Diego Martínez / Agencia Reforma

Inglewood

Los Bills le pegaron una tremenda tunda al actual campeón de la NFL y demostraron porqué son los favoritos para arrasar en la temporada 2022.
El arranque de las tacleadas no pudo tener un mejor partido de presentación: Búfalo derrotó 31-10 a los Rams de Los Ángeles en un SoFi Stadium a reventar, donde 70 mil personas vieron cómo Josh Allen, Steffon Diggs y compañía le abollaron la corona al monarca en el juego inaugural.
En la previa, analistas y aficionados veían en el juego de anoche un adelanto del Super Bowl LVII, que se disputará en Arizona en febrero de 2023, pero dicha premonición quedó en duda luego de ver el nivel de los Carneros durante los cuatro periodos.
Las fallas defensivas de los campeones fueron aprovechadas por los Bills, que tanto la ofensiva como la defensiva mostraron el músculo.
Allen no anduvo fino, pero fue efectivo en los momentos clave. Lanzó para 297 yardas, con tres pases de anotación y dos intercepciones, mientras que Diggs recibió 122 yardas y un touchdown.
Si la pizarra final no estaba suficientemente desequilibrada, la estadística tampoco dejó lugar a dudas: Búfalo finalizó con 413 yardas totales (292 por pase y 121 terrestres), mientras que los locales registraron 243 (191 por aire y 52 por tierra), a pesar de contar con equipo completo.
La defensiva de los Bills también mandó un mensaje de clara mejoría al sumar tres intercepciones y cinco capturas.
La de anoche fue una paliza poco digna de un campeón de la NFL. Los Rams cayeron por 21 puntos de diferencia, algo que únicamente superaron los Cuervos de Baltimore en el inicio de la 2013, cuando cayeron por 22 puntos ante los Broncos de Denver. El otro campeón apaleado fue Dallas, que en la campaña de 1993 cayó por 19 puntos ante Washington.
Sean McVay debe esperar para celebrar por su renovación como entrenador de los Rams hasta 2026, pues tiene mucho trabajo pendiente.

Buscan romper maleficio

En la NFL hay 12 franquicias -de las 32 que existen- que jamás han podido ganar un Super Bowl, incluso, cuatro de ellas ni siquiera han podido sacar un boleto para disputar el Súper Domingo.
Sin embargo, para esta temporada, algunas levantan la mano para romper el maleficio.
Los Bills de Búfalo, que debutaron ayer con un triunfo, Cargadores de Los Ángeles, Bengalíes de Cincinnati y Cardenales de Arizona están colocados en el Top 15 de los favoritos de los momios para quedarse con el trofeo Vince Lombardi en el próximo Súper Tazón LVII, que se celebrará el domingo 12 de febrero de 2023 en Arizona.
De los equipos con “mala suerte”, los Bills, del quarterback Josh Allen, son colocados como los favoritos para coronarse de la NFL, tanto por expertos como casas de apuestas.
El problema es la historia negativa que tienen, pues en los 90, los Bills llegaron a cuatro Super Bowls de manera consecutiva y todos los perdieron (dos ante Dallas, uno ante Gigantes y otro ante Washington.
Otro par de equipos que sueñan con la gloria son los Cargadores y los Bengalíes. El cuadro angelino es colocado como el sexto favorito en los momios, mientras que Cincinnati está en el peldaño número 11.
Pero los Bengalíes llegan motivados, ya que sorprendieron la campaña pasada llegando al Super Bowl y quedándose cerca de vencer a los Rams.
Los Cargadores solamente han llegado a un Súper Tazón en su historia, en la campaña 1994.
En tanto, los Bengalíes han hecho tres apariciones en el Super Bowl, cayendo apenas en febrero pasado ante Rams, en la campaña 1988 y 1981 perdiendo en ambos ante los 49ers de Joe Montana.
Y también aparece en el panorama Arizona, que estará jugando en noviembre en el estadio Azteca. Es colocado como el favorito número 15 para coronarse.
Y de los otros ocho equipos, la realidad es que se ve imposible que logren llegar a la cima, pues eso sería un milagro.
De las 12 franquicias que nunca han ganado un Super Bowl, curiosamente solo una tiene marca positiva en temporada regular de por vida, y son los Browns, que además son el segundo equipo con más campañas en la NFL con 74. Tiene ocho campeonatos, pero eso fue antes de la era de los Super Bowls.
Las Panteras de Carolina, que apenas van por su participación 28, tiene marca de nueve triunfos por ocho descalabros, mientras que los Jaguares de Jacksonville tienen récord empatado de 7-7 en Playoffs.
Las otras 10 franquicias tienen récord negativo en postemporada.