EL-SUR

Jueves 23 de Mayo de 2024

Guerrero, México

Acapulco  

Aumentaron 70% las solicitudes de pequeños negocios para seguridad privada, dice Badillo

  Por la inseguridad aumentaron 70 por ciento las solicitudes de pequeños y medianos negocios para la contratación de servicios de seguridad en Acapulco, dijeron representantes de empresas de este giro. En Acapulco, según el padrón del Ayuntamiento, hay 34 empresas de seguridad, de las cuales tres abrieron este año. Restaurantes, taquerías, estéticas y tiendas … Continúa leyendo Aumentaron 70% las solicitudes de pequeños negocios para seguridad privada, dice Badillo

Mariana Labastida

Noviembre 07, 2016

 

Por la inseguridad aumentaron 70 por ciento las solicitudes de pequeños y medianos negocios para la contratación de servicios de seguridad en Acapulco, dijeron representantes de empresas de este giro.
En Acapulco, según el padrón del Ayuntamiento, hay 34 empresas de seguridad, de las cuales tres abrieron este año.
Restaurantes, taquerías, estéticas y tiendas de ropa son los nuevos clientes de estas empresas de seguridad privada. Negocios que se consideran pequeños o medianos son los que han empezado a solicitar los servicios de guardias o instalación de cámaras y monitoreo, ante la violencia que no disminuye en el municipio.
Consultado al respecto, el director general de Grupo Jobamex, uno de los más grandes en Acapulco en el sector de la seguridad, Joaquín Badillo Escamilla, indicó que “desafortunadamente” cada año va en incremento el número de solicitudes de seguridad privada o sistemas de vigilancia, incluso la petición de guardias personales.
De acuerdo con las cifras de Grupo Jobamex, de 2014 a 2016 el incremento de servicios de seguridad privada o sistemas de vigilancia es de un 70 por ciento en Acapulco. El aumento de servicios que son directamente de pequeños y medianos negocios.
“Los que se dedican a la comercialización de productos, llámese llanteras, ferreterías, mueblerías, y del sector restaurantero, desde taquerías, comidas corridas, pollerías y carnes, hasta tienda de ropa y plazas comerciales que antes no requerían de seguridad, hoy se ven obligadas a hacerlo”, indicó.
Dijo que estos negocios no eran clientes para las empresas de seguridad en años anteriores.
Del 70 por ciento, el 40 por ciento de las solicitudes son para guardias de seguridad y el 60 por ciento para la instalación de circuitos cerrados y sistemas de alarma, “por cuestión de la economía”. También habido un aumento de servicios en Chilpancinco y Zihuatanejo.
“Al ver que la inseguridad aumenta, que tiene rebasadas a las corporaciones policiacas, al estado, al gobierno, los empresarios evalúan y dicen o cerramos, o pierdo mi vida o contrato una empresa de seguridad, y quienes no tenían seguridad ahora exploran hacer su actividad considerando un guardia”, argumentó Badillo Escamilla.
El costo de un guardia blanco (sin armas) va de 5 mil a 12 mil pesos, mientras que el de un guardia armado va de los 11 a los 15 mil pesos, lo que es difícil de pagar para muchos negocios.
Al año, un negocio tiene que desembolsar entre 60 y 144 mil pesos por contratar un guardia blanco y entre 132 y 180 mil pesos para un guardia armado, por ello incrementó la instalación de circuitos cerrados y sistemas de alarma, que tienen un costo menor para el empresario.
Badillo Escamilla explicó que como todo negocio, al existir demanda hay más creación de empresas con el mismo giro que quieren invertir en el mismo rubro, aunque recordó que muchas no cumplen con toda la reglamentación para trabajar y dar un servicio de calidad.
“Piensan que es sencillo invertir en la seguridad privada desconociendo la reglamentación, los manuales de operación, los permisos, los registros y desafortunadamente el país no estaba preparado para estos incrementos tan exponenciales de este tipo de empresas”, dijo el empresario.
En el caso de Grupo Jobamex, según el gerente general, la competencia directa que tiene es la Policía Auxiliar, que es la única en el estado, además de ellos, con el permiso para portar armas. El resto de las empresas ofrecen los llamados guardias blancos porque no tienen armas.
Badillo Escamilla reprochó que “no existe una verdadera supervisión y regulación de las empresas, salen y crecen, algunos no tienen ni siquiera una oficina, empiezan a poner a guardas a diestra y siniestra y sin ningún tipo de regulación”, por lo que convocó a los pequeños y medianos empresarios a elegir con cuidado dónde contratan el servicio.
En 2016 se abrieron tres nuevas empresas que ofrecen el servicio de seguridad en el municipio.
Por su parte, el gerente regional de Inter Con Servicios de Seguridad Privada S.A de C.V, que tiene presencia en diferentes estados y otros países, Orlando Padilla Ríos, informó que este año se incrementaron un 70 por ciento las solicitudes de clientes nuevos.
Explicó que la mayoría de las cotizaciones se las han pedido pequeños y medianos negocios, a los que finalmente no les dan el servicio porque consideran que el costo por los guardias blancos es elevado.
“No todos tienen la solvencia económica para soportar un gasto de este servicio, de qué te sirve tener un guardia bien capacitado, que cumpla todas las normativas, si realmente a los tres o cuatro meses te va a pegar en lo económico, por eso prefieren o cerrar los negocios o no decirte gracias por el servicio”, explicó.
Los negocios que han solicitado cotizaciones “chicos” como misceláneas, casas de empeño y mueblerías, por tener problemas de robo a mano armada y saqueos, prefieren vigilantes nocturnos porque les han dicho los clientes que no hay rondines de la policía.
El servicio que ofrece Inter Con es manejo de accesos, registros de entrada, salidas, atención a clientes, manejo de personal y protocolos de vulnerabilidad en las empresas, “prácticamente nuestro deber es informar, observar y reaccionar en dado caso que se necesite”.
Inter Con, según explicó, es una empresa estadunidense que trabaja en México dando servicios a empresas corporativas. Las oficinas que tienen en estados como Guerrero son para la supervisión de los guardias que trabajan en las empresas con las que tienen contrato nacional.
Aunque en temporadas, las empresas les solicitan aumentar el número de guardias que tienen por cada turno para prevenir el robo, porque se han dado casos en que en rutas foráneas “hasta soplete le meten a las cajas de seguridad”.
También se quejó de la competencia desleal de servicios de seguridad privada, porque, dijo, existen “muchas empresas patito” que no cumplen con las normas de la Secretaría de Seguridad.