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Sábado 18 de Mayo de 2024

Guerrero, México

Educación  

Faltan maestros desde hace tres años en la primaria Obregón, de El Coloso, Acapulco

El comité de padres de familia señala que el plantel no recibe ayuda institucional y que hubo fisuras en los pisos producto del sismo del 19 de septiembre, y que no han sido atendidas

Daniel Velázquez

Abril 17, 2018

Desde hace tres años los alumnos de la secundaria 100 Álvaro Obregón, de la unidad habitacional El Coloso, no tienen maestros de Matemáticas, Ciencias, Artes e Historia, informó la directora María Inés Aparicio Viviano.
En conferencia de prensa en las instalaciones de la escuela, el comité de padres de familia señaló que el plantel no recibe ayuda institucional y que hubo fisuras en los pisos, producto del sismo del 19 de septiembre del año pasado, y que no han sido atendidas.
Aparicio Viviano indicó que desde 2015, cuando empezaron las jubilaciones masivas de maestros producto de la reforma educativa, la escuela perdió a varios docentes, lo que afecta a los estudiantes de los tres grados. Indicó que en la secundaria se necesitan docentes para que cubran las horas semanales de cuatro asignaturas, 30 horas de Matemáticas, 10 horas de Artes, ocho horas de Historia y seis horas de Ciencias.
La directora contó que la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) alega que la escuela tiene baja matrícula y que por eso no puede enviar a los maestros que faltan, “pero los pocos niños que están requieren de todas las clases”.
Indicó que algunos maestros cubren algunas horas, para no afectar a los alumnos y ya han participado en concursos para ocupar las horas, pero han puesto “muchas trabas”. Agregó que sabe que en mayo se aplicará un examen, a los interesados en ocupar las horas pendientes de las cuatro asignaturas y confió que eso resuelva el problema de la falta de maestros.
La directora indicó que en la escuela estudian 510 niños, en los turnos matutino y vespertino, la cual opera desde hace 30 años, “hay poco apoyo en cuanto a infraestructura, materiales didácticos y deportivos”.
A la escuela se meten personas ajenas al plantel, aseguró, y hace tres años fue incendiada la dirección de la escuela, hace ocho meses fue quemada la cancha de futbol rápido con pasto sintético, antes de ser inaugurada, y ayer que regresaron a clases encontraron que se robaron unas 20 pastillas (interruptores termomagnéticos) de los centros de carga, por lo que las aulas se quedaron sin energía eléctrica. Cada pastilla tiene un precio de 150 a 200 pesos.
La directora dijo que hace falta vigilancia en la escuela o un velador para que cuide las instalaciones.
Contó que el sismo del 19 de septiembre provocó fisuras en los pisos donde estudian los alumnos de primero y segundo grado, también en las rampas y por eso los padres de familia convocaron a una conferencia de prensa.
La presidenta del comité de padres de familia, María Eugenia Rivero Catana, dijo que están molestos porque la escuela tiene muchas necesidades y las autoridades educativas no aportan nada, ni materiales ni mobiliario, “nomás nos dicen que sí a todo, pero ellos no nos han resuelto nada”.
Explicó que para atender algunos gastos de reparaciones de la escuela, se hacen jornadas de limpieza y se convoca a los padres de familia, que si no asisten deben pagar 50 pesos y al inicio del ciclo escolar se pide una cooperación de 300 pesos, cantidades que resultan en poco dinero para los gastos que tiene la escuela, pero no pueden pedir más a los padres de familia, porque afectaría el gasto familiar.
Otro de los integrantes del comité de padres, Juventino Barrientos, indicó que sólo la fachada del edificio de tres niveles fue pintada por el programa Escuelas al Cien, en septiembre, pero la pintura ya está descascarándose.
En la visita al plantel se comprobó que la parte trasera del edificio está sucia y tiene moho, las aulas de los talleres tampoco fueron pintadas y la fachada del edificio ya esta reseca y en algunas partes ya se desprendió la pintura.
Los salones donde hay fisuras en el piso, son los que están en el tercer nivel del edificio, donde toman clases los alumnos de primer grado, también tienen fisuras en el piso los salones de segundo grado que están en el segundo nivel del edificio. El taller de herrería también tiene daños.
La presidenta del comité de padres contó que después del sismo acudieron trabajadores de Protección Civil, quienes les dijeron que las fisuras en los pisos eran superficiales.