En la sesión mensual del Grupo Cuicalli, ante la presencia del gobernador Héctor Astudillo Flores, el presidente de esa organización civil, Adolfo Chávez Romero, señaló que la actual administración no ha cumplido con el Plan Estatal de Desarrollo debido a que sus secretarios “no trabajan ni pueden trabajar en equipo, porque no tienen los mismos intereses”.
Además remarcó que la promesa de brindar seguridad a la población y de castigar a los culpables del desvío de recursos de la pasada administración no se ha cumplido en el término que el gobernador mismo se dio.
En su oportunidad, Astudillo Flores contestó a Chávez con un tono molesto. Le dijo “ya tuviste tus diez minutos de fama en la radio” (la sesión se transmite en vivo en una emisora local), pero que en su exposición le demostraría que no tenía razón en sus señalamientos.
Chávez Romero leyó un texto en el que apuntó que la falta de resultados del gobierno de Astudillo se debe a que sus secretarios pertenecen a diferentes grupos políticos, lo que limita el alcance de su trabajo en el estado.
También le reclamó que la promesa realizada frente al periodista Carlos Loret de Mola el 3 de mayo de 2016, con la que se comprometía a que la inseguridad se acabaría en un año, no ha sido cumplida.
Durante su intervención de manera continua y sin pausas el empresario local le recordó que la administración pasada, que encabezaron el ex priista Ángel Aguire Rivero y el universitario Rogelio Ortega Martínez, dejó un quebranto de 18 mil 600 millones de pesos y que hasta la fecha no se ha castigado a nadie y que incluso funcionarios de esos gobernadores continúan laborando en el actual gobierno.
“Sin embargo vemos con tristeza, con enojo y frustración que no habido acción en contra de los responsables y que muchos funcionarios de la administración pasada están en su gabinete, y eso genera falta de confianza en su administración”, subrayó.
Chávez Romero señaló que la postura del Grupo Cuicalli es que en Guerrero no se puede seguir “experimentando” con sus ciudadanos, menos cuando ha sido un estado tan lastimado y robado.
Indicó que en Guerrero lo único que se ha podido producir son políticos ricos, mientras que el estado se mantiene estancado, por lo que la ciudadanía requiere de respuestas y propuestas surgidas de la experiencia para abordar grandes desafíos.
“Requerimos de la planeación eficiente de las acciones que vengan a transformar al estado y en lugar de esto observamos mucha falta de capacidad de los diferentes niveles de la presente administración”, comentó.
Indicó que los actuales funcionarios actúan de manera prepotente y humillan a los ciudadanos que requieren de sus servicios, por lo que han llegado comentarios al grupo, además de tener testimonios de que el gabinete del gobernador está fallando.
“Señor gobernador, estamos transitando por el segundo año de su administración. La esperanza de los guerrerenses fue el cambio real, duradero y que los ciudadanos alcanzaran los mejores lugares de vida con más oportunidades para sus hijos”, agregó.
En su discurso puntualizó que en el sector educativo se observa una baja calidad e incluso se “percibe una crisis en este renglón”.
También se señaló que en el caso de Salud, la realidad no es diferente, ya que a pesar de que el Hospital Raymundo Abarca Alarcón está en la capital del estado, no cuenta con material ni trabajadores que cumplan con brindar un buen servicio a la población que lo requiere.
“Un exceso” las críticas, dice el gobernador

Por su parte el gobernador enfatizó que en su administración se ha avanzado a pesar de las adversidades actuales, y que además los señalamientos del presidente del grupo Cuicalli, habían sido “un exceso”.
La exposición del gobernador se concentró en el hecho de que recibió una administración con serios problemas. En primera instancia había un déficit por 23 mil 694 millones de pesos, con adeudos al SAT por más de 3 mil 945 millones de pesos, y al ISSSTE por 4 mil 500 millones de pesos.
Además de laudos por 18 millones de pesos por demandas laborales, así como faltantes que están siendo revisados por la Auditoría Superior de la Federación de la que espera que esté dando resultados.
De manera reiterativa el gobernador enfatizó que desde hace 16 meses se ha trabajado para mejorar las condiciones en las que está el estado y que ahora se ha avanzado en diversos temas, pero reconoció que el problema de la violencia y su incremento en Chilpancingo está activo y se debe a los grupos que se dedican al “trasiego de la amapola”.
Insistió en que el problema de seguridad es un desafío que se enfrenta diariamente en Guerrero, pero no es exclusivo de Guerrero, y su gobierno con la Secretaría de la Defensa Nacional, Marina Armada de México, Policía Federal y Estatal han combatido a los grupos que “trasgreden la ley”.
Sobre los últimos hechos de violencia en la capital del estado, apuntó que se deben a la disputa de los grupos criminales por el territorio.
“Vamos a enfrentar a todos los que generan violencia”, aseguró el mandatario.
También dijo que en el caso de Acapulco la situación ha avanzado para bien y que en Chilpancingo las disputas entre grupos delincuenciales que mueven la droga agravan la situación.
En la misma tónica de violencia también abordó el caso de San Miguel Totolapan, de lo que dijo que se mantiene un operativo para detener a los miembros del grupo del crimen organizado que opera en la región –Los Tequileros– y garantizar que los maestros y alumnos regresen a las escuelas que se mantienen cerradas desde la segunda semana de diciembre.
Aseguró que en Guerrero hay una inversión de 2 mil millones de dólares, y recordó que se inaugurará el proyecto de la tirolesa, además de que se mejora la infraestructura del aeropuerto de Acapulco.
Sobre los cuestionamientos al sueldo de los funcionarios, Astudillo respondió de manera reiterativa que ante el aumento de las gasolinas se aplica un plan de 20 medidas de austeridad, entre ellas reducir las percepciones del gobernador, los secretarios, subsecretarios y directivos.
Informó que él ganaba 130 mil pesos, y que ahora recibe un 30 por ciento menos, mientras los funcionarios que ganaban 100 mil ahora reciben 80 mil pesos.
El mandatario aprovechó para enfatizar que en el estado existe gobierno, debido a la labor que se ha realizado durante estos 16 meses de trabajo, y recordó que Guerrero ha tenido una gran cantidad de problemas.
Defendió que su gabinete es plural y que da gobernabilidad
En el encuentro que duró poco más de dos horas y media, el gobernador fue cuestionado de manera reiterativa por los empresarios sobre el problema de inseguridad y de la basura.
A la mitad de la reunión Astudillo Flores les respondió sobre el tema de la basura y dijo que él no haría el trabajo que le corresponde atender y solucionar al alcalde Marco Antonio Leyva Mena.
Pero a pesar de esto dijo que para mejorar la calidad de vida de los capitalinos se fortalecerá la infraestructura urbana, por lo que se han destinado más de 530 millones de pesos para 93 obras a realizar en Chilpancingo para realizar proyectos de agua potable, alcantarillado y saneamiento.