6 agosto,2020 4:57 am

Exportará la mezcalería Avecanor de Petaquillas 768 botellas a Holanda

En 2004 la fábrica familiar da un paso importante con la formalización de su marca, la adquisición de tecnología, el envasado y la comercialización, pero sobre todo la certificación de su producción

 Chilpancingo, Guerrero, 6 de agosto de 2020. La mezcalería Avecanor es la primera fábrica que enviará a Holanda mezcal hecho en Petaquillas, Chilpancingo, un pequeño pueblo de la capital del estado, ahí la tecnología ha sido una aliada de la producción artesanal, que potenció la producción y la calidad de la bebida.

Hoy, de ahí salen 768 botellas con tres variantes del mejor mezcal que produce la mezcalería rumbo a Holanda, donde la empresa ABC Mezcales será la encargada de llevar la bebida a los estantes y clientes más exigentes.

Grandes barriles de madera y aluminio acaparan la vista en el centro de producción de la mezcalería ubicada a unos minutos del centro de la capital. El acceso al centro de producción se confunde entre árboles y algunas casas que conservan una construcción de adobe.

Unos 10 metros adentro una hilera de grandes barriles ya almacena el agave de maguey que fue previamente molido y que pasó por un horno de cocción a vapor. Cada mes la empresa familiar produce 10 mil botellas de mezcal joven, el joven con el gusano del maguey, con damiana, además de uno añejado.

Marcos Godínez Jiménez es el representante de la fábrica familiar que data desde hace más de 100 años. En 1904 su bisabuelo, Marcos Godínez Josefa, impulsaron la fabricación artesanal de la bebida, su abuelo la preservó, sus padres la mantuvieron y su generación ahora se encarga de que todo el mundo la pruebe.

En 2004 la fábrica da un paso importante, la formalización de su marca, la adquisición de tecnología, el envasado y la comercialización, pero sobre todo la certificación de producción.

Avecanor representa a todas aquellas aves que le cantan al maguey en los campos desde que germinan hasta que florecen, dice Marcos.

La fábrica da empleo a 20 personas, la mitad en los campos donde se siembra el maguey y el resto en la producción en la fábrica que pasó de ser un espacio rústico a un espacio donde la tecnología hizo más eficiente y mejoró la calidad de la bebida.

Para la familia no hay obstáculos que los detenga para conseguir financiamiento, han tocado puertas en dependencias federales, del estado y el municipio, así como en la banca de desarrollo, la banca comercial y hasta entre otros familiares. El éxito que han tenido es que lo que piden de crédito se aplica para lo que es y todo es palpable en la fábrica.

Las ferias y las exposiciones que ha organizado la Secretaría de Fomento Económico, la Secretaría de Economía, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural colocaron la bebida entre el gusto de los compradores y consumidores y gracias a sus sugerencias, la producción sigue en aumento.

El reto de llegar a Holanda 

Para poder exportar el bebida a tierras holandesas, Marcos no tuvo todo tan sencillo, debió de cumplir con la norma mexicana del mezcal, pero también con la norma del país europeo.

Las botellas que se enviarán hoy al puerto de Veracruz y que llegarán en unas tres semanas a Holanda, están certificadas ante la Secretaría de Hacienda y el Consejo Regulador del Mezcal (Comercam) con sede en Oaxaca.

Cada una de las botellas de 700 mililitros va con un etiquetado en inglés, donde se describen todas las características de la bebida, como el nivel de alcohol que es de un 40 por ciento.

El precio en México enfrenta una serie de impuestos y el costo de cada botella que oscila entre los 600 a 800 pesos depende del IVA y el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios, pero en Holanda no, por el tratado de libre comercio que hay, sin embargo Marcos prefiere reservarse el costo de cada botella en aquel país.

Marcos dice que ya hay en puerta otras tres propuestas para enviar mezcal a Chicago, en Estados Unidos, Brasil, y Rusia.

Avecanor no es la primera vez que envía mezcal a otro país, en 2017 envió una carga de 200 botellas que pidió una empresa cervecera de Dinamarca que fue destilado con víbora de cascabel, sin embargo ya no se le dio seguimiento, Marcos ahora pretende recuperarlo.

Cuidado con el medio ambiente 

El medio ambiente es otro tema que no sólo preocupa a Marcos sino al país destino. Usar menos madera, conlleva a que no se talen árboles y se termine con las pocas zonas boscosas que quedan en los alrededores de Chilpancingo.

Eso llevó a la fábrica a seguir con la producción de mezcal de forma artesanal, pero con tecnología. Explica que una vez que el maguey cortado en los campos de la familia llega a la fábrica es almacenada en una especie de bodega acondicionada para la cocción a vapor, y ya no se hace en hornos en el suelo.

Eso ha permitido usar menos madera, pero sobre todo usar la totalidad del maguey, nada se desperdicia. Una vez que el maguey es puesto en la bobera durante 30 horas, es enviado a una máquina que la tritura, después es separado el material primario en grandes alambiques de madera y de aluminio. Es ahí donde inicia dos formas de producción del mezcal.

La primera es de la forma artesanal, donde el maguey molido es destilado en una horno, donde se usa la madera para el fuego. El otro proceso donde la tecnología ayuda, el maguey es molido y después depositado en grandes alambiques donde se fermenta, en el último paso de extracción se usa vapor que pasa por un tubo en espiral ubicado a dentro de un almacenador, donde el mezcal se evapora y finalmente sale listo.

Marcos explica que este proceso tiene una ventaja, tiene mayor control en la calidad de la producción final, en comparación con la forma tradicional donde se usan los hoyos de cocción del maguey y donde la lluvia puede afectar el nivel de la temperatura o en su caso la leña puede influir en el sabor.

Vende bajo otra marca en el país

Marcos dice que una gran ventaja que ha tenido la fábrica con su certificación y la calidad de producto es que puede “maquilar” el mezcal a la marca nacional 400 Voces que vende de manera anual entre 8 mil y 10 mil botellas de su mezcal.

Explicó que esta forma de venta del mezcal ha representado una inyección de dinero para poder seguir la producción y mejorar las condiciones de la fábrica. La empresa 400 Voces envía todo el material físico y Avecanor se encarga de llenar las botellas para su venta en el país desde 2010.

El productor dice que esto no representa una afectación a su marca porque en el etiquetado de la botella de la otra marca se precisa que el productor de origen es Avecanor y el lugar de producción.

Además, la marca nacional tiene la ventaja de estar posicionada con las tiendas especializadas de venta de alcohol en México. Precisó que para hacer este proceso se tiene que tener el aval del Comercam, pero en el mercado informal de producción es otro asunto.

“Al final del día nos damos cuenta que es un caso exitoso, para ellos y para nosotros”, dice.

Texto: Jacob Morales Antonio / Foto: Jessica Torres Barrera