La presa Andrés Figueroa del municipio de Ajuchitlán del Progreso dejó de desfogar agua de manera involuntaria, debido a que lograron cerrar las compuertas cuando el nivel alcanzó el 40 por ciento de su capacidad.
Con la reparación de las compuertas ya no hay actividad en la presa, y el agua que queda se estará utilizando los siguientes meses para las actividades agrícolas del inicio de la temporada de lluvias, y se usará en caso necesario, si la población requiere el servicio antes del periodo.
La presa de Ajuchitlán del Progreso sufrió daños en octubre durante el paso del huracán Otis, debido a que se llenó y la fuerza que traía el agua provocó que las compuertas se doblaran y se volaran algunos empaques.
En diciembre repararon una de las dos compuertas dañadas por el meteroro, sin embargo, de manera involuntaria la presa, siguió tirando agua, y por ello, se le informó a todos los usuarios que la presa estaría cerrada, y sólo podían utilizar el agua del río.
Fue hasta este mes cuando lograron cerrar por completo las compuertas debido a que bajó el nivel de agua de la presa más del 40 por ciento, lo que permitió que los trabajadores pudieran ingresar con las herramientas necesarias y arreglar la fuga. (Israel Flores / Ciudad Altamirano).