El duelo entre los mejores equipos de la Conferencia Americana será el estelar de la doble jornada dominical en la que la NFL definirá a las dos franquicias que jugarán el Super Bowl LV en Tampa.
Los Chiefs de Kansas City, mejor sembrado de la AFC, recibirán en el Arrowhead Stadium a los Bills de Buffalo, segundo mejor equipo de la Conferencia, en un duelo que podría enfrentar a dos de los mejores lanzadores de la NFL.
Patrick Mahomes, cuya presencia está en duda por una posible conmoción cerebral, y Josh Allen, llamado a ser el sucesor de Jim Kelly en Buffalo, comandan a los equipos que jugarán a las 5:40 p. m.
Pese a la posible ausencia de Mahomes, las casas de apuestas ya colocan a los Chiefs como favoritos para regresar al Super Bowl.
Del otro lado de la llave, los Packers de Green Bay esperan en Lambeau Field a los Buccaneers de Tampa Bay, que sorprendieron ayer a los Saints.
De conseguir una sorpresiva victoria ante los comandados por Aaron Rodgers, los Bucs se convertirán en el primer equipo en jugar el Super Bowl en su estadio.
El duelo entre ambos será a las 2:05 p. m. en el gélido clima de Wisconsin.

Ríe Tom Brady al último

Drew Brees dominó a Tampa Bay en la temporada regular, pero Tom Brady y sus Buccaneers rieron al último.
La carcajada final de Brady en el Mercedes-Benz Stadium podría ser el ambiente sonoro que acompañe el último juego de Brees, quien se despidió anoche de la que ha sido su casa por 15 temporadas con un rostro desencajado al caer 30-20 en el duelo de Ronda Divisional con el que los Saints firmaron su cuarta eliminación consecutiva en postemporada sin poder llegar al Super Bowl.
En la temporada regular, Nueva Orleans dominó en dos juegos a los Buccaneers, derrotándolos por 34-23 en la Semana 1 y 38-3 en la Semana 9.
La probabilidad estaba en contra de Brady y los suyos, que se enfocaron en incomodar a Brees todo lo posible para evitar que el ataque de los Saints funcionara como lo hizo durante la campaña.
La defensiva de Tampa Bay estuvo a la altura del reto, tanto así que consiguieron interceptar tres veces al quarterback de los Saints, quien no solo estuvo incómodo, sino que encontró en la desesperación a su peor enemigo.
Brees había sido interceptado sólo 6 veces en la temporada, pero ayer simplemente no encontró la llave para hacerle más daño a los Buccaneers, que ahora sueñan con jugar el Super Bowl LV en su casa, aunque antes deberá superar a Green Bay.
Para Brady la tarea estaba clara: evitar los errores y jugar, como lo hizo durante años en Nueva Inglaterra, priorizando los pases cortos y seguros.
Mientras que Tom renovó bríos para seguir buscando récords en la NFL, el futuro de Brees parece el retiro.

Salva suplente a Kansas City

Al inicio del 2020, los Chiefs de Kansas City concretaron dos contratos que, voluntaria e involuntariamente, marcarían el rumbo de la franquicia rumbo a su segundo Super Bowl consecutivo.
El primero de ellos fue a Patrick Mahomes, quien firmó un contrato por 450 millones de dólares en 10 años, con lo que Kansas aseguraba el presente y futuro de la organización.
Mahomes pasó a ganar 137 mil 808 dólares por día, 5 mil 472 dólares por hora, 96 dólares horas o 1.60 dólares por segundo. Y un segundo bastó para que la inversión de los Chiefs en Mahomes estuviera al borde del fracaso en esta temporada.
El quarterback de 26 años salió por el protocolo de conmoción cerebral en el tercer cuarto del duelo de la Ronda Divisional ante Cleveland y dejó un hueco inmenso en la ofensiva de Kansas City.
En ese momento cobró importancia el segundo contrato en cuestión: el veterano lanzador Chad Henne estampó su firma al inicio de la campaña por 2 temporadas y 3 millones 250 dólares, menos del 1 por ciento de lo que estipula el contrato de Mahomes.
Pero fue el ex quarterback de Miami y Jacksonville, en complicidad con la defensiva de los Chiefs, el encargado de guiar a Kansas City a su tercer juego consecutivo por el Campeonato de la AFC.
En el último cuarto, Henne completó una carrera de 13 yardas y un pase a Tyreek Hill en cuarta oportunidad para que los Chiefs consumieran el reloj y consumaran una victoria 22-17 sobre los Browns de Cleveland, que terminaron su regreso a postemporada tras 18 años de ausencia.
Ahora, la presencia de Mahomes está en duda para enfrentar a los Bills la próxima semana, pero en Kansas City están convencidos de que “#HenneThingIsPossible”.

Impulsa afición a Green Bay

Las huellas de Aaron Rodgers en la nieve de Lambeau Field tienen rumbo directo al Super Bowl LV.
Poco importó jugar el sábado a temperaturas bajo cero y hacerlo ante un estadio semi vacío: Rodgers y los Packers calentaron el emparrillado para vencer 32-18 a los Rams de Los Ángeles y así instalarse en el Campeonato de Conferencia de la NFC.
Bastaron 8 mil personas en la casa de Green Bay para alentar a un Rodgers que por fin jugará la antesala del Súper Tazón en su casa.
Lo hará la próxima semana ante el sorprendente Tampa Bay de Tom Brady, nuevamente arropado por los aficionados que ayer le dieron el impulso que necesitaba para lanzar dos pases de touchdown y conseguir uno más por acarreo.
Los Packers no solo consiguieron maniatar a la ofensiva de los Rams, sino que superaron a su poderosa defensiva y arrasaron con un equipo angelino que tuvo que echar mano de un lesionado Aaron Donald para tratar de remediar la situación.
“La afición fue lo mejor del partido, sin duda”, indicó Rodgers, quien salió del campo alentado por una fanaticada que ansía verlo como el Jugador Más Valioso de la temporada.

El regreso de Bills

De victoria en victoria, Josh Allen está cada vez más cerca de poner su nombre junto al de Jim Kelly en los libros de historia de los Bills.
El sábado por la noche, el quarterback de 24 años guió a Buffalo a su primer juego de Campeonato de la AFC desde que Kelly lo hiciera en la temporada 1993-94.
Lo hizo con una contundente victoria 17-3 ante los Ravens de Baltimore, que nuevamente sucumbieron en Playoffs con Lamar Jackson en los controles.
Fue el 23 de enero de 1994 cuando los Bills vencieron 30-13 a los Chiefs de Kansas City para asegurar su boleto al último Super Bowl en la historia de la franquicia.
Lo que vino después fue la cuarta derrota consecutiva de Buffalo en un Súper Tazón, recuerdo que no atormenta a Kelly, quien primero quiere disfrutar al equipo en su etapa con Allen al frente.
Las expectativas son altas con la séptima selección del Draft del 2018, que anoche lanzó 206 yardas y un pase de touchdown en un partido donde las defensivas de Buffalo y Baltimore pudieron contener a sus rivales, y en el que los pateadores de ambos equipos sufrieron con el viento en Orchard Park.
Su contraparte, Lamar Jackson, fue eliminado de postemporada por tercer año consecutivo. El Jugador Más Valioso de la temporada pasada ni siquiera pudo finalizar el duelo, tras recibir un fuerte golpe en la cabeza.
Los Bills se enfrentarán en la Final de Conferencia Americana al vigente campeón Kansas City cuyo quaterback estrella, Patrick Mahomes, abandonó el juego de ayer ante Cleveland por protocolo de conmmoción por un golpe en la cabeza y está en duda para el próximo domingo.