Luis Daniel Nava y Lourdes Chávez

Chilapa / Chilpancingo

El obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández, reveló que el obispo emérito Salvador Rangel Mendoza le comentó que “ahora sí lo amolaron”, acerca del caso de su desaparición en Jiutepec, Morelos.
José de Jesús González fue entrevistado en Chilapa respecto a la salud y la situación de Salvador Rangel.
Dijo que el obispo emérito apenas si puede hablar y que sólo recuerda que le trataron de robar su camioneta.
Antes en la ceremonia pidió por su recuperación.
Respecto a la campaña de desprestigio en su contra respondió que el prelado sí está delicado y recuperándose poco a poquito. “Por eso queremos que pronto se alivie”.
Acerca de la campaña de desprestigio dijo que los obispos de Guerrero la desaprueban y que no se puede denigrar a nadie.
“A ninguna persona se le debe exponer así públicamente, violentar los derechos humanos”.
El obispo reveló que ha hablado con el obispo emérito y aseguró que “no puede hablar mucho”, pero que están en espera de los resultados de las investigaciones”.
–¿Está dispuesto a declarar?
–Sí está dispuesto, nomás que es muy delicado su estado de salud.
–El obispo se ha lanzado contra la estrategia de seguridad contra el gobierno federal –se le planteó.
–Él varias veces dijo que estaba amenazado, aún en los medios, pero que no tenía miedo. Y bueno ahora sí lo amolaron, en ese sentido.
–¿Considera que hay un trasfondo en contra de su labor?
–Sí, sí, yo creo que sí, puede ser que sí, por la manera en que está, está muy mal, o sea trataron exactamente como de desaparecerlo del mapa, entonces pensamos que sí, pero vamos a esperar las investigaciones que se están haciendo.
–¿Presenta golpes?
–Sí, sí, sí.
–¿En qué parte?
–En el cuerpo, brazos, tiene moretones, como que fue torturado y le fueron dadas sustancias muy fuertes que todavía no se puede desintoxicar.
–¿Descartan que fue el crimen organizado?
–No sabemos, simplemente que desapareció y que estaba en un hospital. Él no se acuerda, no podemos conjeturar.

Don Chava está sufriendo por dar la vida a los demás, dijo en su sermón en la catedral

El obispo González Hernández se refirió al ataque al obispo emérito Salvador Rangel Mendoza, en su sermón de este domingo en la catedral de la Asunción en Chilpancingo, sobre el amor.
Como parte de los ejemplos mencionó que “don Chava ha sufrido mucho por dar paz a muchas comunidades, dar la vida, y está sufriendo por dar la vida a los demás”, en alusión al prelado que el sábado de la semana pasada fue desaparecido en Morelos.
Luego se refirió a una carta que escribió el Papa Francisco donde dijo que un buen político da la vida por la ciudad, para añadir, “que vayan prensándole ya, para que vean quién es buen político”, en referencia a las próximas elecciones.
En la eucaristía, señaló ejemplos de quienes “mueren poco a poquito para que otros tengan vida”: las madres, las abuelas, los papás, los maestros. En este contexto mencionó al obispo Rangel, incluso a los políticos.
Anticipó una felicitación a las madres por el próximo 10 de mayo, y pidió por un buen temporal para que se acaben los incendios, y que los campesinos vayan sembrando para tener buenas cosechas.

Llama el arzobispo a apoyar a las madres que han perdido a un ser querido

El arzobispo de la arquidiócesis de Acapulco, Lepoldo González González, llamó a los feligreses a demostrar el amor hacia las madres y apoyar a las que han perdido a un ser querido.
En su homilía del mediodía en la catedral de Nuestra Señora de la Soledad, en el Zócalo de Acapulco, González no hizo ningún comentario sobre del caso del obispo Salvador Rangel Mendoza.
“Decirles a ustedes que es importante decirle a mamá cuánto se le quiere”, dijo el arzobispo ante la proximidad del festejo del Día de las Madres, que todos los días al despertar se dé una muestra de cariño y acompañamiento a quienes han perdido a un ser querido.
La catedral ayer al mediodía estaba llena, varias decenas de familias acudieron, y su mensaje lo dedicó a las madres, pidió a los feligreses demostrar el amor hacia las madres y durante la hora que duró la homilia no hizo ningún comentario sobre la agresión al obispo emérito Salvador Rangel. (Aurora Harrison).