron también su horario de atención y de cerrar a las 10 de la noche, hoy lo hacen a las 9:45, y de acuerdo con algunos trabajadores no les han dicho una fecha en que pudiera restablecerse su horario habitual.

En el caso de los taxis, aunque hay una importante circulación y unidades brindando el servicio, muchos dejan de trabajar después de las 10 de la noche.

“Sólo algunos servicios de radio taxis y servicios especiales operan después de esa hora”, comentó un conductor de un taxi.

 

Texto: José Miguel Sánchez/ Foto: Jesús Eduardo Guerrero