Lourdes Chávez

Chilpancingo

Líderes migrantes guerrerenses radicados en Chicago, Los Ángeles y el estado de Texas, en Estados Unidos, señalaron que hay optimismo y esperanza de que el nuevo presidente, Joe Biden, regularice la situación migratorio de paisanos sin papeles de residencia, para que visiten sus comunidades de origen tras décadas en el extranjero.
Sería un cambio al de hace cuatro años, cuando el saliente presidente Donald Trump recrudeció las medidas de acceso al país.
Desde Chicago, Illinois, el coordinador de Clubes Guerrerenses Unidos del Medio Oeste, Erasmo Salgado Jiménez, aclaró que la aprobación de la iniciativa de reforma migratoria que envió Biden al capitolio en su primer día de gobierno no va a ser fácil, porque los representantes de los partidos Demócrata y Republicano tienen que estar de acuerdo, y en los dos bandos hay conservadores que se oponen al tema.
En cuanto a la medida que detuvo la construcción del muro fronterizo con México, opinó que aún Estados Unidos puede usar otro tipo de tecnología para evitar el paso de personas sin papeles, por la presión de sectores importantes que van a insistir en cerrarles el paso.
“Su discurso es muy positivo, de unidad, de respeto y de esperanza, habla de una política más humana”, pero estarán pendientes de las acciones que se comprometió a realizar en los primeros cien días de gobierno, a través del Frente Nacional de Migrantes, donde participan la asociación guerrerense.
De los temas principales del gobierno destacó la economía, la aplicación de las vacunas contra el Covid-19, un programa de salud, y una política contra el racismo. “Me acuerdo hace cuatro años, el día que iba a viajar para México, los aeropuertos estaban cerrados para los que venían de China y Medio Oriente, cuando volví, después de una semana, los investigados éramos los latinos y afrodescendientes, no importaba que fuéramos ciudadanos, con que se viera de otra raza, investigaban cómo era que eras ciudadano, así empezó el gobierno pasado”.
Desde los Ángeles, California, el vicepresidente de One Stop Immigration, integrado a la Coalición de Derechos Plenos para los Migrantes, Aniceto Polanco, destacó que “se acabó el tormento de cuatro años para la comunidad que no tienen documentos en este país, más de 11 millones de todas las nacionalidades”.
Confió en que esta vez se puede concretar una reforma migratoria, “estamos contentos, optimistas, no podemos celebrar, pero llamamos a que nos apoyen, y vamos a apretar la tuerca para que se haga realidad. Duele tanto ver a tanta gente que no puede ir a nuestro México, para ver a sus familias, darle el último adiós a sus padres. Vamos a echarle ganas porque los políticos deben convencer al menos a otros diez republicanos para que pase la reforma, o quedamos igual que con Obama, que ofreció lo mismo”.
De Texas, el representantes de organizaciones de migrantes, Carmelo Sánchez Nájera, subrayó que el mensaje de Joe Biden fue conciliador para los que votaron y no por él, distinto al discurso de confrontación de su antecesor.
Recordó que en la plataforma política de Biden está la reforma migratoria para facilitar el térmite de la ciudadanía en un plazo de ocho años, para los que cumplan las condiciones que ellos disponen “mucha gente saldrá de la oscuridad, tendrá tarjeta de manejo, cuentas bancarias a su nombre, derechos a la salud”.
Aclaró que en EUA, sea un residente, ciudadano o persona sin papeles, todos pagan impuestos, y esperarían un trato diferente de las autoridades, donde la policía no hostigue a las personas por su apariencia, ni temas más redadas de Migración, y poder viajar con libertad a México, “son parte de las que vemos un respiro, porque teníamos la verdad tanto miedo, a pesar de contar con la documentación en regla, da miedo de que la policía te pare, que alguien de tu dirección, que te cuestione cuando sabe que tienes papeles”.
Señaló que en Texas el gobernador es republicano y su política golpea a migrantes, y en tiempos electorales todos los candidatos plantean acabar con la migración, negar servicios de salud a los extranjeros y reducir servicios de comida, “son más agresivos con la comunidad, y juegan con el miedo de la ciudadanía americana, que ejerce el derecho del voto. Aunque Texa poco a poco se convierte en un estado azul (demócrata), ya no es tan rojo, el triunfo de los republicanos ya no fue tan grande como la de antaño, ya se eligen a representantes demócratas”.
Los tres reconocieron la reactivación de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, o DACA, que detendrá las deportaciones hasta el análisis profundo de la reforma migratoria.