EL-SUR

Sábado 18 de Mayo de 2024

Guerrero, México

Guerrero  

Protestan recolectores con camiones llenos de basura en el Zócalo de Chilpancingo; aún no hay tiradero

Fueron amenazados de muerte por el dueño del predio Los Astudillo, quien les dijo que ya no podían seguir depositando ahí los desechos, denuncian

María Avilez RodríguezChilpancingo

Octubre 24, 2017

Por segunda ocasión en lo que va del año, unos 20 camiones recolectores del sector privado, algunos cargados con basura, fueron llevados a la explanada de la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac, en protesta para exigir un predio para depositar los desechos.
Por su parte, el síndico procurador, Miguel Ángel Hernández Gómez informó que en las comparecencias de los funcionarios encargados de la recolección de basura, se informó que en los dos años que va de la administración se gastan al mes 2 millones de pesos en la recolección de los desechos, es decir que el municipio gastó 48 millones de pesos durante el gobierno de Marco Antonio Leyva Mena.
Este lunes, los pepenadores y recolectores de basura del sector privado protestaron afuera del Palacio municipal y obstruyeron la mitad de la avenida Ignacio Ramírez con camionetas, para exigir un predio para depositar los desechos.
A las 12:25 del día, los trabajadores estacionaron unas 20 camionetas, algunas cargadas con basura, para exigir una audiencia con el alcalde suplente, Jesús Tejeda Vargas, porque el predio que utilizaban está lleno.
Recordaron que desde hace 11 días no están trabajando en la recolección, lo que repercute en la economía de más de 800 familias, además de que los permisionarios del tiradero les cobran 400 pesos diarios, aunque no trabajen.
Los manifestantes señalaron que han tenido reuniones con el nuevo alcalde pero sólo les ha hecho promesas.
Uno de los recolectores, Marco Briones dijo que “los pepenadores y recolectores le dimos nuestro voto de confianza al señor alcalde para que tuviera las facilidades para tener un nuevo tiradero, pero sólo nos ha engañado”.
Consideró que las autoridades estatales y municipales deben solucionar lo más pronto posible el problema de la falta de un predio propio para Chilpancingo, porque la recolección de los desechos es primordial en la capital.
Los recolectores y pepenadores gritaban que sus familias tenían hambre, y que no podían seguir otro día sin trabajar, y exigieron una atención inmediata de las autoridades.
Además los recolectores aseguraron que en el predio conocido como Los Astudillo, ubicado en el entronque de Tierras Prietas, a las 158 camionetas les cobran 400 pesos cada vez que van a depositar los desechos.
A la protesta salieron funcionarios municipales para decirles a los manifestantes que integraran una comisión que entraría al recinto a dialogar.
Ante la falta de acuerdos con las autoridades, a la 1:30 de la tarde los pepenadores y recolectores comenzaron a estacionar las camionetas en la explanada de la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac para presionar al Ayuntamiento.
A siete días de haber asumido el cargo Jesús Tejeda Vargas como alcalde interino, es la primera protesta del sector privado por la falta de un predio para el destino final de los desechos.
Actualmente, los camiones recolectores municipales depositan la basura en el predio El Platanal, ubicado en Eduardo Neri (Zumpango), donde no se permite que entren los del sector privado, por lo que las autoridades han tenido que habilitar tiraderos que no cuentan con las normas ambientales, como centros de transferencia para depositar los desechos, que se pepenen y que se lleven el resto los camiones del municipio.
Esta es la segunda ocasión que los recolectores del sector privado ingresan con sus camionetas, algunas llenas de desechos, a la explanada de la plaza cívica. La primera ocasión fue el 30 de enero, cuando los recolectores de basura del sector privado ingresaron con más de 50 camionetas a la plaza cívica, y ahí pernoctaron para protestar y denunciar que no tenían dónde depositar los desechos; luego, la Secretaría de Salud emitido una alerta sanitaria.
Este lunes, los inconformes llevaron unas 20 camionetas a la plaza cívica, tenían pensado llevar las 158 que tienen, pero un comerciante que tiene su local a un lado de la explanada atravesó su camioneta y les impidió la entrada.
Los pepenadores y recolectores se confrontaron con el empresario, quien posteriormente accedió y retiró su camioneta, pero de inmediato se bloqueó el paso con una patrulla municipal, por lo que no pudieron ingresar más.
Algunos transeúntes se molestaron ante la presencia de las camionetas llenas de basura que despedían malos olores, otros se burlaban y decían, “la nueva expo de basura 2017”.
Al lugar acudieron nuevamente funcionarios, entre ellos el síndico procurador, Miguel Ángel Hernández Gómez; la regidora, Margarita Montaño; y el regidor, Julio César Morales Díaz, para dialogar con los manifestantes.
Los funcionarios aseguraron que el predio conocido como Los Astudillo ya está habilitado y que se puede volver a usar, pidieron a los inconformes que desalojaran la explanada y que empezaran a trabajar.
Los recolectores se reusaron a abandonar el lugar e informaron que fueron amenazados de muerte por el dueño del predio, quien les dijo que ya no podían seguir depositando ahí los desechos.
Los funcionarios, pepenadores y recolectores acordaron que el predio se abriría nuevamente, con el compromiso de que pronto Chilpancingo tenga un predio propio para depositar sus desechos.
Después de las 3:20 de la tarde los manifestantes se retiraron del lugar.
El alcalde suplente aseguró que a su llegada su prioridad era solucionar el problema de la basura, incluso aseveró que el municipio tendría su propio terreno de manera permanente.

En dos años de la administración se ha gastado 48 millones de pesos en recolección de basura

El síndico Miguel Ángel Hernández Gómez respondió a pregunta de reporteros, que se han gastado 2 millones de pesos mensuales, de acuerdo con información de los funcionarios que comparecieron, entre ellos el ex secretario de Finanzas, Héctor Avilés García.
Consultado en la explana, Miguel Ángel Hernández Gómez dijo que el dinero se gastó entre combustible, pago de nómina y transferencias de los desechos.
Indicó que Avilés García sólo mostró una tarjeta informativa, no comprobó con recibos, por lo que se hará una auditoria preventiva.
Hernández Gómez informó que el gasto de los 2 millones es porque también continúa el saneamiento del relleno sanitario ubicado en la colonia La Cinca, que fue cerrado el 27 de enero.
A pregunta expresa, respondió que desconoce si a los del sector privado les cobran una cuota por depositar los desechos en el predio Los Astudillo, “no soy Ministerio Público para investigar, no tengo idea de cuánto les cobran”, justificó.
En la ficha informativa que entregó el ex secretario de Finanzas y Administración, se desglosa el gasto de la recolección de basura. En nóminas semanales, dice, se pagó a unos 100 trabajadores 681.38 pesos, por lo que mensualmente se gastaba 272 mil 548 pesos; en combustible para los camiones recolectores de basura se gastaron 560 mil pesos al mes y en maquinarias 140 mil pesos.
Además en mantenimiento preventivo, que consiste en afinaciones y reparaciones menores de los 18 vehículos, se gastaron 65 mil pesos mensuales; en reparaciones mayores de vehículos, 150 mil pesos mensuales. En cuanto a equipo y material de limpieza, al mes fueron 30 mil pesos.
El monto mensual fue de un millón 217 mil 548 pesos, y al año 14 millones 610 mil 576 pesos.
Entre los gastos extraordinarios que se señalan en la ficha están la compra de un camión compactador de basura que costó un millón 6682 mil pesos, y 200 mil pesos de anticipo en la compra de un predio en El Platanal, entre otros gastos.
Desde el 27 de enero, cuando se cerró el relleno sanitario de Chilpancingo y ante la falta de un predio para depositar los desechos en la capital han ocurrido dos contingencias a causa de la recolección de basura.
Además, las autoridades informan de gastos de la recolección de basura que se hicieron regularmente en el centro de la ciudad, porque en la periferia hay colonias que no tienen este servicio público desde hace más de un año, y los recolectores del sector privado les cobran hasta 50 pesos por llevarse los desechos.