Alejandra Benítez / Agencia Reforma

Ciudad de México

Pumas sacó la casta en el momento que más lo necesitaba, Juan Ignacio Dinenno recobró el gol y la victoria 4-1 sobre Gallos Blancos llegó como un bálsamo para meter a los felinos en la pelea por el repechaje.
Los universitarios sabían que era ahora o nunca, sumar de a tres o despedirse del torneo, después de una racha de nueve partidos sin triunfo.
Con 13 puntos, todavía les resta enfrentar a Toluca, Cruz Azul, Puebla y Juárez.
Pumas tuvo que superar un inicio de continuas fallas en la ofensiva, errores que le impidieron manejar el encuentro desde la primera parte.
Juan Ignacio Dinenno inició en el banquillo y Gustavo Del Prete no pudo con la presión, falló en dos ocasiones y Diogo de Oliveira lo acompañó en una más, dejando al técnico Andrés Lillini con la molestia a flor de piel por los yerros de su gente en la delantera.
Eduardo Salvio afinó la puntería y abrió el marcador al 24’, con un gol que les devolvió a los auriazules el aplauso de la afición.
Solo que al 42’, Pumas falló en la marcación y el empate de Ángel Sepúlveda fue un balde de agua fría.
Desde la banca vino Dinenno para jugar el segundo tiempo y demostrarle con goles al técnico Lillini que su lugar está en el 11 inicial.
En 5 minutos el argentino le hizo un par de tantos a los Gallos, el segundo con un pase de Dani Alves que sacó la magia por el sector de la izquierda para sellar su primera victoria en el futbol mexicano.
Hace unos días, Dani le declaró a su compañero Efraín Velarde que era un hombre que no se achicaba ante la adversidad y ayer le mostró el camino a los universitarios.
Dinenno llegó a cinco tantos en su cuenta, colaborando para hundir al Querétaro.
Jorge Ruvalcaba, canterano de Pumas, colaboró con el cuarto gol que le redituó puntos con el estratega, ya que seguramente lo tendrá en cuenta para pelear por la titularidad en los siguientes partidos.
Cae Atlas y está a un
paso de la eliminación

El Atlas está muy cerca de perderse hasta el repechaje y más lejos de la ilusión del Tricampeonato. La derrota de 1-0 ante el Mazatlán deja al equipo rojinegro en penúltimo lugar con 10 puntos, ya con escasas posibilidades para acceder a la zona de repesca.
Desde un inicio al Atlas se le complicó imponer una propuesta clara que generara peligro al frente pese a contar con sus principales hombres de ataque: Julián Quiñones y Julio Furch, ambos aislados al no contar con abastecimiento de balones a modo.
Ante las deficiencias del Atlas, el Mazatlán sólo tuvo que ser más acertado y ofrecer un mejor juego que su indefenso rival.
Tras varios minutos de batalla por la posesión del balón, Aguilera en su afán por querer salir jugando perdió el balón con Nicolás Benedetti, quien se fugó al área y tocó por arriba a la salida de Camilo Vargas para marcar el 1-0, al 31’.
En la segunda parte, Atlas arrancó fuerte. Al 58’, Quiñones anotó de chilena, pero tras revisar en el VAR, el árbitro Fernando Hernández anuló el gol por fuera de lugar del colombiano.
Pese a todo, Atlas jugó mejor y generó más peligro, pero el esfuerzo no le alcanzó para evitar sumar su séptimo partido al hilo sin ganar y su octava derrota en el torneo.