Zacarías Cervantes

Chilpancingo

El ex delegado de Gobierno en la zona Centro, Raúl Suárez Martínez, quien renunció la semana pasada, denunció ayer que los relevos en la Secretaría General de Gobierno se realizaron “para que nada cambie” y para satisfacer ambiciones personales “del grupo en el poder”.
Suárez Martínez renunció la semana pasada junto con el subsecretario de Desarrollo Político y Social de la Secretaría de Gobierno, Óscar Chávez Rendón, pero dijo que en su caso nunca se la pidieron y que sólo se enteró de manera extraoficial y por las redes sociales que la encargada de despacho, Anacleta López Vega ya le había tomado protesta a su sustituto, Rafael Julián Arcos, a quien le tuvo que entregar la dependencia que tenía a cargo.
“Los movimientos en la Secretaría General de Gobierno se interpretan en cambios para que nada cambie, sólo ambiciones personales, sin un proyecto político que se acerque a la 4T”, escribió el ahora ex funcionario en un comunicado que envió ayer a los medios de comunicación.
Suarez Martínez planteó que él se enteró que iba a ser cambiado por comentarios en redes “y algunas notas en varios medios pero, nadie, ninguno de los funcionarios de la Secretaría dio la cara para hacer efectivo dicho rumor”.
Incluso informó que tiene un mensaje de Whatsapp de la encargada de despacho Anacleta López Vega, donde ella asegura que no había pedido ni propuesto ningún cambio.
“Por fortuna, la gente que me conoce y a los lugares donde me tocó acudir como delegado siempre me escucharon decir que, en este tipo de responsabilidades hay que estar preparados para irse en cualquier momento, sin embargo hay que tener dignidad y exigir respeto en el trato de los que se sienten superiores a ti”, reprochó.
Dijo que no entiende el miedo para que no le pidieran su renuncia, incluso la propia secretaria general “con la cual tuvimos comunicación y además no había ningún conflicto”.

Mal informan a la gobernadora

Indicó que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda ha argumentado que (renunció) porque no cumplió con el cargo, lo cual Suarez Martínez calificó como “temerario e irresponsable” de su parte, porque “es creer en esas gentes que usted se empeña en mantener manejando la Secretaría y, que en el fondo no le ayudan en el manejo de los conflictos”.
Preguntó que, concediendo que la gobernadora habló con la verdad, “¿con qué parámetros mide quién cumple y quién no, (con relación) a un par de funcionarios que indiscriminadamente utilizaron los recursos económicos de la institución para beneficio personal de sus allegados y sobre todo allegadas, quienes a pesar de que usted y su padre (Félix Salgado Macedonio) gritaban a los cuatro vientos que los funcionarios estatales no tendrían los privilegios que durante los gobiernos priistas se habían venido disfrutando”, acusó, sin que haya precisado en su escrito quiénes son esos dos funcionarios a los que acusa de corrupción.
Denunció a la gobernadora de haber incumplido su promesa de no utilizar autos blindados, guardaespaldas con armas largas, choferes, asesores y auxiliares.
Dijo que, por el contrario, en el gobierno se dan espacios hasta para novias y novios, “dependiendo de los gustos, despilfarro de recursos para comprar voluntades, todo eso comparado con esta delegación a mi cargo que nunca contamos con un vehículo para movernos”.
Añadió: “solo comentarle señora gobernadora, el carro particular del suscrito tuvo dos reparaciones de suspensión porque a pesar de ser patrimonio familiar se utilizó para servicio del gobierno”.
Denunció que como funcionario, además, no recibió aguinaldo, prestaciones, “ni nada, pues nos tienen en lista de raya, que por cierto decía su padre que ya no iban a existir porque sirven para robarse el dinero”.
Pidió a la gobernadora que investigue lo que pasa en la Secretaría de Gobierno, “aunque no pienso que no sepa quiénes son socios y cómplices”.
En su carta, Suárez le dijo a la gobernadora que su gobierno necesita dar un golpe de timón “para cambiar la estructura priista tan arraigada en Guerrero, necesitamos cambiar la forma de gobernar, de ejercer y compartir el poder, lo que se hace hasta el momento es vivir en el lodazal que dejó el PRI y con el PRI, es permitir que haya nuevos ricos y nuevos pequeños caciques que creen que les dimos un cheque en blanco para hacer y deshacer”.
Aunque dijo que en las próximas elecciones votará por la candidata de Morena Claudia Sheinbaum, “los demás votos van a depender de muchas cosas que se tiene que recomponer. Hoy más que nunca me declaro Obradorista y mantendremos todavía la lucha en lo interno, tarde o temprano la historia nos pondrá en nuestro lugar”.