Para el gobierno del estado, los interlocutores entre René Juárez Cisneros y los alcaldes perredistas no parecen ser ni su coordinador Modesto Brito ni el presidente del Comité Ejecutivo Estatal perredista, Martín Mora. Más ahora que se sobrecalentaron los ánimos después de la marcha de los ediles perredistas a Casa Guerrero.

Extraoficialmente se sabe que Juárez Cisneros prefiere el diálogo directo con el senador c, precandidato perredista a gobernador, y con la senadora del mismo partido, Leticia Burgos Ochoa.

Fuentes del PRD indicaron que incluso la senadora Burgos Ochoa se molestó con los alcaldes de su partido porque decidieron hacer la marcha a Casa Guerrero, porque prefería que aceptaran la reunión ya incluida en la agenda del gobernador para el próximo lunes 22.

Sería por eso que el alcalde de Acapulco, Alberto López Rosas, declaró que Burgos Ochoa tiene una representación popular, pero no puede eliminar la interlocución con los alcaldes. Fue y es, dijo López Rosas el jueves, “un puente autorizado, pero no es el único”.

En el caso de Chavarría, de acuerdo con diversas versiones, fue precisamente al senador a quien el gobernador René Juárez prefirió llamar por teléfono un día después de la marcha de los ediles a Casa Guerrero, para proponerle que mediara ante los perredistas para adelantar la reunión programada para el lunes.

Se supo que este mismo viernes, tal como se lo solicitó el gobernador, el senador Chavarría buscó al alcalde de Teloloapan, Modesto Brito, para informarle que Juárez Cisneros los recibiría por la tarde en Acapulco, en las oficinas de la Promotora Turística de Guerrero, allá por la exclusiva zona de Punta Diamante.

Y allí en esa reunión, Chavarría aparece en la primera fila. En medio de los alcaldes Genaro Vázquez Solís, Alberto López Rosas, Guadalupe Eguiluz y Modesto Brito, todos simpatizantes de su candidatura a gobernador por el PRD. (Ricardo Castillo Díaz).