El destacado salsero agradece al presidente López Obrador por la invitación para recibir el 2024 en la capital del país, cuyo jefe de Gobierno, Martí Batres, hizo el conteo regresivo para despedir el año
Ciudad de México, 2 de enero de 2024. Entre lágrimas, sonrisas, propósitos y la mejor intención de mejorar, alrededor de 120 mil personas, según el gobierno capitalino, le dieron la bienvenida al 2024 con el concierto gratuito de Rubén Blades en la Glorieta del Ahuehuete, donde luego de cantar durante tres horas cerró su gira Salswing Tour.
“La mayoría de nosotros venimos de hogares de soñadores. Crecí en un barrio que se llama San Felipe, a los barrios valientes siempre le ponen nombres de santos.
“En mi familia todos fueron a la escuela y trataron de avanzar de la manera correcta, no a través de la corrupción como lo hacen muchos políticos. En el barrio siempre se tuvo el sentido de seguir y no perder el humor. Esta canción la escribí a todas las familias que día a día luchan por salir adelante para cumplir sus sueños”, dijo Blades al dedicar Las calles.
La gente usó las rampas de los hoteles cercanos para tener un poco más de altura y poder ver mejor el escenario. Hubo quienes se subieron al techo de una iglesia y a las cabinas telefónicas.
Las personas que traían sillas de ruedas y de la tercera edad tuvieron la oportunidad de disfrutar del concierto en un área preferencial frente al escenario, y aprovecharon para bailar cómodamente.
Los asistentes ondeaban banderas de México, Panamá, Venezuela y Colombia, con familias de todos los estratos sociales, algunos llevaron sus refrescos y vasos, alguna señora vendía latas de cerveza en 50 pesos. Otras familias llevaban botellas de vino, mezcal y ron.
Los “pasos prohibidos” y de brinquito salieron con temas como Ojos de perro azul y su éxito Amor y control, de los más bailados y coreados.
Blades agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador por la invitación para recibir el 2024.
A las 23:54 horas del 31 de diciembre, Blades hizo una pausa en el concierto para que los presentes tomaran sus uvas, guiados por el conteo regresivo de Martí Batres Guadarrama, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Tras la pirotecnia, los abrazos, los besos de las parejas o las videollamadas de la gente a sus seres queridos, reinició la fiesta.
“Seguimos con esto. Les deseo para ustedes mucha salud”, mencionó Blades antes de cantar Todos vuelven, un himno a los fallecidos.
Varias familias comenzaron a abandonar el lugar, pero otras le sacaban brillo al Paseo de la Reforma.
Al ver que algunas personas se iban, Blades complació a los presentes adelantando Pedro Navaja, la canción que Andrés García hizo popular con la película homónima. Esta versión duró cerca de 10 minutos, con arreglos musicales más lentos para finalizar con un ritmo rápido.
El destacado salsero continuó con El cantante, cover de Héctor Lavoe, el cual también extendió durante varios minutos.
“La palabra que más debemos usar en nuestro lenguaje es gracias”, dijo Blades.
“Que Dios me los cuide a todos. Muchas gracias por esta alegría que le dan a este panameño”, agradeció Blades, quitándose el sombrero y haciendo una reverencia ante su público, mientras proyectaba la bandera mexicana en la canción Patria.
A las 1:33 de la mañana, el también actor abandonó el escenario, pero ante los gritos de los presentes que pedían otra canción, volvió para interpretar Te están buscando, mientras marcaba el ritmo con sus maracas, para finalizar la presentación a la 1:43.
Texto: Jacqueline Ponce León / Agencia Reforma
