EL-SUR

Martes 23 de Abril de 2024

Guerrero, México

Acapulco  

Denuncia la escritora Alondra Berber campaña en su contra porque denunció acoso sexual

La también promotora cultural presentó quejas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos y en la Contraloría General del Ayuntamiento de Acapulco en febrero contra dos funcionarias y un maestro de música de la Escuela de Iniciación Artística Asociada G65

Septiembre 15, 2020

Lourdes Chávez

Chilpancingo

La escritora y promotora cultural, Alondra Berber, presentó quejas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos y en la Contraloría General del Ayuntamiento de Acapulco, en febrero, contra dos funcionarias y un maestro de música de la Escuela de Iniciación Artística Asociada de Acapulco G65, por malos tratos, una campaña de desprestigio y despido injustificado luego de que denunció una agresión sexual.
Consideró necesario hacer visible la denuncia para prevenir actos futuros de violencia explícita y sutil, pues los señalados ya hicieron sus alegatos de las demandas en la Contraloría antes de la declaratoria de emergencia por la pandemia de Covid-19, y en la Comisión Estatal hace como dos meses, y no hay una resolución.
La feminista aclaró que no pide restitución del empleo, sino medidas de no repetición y reparación del daño, que inhiba el acoso y hostigamiento sexual y laboral en las instituciones de gobierno, como la que describe en los documentos de denuncia.
En la narración de hechos de la queja en la Codehum, también advirtió que antes de ella, un profesor de música fue acosado por la directora de la EIAA G65 y la responsable de Control Escolar, para que renunciara, y la vacante fue ocupada de inmediato por la pareja sentimental de la funcionaria de Control Escolar.
Precisamente, el nuevo maestro de música, pareja de la responsable de Control Escolar, la tocó de manera indecorosa en la posada de la escuela, el 19 diciembre de 2019.
En la narración de hechos, detalla que al sentirse agredida, quedó paralizada y lloró de regreso a su casa, y cuando se procesó que no fue un movimiento de despedida involuntario, informó por mensajes de texto esa misma noche a la directora, que le recomendó hablar con la responsables de Control Escolar, si consideraba que el maestro de música la tocó de manera intencional. Incluso, le dijo que “en determinadas fechas, las personas pueden estar más sensibles que otros y la percepción es distinta”.
En la queja, precisó que no era la primera vez que este maestro la incomodaba en el saludo “quise pensar que era muy efusivo, que no medía bien el contacto físico con la gente, y por eso abrazaba estrujando el cuerpo o acercando el rostro más de lo normal”.  Decidió guardar distancia.
Dos meses después, la directora acusó a Berber, entonces coordinadora académica, de ser problemática, en un oficio dirigido a la directora de Cultura de Acapulco, Malena Steiner, el 4 de febrero.
Asimismo, la responsabilizó de la conducta hostil del grupo Ensamble Alterare, integrado por egresados de la sexta generación y alumnos del EIAA G-65, hacia su persona, “y con una preferencia” hacia Alondra Berber, a quien señaló de tener “la facilidad de generar problemáticas al interior de nuestra institución y mal influenciar a los estudiantes”.
Cuando fue notificada, Berber aclaró en otro oficio a la directora de Cultura que la conducta hostil del grupo Ensamble Alterare hacia la directora es resultado del maltrato de las funcionarias hacia los estudiantes.
Luego que los jóvenes se quejaron de que los trabajadores querían cerrar la escuela a las 7 de la noche, aunque su hora de salida eran las 8, y los ensayos del Grupo Ensamble eran interrumpidos constantemente para que se retiraran. Antes de salir de vacaciones solicitaron a la directora un lugar apropiado para ensayar fuera del horario escolarizado para continuar su formación de manera autogestiva. Precisó que “mi mala influencia es apoyar a los estudiantes en temas administrativos”. Cuando este oficio fue remitido a la escuela, Berber fue objeto de burlas relacionadas con la agresión sexual que en su momento señaló. Para el lunes 11 del mismo mes no le permitieron el acceso aunque insistió en entrar, para que no fuera acusada de abandono de empleo, y las mismas funcionarias le impidieron el paso de manera despectiva y humillante.