Rosalba Ramírez

Chilpancingo

El diputado de Morena, Aristóteles Tito Arroyo, informó que tras la marcha de la CRAC-PC y otras organizaciones al Congreso local, en la reunión con los diputados de Morena los promoventes de la iniciativa de reforma constitucional en materia de derechos indígenas y afromexicanos dieron al Poder Legislativo un ultimátum para que a más tardar el 20 de octubre la Comisión de Estudios Constitucio-nales y Jurídicos, en la que los morenistas son mayoría, discuta el dictamen para que sea llevado al pleno.
Consultado respecto al proceso que lleva la iniciativa, Tito Arroyo dijo que están a la espera de que la Secretaría de Gobernación termine de revisar el informe detallado que le entregaron sobre los parlamentos abiertos, los foros de consulta, y la iniciativa de reforma que se presentó al pleno desde diciembre pasado.
La intención fue que la Segob realice una revisión técnica-jurídica, aunque recordó que ya había sido revisada por especialistas del Ins-tituto Nacional de los Pueblos Indí-genas (INPI). El otro acuerdo con la dependencia federal fue que “verían el tema político con el Congreso y el gobernador”, es decir, que haría una labor de intermediación para empujar la iniciativa.
Comentó que en la reunión de diputados locales de Morena con la CRAC-PC y organizaciones afines, la demanda principal de los indígenas y afromexicanos fue que la iniciativa se dictaminara y se llevara a votación al pleno, y que fuera en su caso la Suprema Corte de Justicia de la Nación la que determinara si la consulta realizada cumplió o no con los estándares establecidos.
Comentó que en la reunión del 17 de septiembre, las organizaciones indígenas y afromexicanas dieron un ultimátum para la presentación del dictamen. Ahí le informaron al presidente de la Junta de Coordina-ción Política (Jucopo) Jesús Villa-nueva Vega que esperarían hasta el 20 de octubre próximo.
“Es la fecha límite para que se presente el dictamen y ya, a fin de cuentas las organizaciones ya se dieron cuenta que no se va a transitar en esta Legislatura o si lo hace, no sabemos cuándo. Lo que sí quedó claro es que ya se quiere que el dictamen se presente al pleno y que se vote en el sentido que sea”.
Explicó que la fecha es un ultimátum que dieron las organizaciones al Poder Legislativo en su conjunto, “no es hacia el PRI o PRD, es una presión al Congreso, a nosotros también como diputados de Morena nos están cuestionando el porqué no se ha pasado el dictamen al pleno si Morena tiene mayoría”.
Explicó que a Morena le cuestionan el porque no han dictaminado la iniciativa en la Comisión de Estudios Constitucionales y Jurídicos, “si el presidente no ha convocado el secretario tiene las facultades –después de agotar un procedimiento– de convocar a sesión y dictaminar”.
Lo anterior porque en dicha comisión tres de sus cinco integrantes son diputados de Morena: el secretario Moisés Reyes Sandoval, y los vocales Jesús Villanueva Vega y Celeste Mora Eguiluz, y solo hay uno del PRD, el presidente Bernardo Ortega Jiménez –uno de los principales opositores a la iniciativa–, y el priista Jorge Salgado Parra.
Explicó que en dicha reunión se firmó un acuerdo en el que se establecía la fecha del 20 de octubre como la fecha límite que dieron las organizaciones “para la que tendría que estar el dictamen”. Ese acuerdo lo firmaron 11 de los 12 diputados que estuvieron presentes, sin embargo no supo precisar quién no firmó.
Y afirmó que en la reunión las organizaciones también afirmaron que no creen que la ruta sea que la Segob resuelva el problema, sino que la comisión dictamine.
Criticó también que la LXII Legislatura es “muy conservadora” y se resiste a aprobar temas relacionados con el reconocimiento de derechos. Ejemplificó que la iniciativa de matrimonio igualitario que se mantiene en la congeladora, y en el caso de la reforma indígena y afromexicana “demuestran su racismo”.
Además, recordó que Morena solo no puede aprobar ninguna reforma constitucional debido a que solamente tiene 22 de los 46 diputados que integran la Legislatura.