Representantes de aerolíneas tradicionales como Aviacsa y Aeroméxico informaron que las aerolíneas de bajo costo (ABC’s) representan una competencia desleal en cuestión de tarifas por la falta de regulación en este rubro.
Señalaron que con la incursión –hace un año– de Interjet, A Volar y Líneas Aéreas Azteca éstas se han convertido en “depredadores” del mercado existente, a pesar de que sus representantes anunciaron que generarían nuevos mercados para sus vuelos.
Los gerentes de Aviacsa y Aeroméxico coincidieron en que esta situación se torna difícil porque no existe una regulación de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) para delimitar hasta qué punto pueden bajar sus tarifas las ABC’s, lo que causa que las aerolíneas tradicionales busquen programas emergentes para subsistir.
Mientras un boleto de Aviacsa o Aeroméxico de Acapulco a la ciudad de México cuesta mil 800 pesos, las aerolíneas de bajo costo lo venden en 800 pesos, lo que deja poco margen para una competencia sana entre líneas aéreas.
Los ejecutivos enlistaron como ventajas competitivas la calidad en el servicio, la seguridad y garantías para los clientes, así como una atención personalizada, cuestión que se ha perdido con las ABC’s que manejan sus ventas por la Internet.
La gerente de Estación de Aviacsa en Acapulco, Adriana Vega Pacheco, explicó que como estrategia para contrarrestar las iniciativas han diseñado programas como los “Martes de Aviacsa”, en el que reducen los costos de sus boletos hasta 40 por ciento, con una limitante de asientos por vuelo pero que ha resultado atractivo para el público en Acapulco.
“Por eso un vuelo Acapulco-México que cuesta mil 800 pesos, los martes lo podemos dejar en 970 pesos”, ejemplificó.
Dijo que es difícil para una aerolínea no quedar fuera del mercado con los precios que maneja la competencia, que hasta cierto punto son incongruentes con los gastos que se generan de la operación de una línea aérea.
“Especialmente por los altos precios de la turbosina, los costos de impuestos de aeropuertos y mantenimiento”, explicó.
Vega Pacheco agregó que este fenómeno los obliga a buscar nuevos mercados y recientemente Aviacsa abrió nuevas rutas a Veracruz, Durango y Tepic.
“Yo creo que es una competencia desleal porque no está del todo regulado el mercado y hay abusos, no hay un parámetro de tarifas por ruta”, señaló.
Asimismo, Vega Pacheco calificó como desleal el acercamiento de las ABC’s a las agencias de viajes, sus principales proveedores con comisiones de hasta 20 por ciento, mientra que Aviacsa ofrece 10 por ciento por boleto vendido, “pero sólo se enfocan a las que más venden”.
Por su parte, el gerente de Aeroméxico en Acapulco, Manuel Campos Adame, expuso que las aerolíneas lejos de ser “de Bajo Costo” son más bien consideradas “Aerolíneas Baratas”, ya que se dedican a depredar el mercado desde que llegaron con servicios que dejan mucho qué desear.
Auguró que no durarán mucho tiempo en el mercado y mencionó como ejemplo los casos de Aerolíneas Internacionales, Aero California, Taesa y Allegro, que quebraron por falta de mantenimiento a sus aviones y otras por un precario manejo financiero.
Indicó que las ABC’s no ofrecen ninguna seguridad a los pasajeros, ya que si no ahorran en los costos de operación se decrementa el nivel de mantenimiento y supervisión de los aviones, cuestión que representa un riesgo para los usuarios.
Campos Adame reconoció que el nuevo esquema de las ABC’s realmente ha causado estragos en las líneas convencionales, sobre todo por la fuerte competencia que representa el precio.
“Lo que nos obliga a hacer es a disminuir costos y a incrementar la productividad”, señaló.
Expuso que no existe un punto de comparación entre las ABC’s y las líneas tradicionales, pues la principal ventaja que ofrecen es la conectividad gracias a las alianzas con otras aerolíneas internacionales que les permite llegar a casi todos los destinos del mundo.