Juan Luis Altamirano Uruñuela

Ciudad de México

Este miércoles, alrededor de las 9 de la mañana, mientras el presidente Andrés Manuel López Obrador ofrecía su conferencia de prensa matutina, normalistas con el rostro cubierto utilizaron una camioneta tipo pick up de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para derribar la puerta de Palacio Nacional en la calle Moneda, en la última parte de las manifestaciones de los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, para exigir diálogo directo con el mandatario a fin de conocer los avances en la investigación.
Previamente, los manifestantes buscaron ingresar a Palacio Nacional golpeando unas vallas metálicas contra la puerta y empujándola directamente con las manos, y prendieron fuego en la parte baja pero la puerta no se prendió. Los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos miraban esas acciones, mientras buscaban entrar al recinto donde el presidente López Obrador daba su conferencia mañanera, para entregarle un documento con sus demandas, principalmente una audiencia directamente con el mandatario.
Al no tener respuesta, los manifestantes realizaron pintas en paredes del Palacio Nacional con mensajes como: “+43” y “sólo queremos un diálogo”. Tras la presencia e insistencia por ingresar, desde dentro policías militares esparcieron un gas de color azul hacia donde se encontraban los manifestantes, que respondieron lanzando piedras con resorteras.
Colocaron la camioneta en reversa y tuvieron que impactarla cinco veces en la puerta de Palacio Nacional hasta que se venció y ya rota se abrió. Algunos normalistas y padres ingresaron al recinto, y de nueva cuenta se respondió con gas azul, presuntamente de extintores.
Minutos después del impacto de la camioneta, el abogado y representante legal de los padres de los 43 normalistas desaparecidos, Vidulfo Rosales Sierra, ofreció una conferencia de prensa y advirtió que si no existe un diálogo directo con el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, aumentará el nivel de las protestas.
“Estas protestas van a continuar, van a seguir, si no hay un diálogo incluso va a haber un escalamiento de la protesta. De una vez lo decimos y lo decimos claro, esa es la posición”, afirmó.

Con descalificaciones y complots inexistentes, López Obrador busca desviar las investigaciones, señala el abogado

De igual manera, Rosales Sierra aseguró que la forma de frenar el escalamiento de las protestas es con el restablecimiento y reorientación del diálogo con López Obrador.
“Ese escalamiento de la protesta se evitaría si se restablece el diálogo, se reorienta el mismo y los temas esenciales de la investigación se po-nen en la mesa y empezamos a trabajar sobre la investigación y dejamos de lado las descalificaciones, los complots inexistentes”, indicó.
Agregó que por parte del gobierno federal se busca una “desviación” del tema y retieró que si se mantiene la postura del presidente, continuarán las protestas los próximos meses, con una pausa por el receso vacacional de Semana Santa debido a que no laboran las dependencias del gobierno.
“Si la postura sigue así nosotros vamos a continuar con la protesta y va a haber un escalamiento de la protesta, nosotros estamos trabajando para hacer extensiva y más masiva la protesta si no hay un diálogo”, avisó el abogado.
Vidulfo Rosales cuestionó que el presidente López Obrador no ha involucrado la responsabilidad que tienen los elementos del Ejército, además de la extradición de Tomás Zerón y una línea de investigación.
“¿Por qué no dice nada de los 800 folios?, ¿por qué siempre que se le pregunta del caso Ayotzinapa dice que se ha enmarañado el caso por Emilio Álvarez Icaza, por la Comisión Interamericana, por los abogados?, que responda de los 800 folios, ¿cuándo se va a extraditar a Tomás Zerón de Lucio? ¿cuándo va a consolidarse la línea de investigación que tiene que ver con los 17 estudiantes que fueron trasladados de Barandilla? Esos son los temas que nosotros queremos dialogar”, explicó Vidulfo Rosales Sierra.
Tras la protesta contra la puerta del Palacio, López Obrador dijo en la conferencia mañanera que los padres y madres de los estudiantes desaparecidos serán atendidos por el subsecretario de Gobernación, Félix Arturo Medina Padilla. Fue la primera respuesta del mandatario a la demanda de los padres dese que se instalaron en plantón frente al Palacio Nacional, el 26 de febrero.
Vidulfo Rosales opinó que la postura de López Obrador de ofrecer una reunión en un plazo de hasta 20 días, fue por el acto fuerte de protesta y los manifestantes se van con una reacción que les da la posibilidad de una respuesta.
“Responde porque hubo un acto de protesta fuerte afuera, si no, no responde. Nos íbamos a ir sin una respuesta, nos vamos sin una respuesta porque formalmente nosotros no hemos sido avisados por parte del gobierno. Por lo menos obtuvimos una reacción que abre la posibilidad”, dijo.
Rosales declaró que tienen un regreso a la Ciudad de México tentativo para el 26 de abril y aclaró que no dialogarán temas de la investigación con el subsecretario de Gobernación, Félix Arturo Medina Padilla, ya que no tiene “estatura política” y es un “títere”, y que buscan que sea enlace para una reunión con el presidente.
“No vamos a poner fechas límites, tampoco vamos a caer en esas posturas. Que el presidente dé una respuesta, que diga cuándo. Nosotros no estamos en una postura radical de poner emplazamiento, lo único que estamos pidiendo es una fecha para el diálogo”, explicó.
Sobre las declaraciones que López Obrador hizo en la conferencia mañanera sobre la protesta que a fuerza abrió la puerta del Palacio Nacional en ese momento, en las que afirmó que el senador Emilio Álvarez Icaza es un elemento manipulador de los padres, Vidulfo Rosales señaló que “él no es asesor de los padres, el asesor soy yo”. Añadió que hasta el momento ninguna de las dos candidatas ni el candidato a la Presidencia se acercó a los padres.

Buscarán al papa Francisco

El abogado adelantó que estarán en la búsqueda de otras rutas para conseguir el diálogo, concretamente la intervención del Papa Francisco, además de organizaciones religiosas del país.
“Vamos a buscar a la Iglesia. Vamos a tratar de acercanos a los obispos que integran el Episcopado mexicano para pedirles que ellos intercedan por nosotros. Vamos también a pedirle a la Nunciatura Apostólica, pedirle al Papa que interceda por los padres y las madres de familia”, declaró.
Precisó que la búsqueda de las organizaciones religiosas está condicionada a que primero se dé una comunicación con el gobierno federal, y que estarán a la espera de diálogo con las autoridades.

Entregan oficio a Segob

Después de la conferencia, una funcionaria de la Secretaría de Gobernación llegó para recibir un documento que estaba planeado para ser entregado al presidente López Obrador, que fue recogido y presentado en la dependencia y minutos más tarde regresó con el acuse de recibido.
“Estamos nosotros abiertos al diálogo en el momento que gusten”, dijo la funcionaria, y el señor Mario González, padre del normalista César Manuel González, señaló que “no es conveniente” que Félix Arturo Medina Padilla se mantenga como subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación y que el fiscal especial Rosendo Gómez Piedra no tiene “capacidades para el caso”.
En el documento se pide a López Obrador una reunión y recuerdan que el 20 de septiembre de 2023 se entregó un escrito para solicitar la entrega de 800 folios de la Secretaría de la Defensa Nacional, que no fue contestada.
“Nuestra petición no ha sido contestada satisfactoriamente ya que la respuesta que dio el secretario de la Defensa Nacional en reunión con la secretaria de Gobernación llevada a cabo el día 25 de septiembre de 2023 no contiene los 800 folios faltantes ni la información relacionada con los 17 estudiantes”, se lee en el escrito.
De igual forma solicitan la extradición del ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio y de José Ulises Bernabé, además de que se analice otra línea de investigación.
“Es necesaria una próxima reunión con usted para dialogar este tema. Aunado a lo anterior resulta relevante abordar lo relacionado con la línea de investigación de los 17 estudiantes trasladados de los separos de Barandilla municipal de Iguala, la extradición de Tomás Zerón de Lucio, prófugo en Israel y la extradición de José Ulises Bernabé, prófugo en los Estados Unidos”, se lee.
El escrito está firmado por el Comité de Madres y Padres de los 43, Cristina Bautista Salvador, Hilda Legideño Vargas, María Martínez Zeferino, y los padres Mario César González Contreras y Emiliano Navarrete Victoriano.

Levantan plantón

El abogado Vidulfo Rosales informó que en el plantón participaron de manera permanente 200 personas durante los 10 días, además de alrededor de 500 estudiantes normalistas que se trasladaron constantemente. Adelantó que existe la posibilidad de que un grupo de madres y de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) participen en la marcha por la conmemoración del Día de la Mujer este viernes 8 de marzo.
Cerca de la una de la tarde, los padres realizaron un mitín en el plantón que realizaban en el Zócalo de la Ciudad de México desde el 26 de febrero, donde señalaron que por el momento se retirarían el mismo pero regresarían para continuar con la exigencia de diálogo.
La señora Cristina Bautista, madre de Benjamín Ascencio Bautista, reiteró que exigen la disponibilidad de 800 folios en los archivos el Ejército mexicano, además del regreso y la participación del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
“No podemos olvidarlos a nuestros hijos, no podemos olvidar que ya pasó mucho tiempo y nos retiremos. Como madres y padres necesitamos esa verdad, como campesinas y campesinos queremos saber esa verdad de nuestros hijos. Nos hace falta un hijo en nuestra casa, por eso estamos aquí en el plantón”, expresó.
Al terminar el mitin, dieron clausura formal del plantón y entonaron el himno Venceremos y los manifestantes iniciaron la recolección de artículos que utilizaron desde el 26 de febrero, como colchonetas, cobijas, ollas y la carpa donde durmieron durante los 10 días que estuvieron frente a Palacio Nacional.