La Fiscalía General del estado (FGE) informó que el policía municipal José Antonio Lumbraño Pérez, escolta del alcalde Evodio Velázquez Aguirre, disparó primero contra el agente estatal, de acuerdo con las investigaciones policiacas.
En un boletín de prensa, la dependencia del estado reitera que actúa conforme a derecho, respetando las garantías individuales “plasmadas” en la Constitución General de la República en sus artículos 1, 14, 16, 20 y 21.
Detalla que de las investigaciones policiacas y de los dictámenes periciales se desprende que el policía municipal asesinado a balazos fue quien hizo los primeros disparos e hirió en el pecho al agente estatal.
Añade que los efectivos del estado repelieron la agresión y que el municipal perdió la vida en el hospital.
Recalca que de los dictámenes periciales se desprende que el arma que hirió al efectivo estatal es la que usó el agente muerto.
Mientras que la prueba de radizonato de sodio resultó positiva en la región palmar y dorso de la mano derecha del policía municipal.
Asimismo, acredita plenamente, conforme a derecho, que los disparos efectuados con el arma de fuego tipo Beretta, calibre .9 milímetros, fueron los que hirieron al policía estatal.
Los estudios toxicológicos se encuentran en proceso.
En el comunicado se destaca que los policías estatales y ministeriales acudieron al lugar de los hechos tras un llamado del C4, que indicaba que personas disparaban armas de fuego en la vía pública.
En ampliación de las investigaciones policiacas y periciales, ayer en la Carpeta de Investigación se amplió la inspección ocular en la calle Emiliano Zapata, de la colonia Lucio Cabañas.
Después de una búsqueda minuciosa se encontraron tres casquillos percutidos calibre .9 milímetros, mismos que fueron asegurados.
El documento añade que testigos de los hechos refieren que los disparos se hicieron en la vía pública y no al interior de una vivienda.
De los casquillos encontrados se solicitó el dictamen en Balística Forense para realizar las comparativas correspondientes.
Las corporaciones policiacas defendieron a sus agentes y dieron a conocer diferentes versiones en sus reportes.
El reporte de la Policía del Estado es que los agentes escucharon detonaciones de arma de fuego y atendieron la emergencia, que en recorridos visualizaron a tres agentes municipales que ingerían bebidas alcohólicas y que éstos los recibieron a balazos.
Ante esta situación, los efectivos del estado repelieron la agresión e inició un enfrentamiento, en el que resultaron heridos un agente estatal y uno municipal.
Sin embargo, el reporte de la Policía Municipal es que los del estado dispararon contra el efectivo del municipio y a golpes lo metieron a su casa, levantaron su arma y los casquillos percutidos, y los agresores se retiraron amenazando a la familia de la víctima.

Que se aclaren los dimes y diretes, pide el secretario de Seguridad Pública del estado

Sobre el caso, el secretario de Seguridad Pública del estado, el general Pedro Almazán Cervantes, dijo que la versión de los familiares sobre la muerte del policía municipal que era escolta del alcalde Evodio Velázquez, debe aclararse en la Fiscalía General del estado, porque el reporte oficial contrasta con ésta. “Los dimes y diretes que sean esclarecidos por la Fiscalía”.
De ello, los familiares del policía municipal señalaron los agentes estatales de la patrulla 500 “llegaron disparando” aunque se les dijo que se trataba de policías municipales.
En declaraciones en el patio de la telesecundaria Vicente Suarez, Pedro Almazán lamentó el enfrentamiento entre policías del estado y policías municipales: “como cabeza de sector para mí es doloroso que caiga cualquier policía de cualquier institución”, pero insistió en que corresponde a la Fiscalía General del estado hacer las investigaciones.
Señaló que en el hecho se evidenció “una irregularidad, la portación de armas oficiales fuera de servicio, eso genera este problema”.
Agregó que no quieren una confrontación entre los agentes, pero que hay uno del estado herido “con un arma oficial que portaban los civiles armados que después supimos que eran policías”.
Almazán Cervantes reiteró que la Policía del Estado acudió porque se reportó a la línea 911 que había disparos en la colonia Lucio Cabañas, la cual identificó “como una de las conflictivas de Acapulco”, que éstos acudieron y fueron “recibidos con disparos de arma de fuego por civiles armados que estaban tomando en la vía pública, inmediatamente cae uno herido y repele la agresión, y logran policías del estado recoger a su compañero, llamar ambulancias para la recepción de los dos cuerpos, pero de la otra parte los familiares salen por el cadáver y los policías tienen que retirarse y llevar a su compañero al hospital”.
Al secretario se le pidió una postura por las declaraciones del alcalde Evodio Velázquez, quien pidió investigar sin sesgo y que no quede impune el homicidio ni quiere “cuentos”, pero Almazán Cervantes no respondió y se disculpó porque tenía que retirarse junto al gobernador.