Staff / Agencia Reforma

Ciudad de México

Independientemente de qué equipos consigan llegar, el Super Bowl LV promete ser un duelo de juventud contra experiencia.
Los cuatro equipos restantes en la Conferencia Americana tienen quarterbacks jóvenes, ágiles e imaginativos que han demostrado los motivos por los que se les considera el futuro de la NFL.
Entre Josh Allen (Bills, 24 años), Lamar Jackson (Ravens, 24), Patrick Mahomes (Chiefs, 25) y Baker Mayfield (Browns, 25) saldrá el representante de la AFC en el Súper Tazón en el que, probablemente, se midan a un lanzador con mucho más camino recorrido.
Tal es el caso de Aaron Rodgers (Packers, 37 años), Tom Brady (Bucs, 43) y Drew Brees (Saints, 42 años), cuyo estatus de “leyendas vivientes” en la NFL está respaldado por muchos años de experiencia en temporada regular y postemporada.
Incluso Jared Goff, QB de los Rams de 26 años, ya tiene experiencia en el Super Bowl, algo que ni Allen, ni Jackson, ni Mayfield pueden presumir.
El camino de Goff podría terminar hoy por la tarde ante Rodgers y su largo colmillo, mientras que por la noche Allen y Jackson regalarán un duelo repleto de energía entre dos quarterbacks elegidos en el Draft de 2018 y que todavía tienen mucho que demostrar.
Mañana, algo similar podría suceder cuando Browns y Chiefs se enfrenten con Mayfield y Mahomes en un duelo de tú a tú, mientras que Tom Brady y sus Bucs tendrán una prueba de la vieja escuela ante Drew Brees y sus Saints.