A los Vaqueros de Dallas se les olvidó que, para apelar a los milagros, primero hay que buscarlos.
Dallas tenía ayer la encomienda de vencer a los Gigantes de Nueva York para esperar un sorpresivo triunfo de Filadelfia ante Washington que los instalara en la postemporada.
Pero el equipo texano ni siquiera pudo sacar un triunfo en East Rutherford, donde cayó 23-19 ante los Gigantes, y se despidió de la temporada 2020 de la NFL sin meter las manos, consumando así un fracaso que se gestó semana a semana.
Fue justamente en un duelo ante los Gigantes, en la Semana 5, cuando la paulatina debacle de los Vaqueros se pronunció tras la lesión que dejó fuera de combate a Dak Prescott por el resto del año.
Sin Prescott, los texanos aún contaban con Andy Dalton, quien se unió a la intermitencia de sus compañeros y fue el guía del equipo de la estrella solitaria hacia un abismo en el que incluso sin hacer méritos, tenían posibilidades de acceder a los Playoffs de último minuto.
Al final fue Nueva York quien anheló el triunfo de Filadelfia, mismo que no llegó en un duelo nocturno donde Washington se aferró a la ventaja para conseguir el triunfo por 20-14 y obtener el liderato en el Este de la NFC, lo que le significa recibir a Tampa Bay en la Ronda de Comodines.
Con su victoria de ayer, Washington se convirtió en el tercer equipo de la NFL en obtener un lugar en la postemporada con récord perdedor desde 1982, cuando la huelga de jugadores acortó la temporada y los puestos en Playoffs se extendieron de 10 a 16.

Bills derrota a Delfines

Las esperanzas de los Delfines de Miami de volver a los Playoffs fueron sofocadas por los Bills de Búfalo, que de paso le hicieron un favor a los Potros de Indianápolis.
Miami necesitaba un triunfo en Búfalo para asegurar su boleto a la postemporada, pero simplemente no pudo contener al feroz ataque comandado por Josh Allen, que llevó a los Bills a un holgado triunfo 56-26.
A diferencia de Ben Roethlisberger con Pittsburgh, Allen jugó de titular pese a que su equipo tenía amarrado su lugar como el segundo mejor de la AFC y lanzó tres pases de touchdown.
Los Delfines fueron incapaces de responder, principalmente porque su QB Tua Tagovailoa entregó tres intercepciones en el partido y sembró dudas sobre su futuro como líder del equipo de Florida.
La caída de Miami le abrió la puerta a Indianápolis, que no estaba tan preocupado por vencer a Jacksonville, sino porque alguno de los otros contendientes de la Conferencia Americana cayera.
La otra esperanza para los Potros era que los Titanes tropezaran ante Houston para ser líderes de la división Sur, pero Tennessee se aferró al triunfo y se quedó con la cima del sector.
Mientras Miami piensa en la próxima temporada, Potros y Titanes se alistan para los Playoffs.

Green Bay vence a Chicago que de todos modos se clasifica

En la búsqueda por obtener la mejor siembra de la Conferencia Nacional, ninguno de los contendientes se equivocó, pero la ventaja fue para Aaron Rodgers y sus Empacadores.
Green Bay llegó con ventaja a la última semana de la NFL, consciente de que con un triunfo ante Chicago le bastaba para amarrar el mejor puesto de la NFC y así obtener un merecido descanso en la Ronda de Comodines.
Rodgers tenía el reto de aprovechar la desesperación de los Osos de Chicago, que también necesitaban una victoria para colarse a los Playoffs.
Consumida por sus ansias, Chicago fracasó en su intento de llevarse una difícil victoria ante unos Empacadores, aunque consiguió su lugar en la postemporada gracias a la caída de los Cardenales de Arizona.
En el emparrillado, los dos Aaron de Green Bay se llevaron las palmas: Rodgers, por haber lanzado 4 pases de anotación, y Jones, tras conseguir un touchdown por tierra que le dio a Green Bay el colchón que necesitaban para encaminar el partido.
Mientras tanto, Nueva Orleans y Seattle conseguían respectivos triunfos que resultaron inútiles tras la victoria de los Empacadores.
Los Santos aplastaron 33-7 a las Panteras de Carolina, y los Halcones Marinos tuvieron que venir de atrás para remontar un aguerrido partido ante los 49s de San Francisco, que cayeron 26-23.

Rompen Browns larga sequía

Baker Mayfield y los Browns ganaron el primer partido de su propia postemporada.
Cleveland derrotó 24-22 a unos mermados Acereros de Pittsburgh para acceder a los Playoffs por primera vez en 22 años.
“Nosotros ya empezamos los Playoffs, es ganar o morir”, aseguró Mayfield previo al duelo ante Pittsburgh, que jugó sin su quarterback titular, Ben Roethlisberger, y con otros titulares en la banca.
La revancha podría llegar pronto para el Big Ben y compañía, pues se medirán a los Browns en la Ronda de Comodines que se juega la próxima semana.
A la eterna rivalidad entre Pittsburgh y Cleveland en postemporada se sumará el juego entre Baltimore y Tennessee, luego de que los Cuervos aseguraran su puesto en la siguiente fase tras aplastar a los Bengalíes de Cincinnati.
Con la presencia de estos tres equipos en Playoffs, la AFC Norte se convirtió en la única división de la NFL que tiene una tercia de representantes en postemporada, aunque uno de ellos no llegará a la Ronda Divisional.