Estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa tomaron la caseta de Palo Blanco para botear y pedir dinero que será destinado a los gastos de la caravana Rompiendo el silencio y el olvido que encabezan padres de los 43 normalistas desaparecidos.
A las 12:45 del día unos 40 normalistas llegaron a la caseta en un autobús de la línea ETN y tomaron las cabinas de cobro, la mayoría de los jóvenes iba cubierto del rostro con paliacates o playeras.
Los manifestantes también portaban mantas que tenían mensajes en contra del Estado por su responsabilidad en la desaparición forzada de los 43 normalistas y los ataques del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, hechos que permanecen impunes y la investigación de la Procuraduría General de la República (PGR) no siguió con las líneas que estableció el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
En la caseta los normalistas pedían 50 pesos a los automovilistas aunque también aceptaban una cooperación voluntaria e incluso bebidas como aguas o jugos.
Aunque ninguno de los estudiantes aceptó informar sobre la toma de la caseta, uno de ellos dijo “somos de Ayotzinapa, es para las caravanas” en referencia a los recursos que pidieron. Los jóvenes se retiraron a las 2:10 de la tarde.