Redacción

Durante una operación para evitar más contagios por coronavirus, fueron dispersadas 62 personas que estaban en reuniones en la vía pública, comercios y canchas deportivas, sin acatar los protocolos de prevención, higiene y distancia establecidos por el sector Salud.
En un boletín de prensa, el coordinador de Protección Civil y Bomberos del municipio, Cuauhtémoc Gayosso Pérez, enfatizó que estos recorridos serán permanentes porque hay alerta máxima, que Acapulco se encuentra en el semáforo rojo epidemiológico, lo que indica que no hay condiciones para relajar las medidas de prevención y la gente debe mantener el distanciamiento social.
Reiteró que las operaciones hechas conjuntamente con la Dirección de Reglamentos y Espectáculos, Vía Pública y Salud Municipal, la Guardia Nacional, la Marina-Armada de México, las policías Estatal y Preventiva, son para concientizar a la ciudadanía sobre la gravedad de salir a la calle.
“Queremos entender que la gente está cansada y desesperada del aislamiento en casa y desea salir a divertirse, convivir con familiares y amigos, sin embargo, aún no es tiempo para relajar las medidas sanitarias. Necesitamos que las personas dejen de lado la necedad por convivir, por socializar, pero hay que aguantar un poco más. Ya falta poco”, destacó.
En la operación llevada a cabo este jueves, fueron dispersadas 13 personas que socializaban en la playa Papagayo, 14 que jugaban basquetbol en la cancha del barrio de La Fábrica y a cuatro adolescentes que volaban culebrinas en la calle Diego Hurtado de Mendoza.
Mientras que en la colonia Aguas Blancas se invitó a cuatro parroquianos del bar Rodesia a no socializar en espacios cerrados y con aglomeración. El lugar fue clausurado por la Dirección de Reglamentos y Espectáculos.
El comunicado añade que fueron dispersados otros 20 deportistas que jugaban basquetbol y futbol en las canchas de la colonia José López Portillo, además de seis personas que tomaban cervezas en la Unidad Deportiva Vicente Suárez.
También fueron sorprendidas siete personas que socializaban en un inmueble sin razón social de la calle Baja California, en la colonia Progreso.