7 agosto,2021 10:00 am

Gana el Tri el cuarto bronce para México en Tokio 2020

La selección mexicana se impone 3-1 a Japón en el duelo por el tercer lugar del torneo de futbol varonil de los Juegos Olímpicos, gracias a los tantos de Sebastián Córdova, Johan Vásquez y Alexis Vega

Tokio, Japón, 7 de agosto de 2021. Llegó la cuarta medalla para México en Tokio 2020, cortesía del futbol. Esta presea se suma a las ganadas previamente en tiro con arco, halterofilia y clavados por representantes de la delegación mexicana en estos Juegos Olímpicos.

La selección mexicana de futbol olímpica derrotó 3-1 a Japón, anfitriona de los Juegos, en el partido por la medalla de bronce disputado en el estadio de Saitama, que permite al Tri regresar al podio olímpico casi una década después de su oro en Londres 2012.

Los pupilos de Jaime Lozano fueron muy superiores a Japón, víctima de España en semifinales, y no dieron pie a una posible sorpresa, como en la fase de grupos cuando perdieron con los nipones. Esta vez el duelo estaba listo para sentencia a los 22 minutos con goles de Francisco Córdova, de penalti, y Johan Vásquez.

En la segunda parte, a media hora para el fina, Ernesto Vega completó la fiesta mexicana, asistido por Córdova -que firmó un partido de ensueño, al igual que el bético Diego Lainez antes de que los locales maquillasen el marcador con el 3-1 final obra de Kaoru Mitoma a pase del madridista Takefusa Kubo.

El cántico ahora es “El-Jimmy-Lozaaaano”. La plantilla de la selección mexicana honró así a su técnico, después de lanzarlo por los aires en la cancha del Estadio Saitama, tras conseguir el bronce en Juegos Olímpicos luego del 3-1 sobre Japón.

Segundos después, el capitán Guillermo Ochoa, en una escena conmovedora, rompió en llanto mientras Lozano daba un discurso a los jugadores, quienes estaban abrazados.

“Le voy a desear siempre lo mejor. Gracias, de verdad, se lo merecen todo, han hecho un gran sacrificio, un gran esfuerzo, llegamos antes que todos y nos vamos después de todos, pero valen la pena esos momentos que no son tan comunes, por eso hay que disfrutarlos. Enhorabuena. ¡Viva México!”, dijo Jimmy en sus últimos momentos como técnico del Tricolor Olímpico.

Al final Lozano se fundió en un abrazo con su esposa Caty Serna, quien lo alcanzó en Tokio.

Diego Lainez ya portaba una bota en la pierna izquierda, tras la fuerte lesión en su tobillo, que no le impidió festejar con el resto del equipo y tener sensaciones al límite como las del auxiliar de Lozano, el japonés Ryota Nishimura, bañado en un mar de lágrimas.

También estuvieron en la cancha el presidente de la FMF, Yon de Luisa, y el director general deportivo, Gerardo Torrado.

El futbol le dio a México la cuarta medalla en unos complicados Juegos Olímpicos, en lo que hubo varios cuartos lugares.

El 6 de agosto, nueve años después de aquel oro en Londres, el Tricolor festeja.

“Desde un principio, desde antes se veía una gran familia, no nos habían tocado momentos tan duros como la derrota contra ellos mismo o Brasil, el equipo se vio muy sólido y siempre estuvimos apoyándonos, sabíamos que era una revancha y no íbamos a dejar pasar esta oportunidad”, dijo Uriel Antuna, otro de los que rompió en llanto al recordar a su familia, durante la entrevista con Marca Claro.

“Le prometí a mi hijo la medalla y hoy estoy contento de regresar y entregarle la medalla”.

“No quería regresar con las manos vacías”: Ochoa

Guillermo Ochoa rompió en llanto en la cancha del estadio Saitama, donde este viernes consumó el sueño de regalarle a sus seres queridos y a todo México una medalla en Juegos Olímpicos.

“Sobre todo porque quería llevarles una medalla, no quería regresar con las manos vacías a México, no quería regresar con las manos vacías a mi casa. Quería que mi esposa, mis papás, mis hijos, cargaran la medalla, la conocieran, la vieran, fue mucho sacrificio, esfuerzo, mucho estar lejos de la familia, muchos días sin descanso, fuimos de las primeras selecciones que llegaron a Japón y nos propusimos ser de los últimos en irnos.

“Es una medalla que, es para mi familia, sé lo que sufrieron en cada juego, a veces más que nosotros, la afición mexicana también se la merece, siempre trato de dar lo mejor para mi País en cada torneo, a veces el futbol no te recompensa de las maneras que crees o que imaginas que crees y no por eso hay que bajar los brazos, es una medalla nos llevamos en el corazón, en la historia de México, una medalla para toda la vida”, dijo, conmovido, a Marca Claro.

El guardameta enumeró todos los sacrificios que realiza un deportista con tal de vivir este tipo de momentos.

“Antes de venir y concentrarme me despedía de mis hijos, mi hijo me dice ‘papá, ¿otra vez?’, me rompe el corazón. Me la paso viajando, concentrado, hay cosas que la gente y la prensa no ve, la exigencia que se nos tiene cada dos o tres días, no saben de las concentraciones, viajes, las malas comidas que tuvimos, el cansancio que existe, se nos juzga mucho.

“No hemos parado desde liguilla, Nations League, Olímpicos, eliminatoria, Concachampions, se viene otro Mundial de Clubes, estar en la elite no es sencillo, a veces no se habla de eso en los programas y no cuenta, tenemos que trabajar en lo mental en eso”, mencionó.

Texto: Agencias