Mariana Labastida

Empresarios de restaurantes y bares pidieron a las autoridades una ampliación del horario de funcionamiento, a la 1 de la mañana, para poder solventar pagos y salarios, por lo menos tres días a la semana. Se quejaron de que el IMSS esté cobrando multas y recargos por el retraso en el pago de las cuotas patronales, cuando estuvieron cerrados.
El presidente de la Asociación de Bares, Discotecas y Restaurantes de la Costera de Acapulco, Jesús Rivera Rojas, dijo que harán la petición por escrito al gobierno estatal y municipal, para que los dejen trabajar más horas viernes y sábado.
Por su parte, el secretario general del Ayuntamiento, Ernesto Manzano Rodríguez, recalcó que el horario es una disposición no sujeta a negociación.
Algunos empresarios de bares y restaurantes se reunieron en un desayuno en el restaurante-bar La Norteña. En su intervención, el empresario Álvaro Soriano Ríos llamó al gobernador Héctor Astudillo Flores para que los dejen trabajar hasta la 1 de la mañana, porque aseguró que muchos de los clientes llegan a las 10 de la noche y una hora después los están corriendo para no ser sancionados.
El empresario de la Condesa, Katan Rodríguez Escalona, hermano del secretario de Turismo estatal, Ernesto Rodríguez Escalona, expuso que entienden los problemas por la pandemia, pero también que han sido meses difíciles para ellos y que dos horas más de funcionamiento permitirá tener un ingreso, para los pago de luz, agua y salarios. También para los trabajadores que tienen un salario mínimo, pero cuyo mayor ingreso son las propinas.
Katan Rodríguez externó que las condiciones en las que están trabajando tienen que cambiar, para bien de todos, y se quejó de que luego de cinco meses cerrados, les quieran cobrar en el IMSS las multas y recargos, por no pagar las cuotas patronales, “no es posible que no se fije el gobierno que estamos quebrados”.
El empresario es uno de los socios del restaurante-bar Barba Roja, que fue uno de los 16 clausurados por el gobierno municipal, el cual dijo que reabrirlo fue un grave problema.
En declaraciones, Rivera Rojas expuso que entregarán por escrito la petición al gobierno estatal y al municipio, para que les permitan abrir dos horas más dos días a la semana, que son también los días que aumenta la ocupación hotelera en Acapulco.
Los restaurantes-bar y bares tiene autorizado funcionar, solamente los que estén al aire libre, al 50 por ciento de su capacidad y hasta las 11 de la noche, por lo que Jesús Rivera dijo que ha disminuido el personal a la mitad y los que laboran van pidiendo prestado en la semana para los días que no trabajan. “Nosotros le tenemos que dar la cara al empleado, pedimos la flexibilidad por eso”.
El empresario dijo que desde que se reactivó la economía en Acapulco, se han clausurado unos 120 negocios de ese sector; y el pasado viernes y sábado se sancionaron diez establecimientos más. Los cuales explicó han detectado anomalías en las instalaciones, que no han podido dar mantenimiento por el cierre. Otros 40 establecimientos han cerrado “porque están quebrados”.
Consideró que si ellos han tenido que recordar gastos, las autoridades también deberían de tener sensibilidad y disminuir el cobro de impuestos.
Por su parte, el secretario general del Ayuntamiento, Ernesto Manzano, recalcó que se esta trabajando de manera responsable, que están en disposición de ayudar para que se llegue en mejores condiciones a diciembre, para tener la oportunidad de atender a quienes lleguen a Acapulco por las celebraciones de fin de año, por lo que los convocó a colaborar todos.
Recalcó que por eso se están siendo estrictos con las medidas que se tienen que acatar, porque han encontrado, incluso, restaurantes funcionando sin medidas sanitarias, “se trata de la salud de todos para detener los contagios” recalcó.
Agregó que sabe que los bares no fueron los culpables del aumento, pero se busca no regresar al semáforo rojo, que es cierre total de las actividades no esenciales.
El funcionario municipal llegó al desayuno, donde dio un pequeño mensaje y se retiró sin escuchar las peticiones de los empresarios.
En declaraciones a reporteros, dijo que la ampliación de horario no está dispuesta a negociación, porque se estipuló en el Periódico Oficial del Estado de Guerrero.
Recordó que se ha reunido con los empresarios para llegar a acuerdos y así han avanzado, que están siendo estrictos para evitar, por ejemplo, que taquerías donde se venden alcohol se conviertan en bares y se tenga un problema ahí. Así como que están revisando en el Cabildo, sancionar económicamente a las personas que no usen cubrebocas.
El presidente de la Federación Estatal de Cámaras de Comercio en el Estado de Guerrero (Fecanaco), Alejandro Martínez Sidney, recalcó que el enemigo es la pandemia, que no son ni empresarios ni autoridades, por lo que convocó a seguir trabajando en coordinación.
Anunció que iniciarán una campaña de reparto de cubrebocas, inicialmente con 2 mil piezas, que entregarán afuera de los bares y restaurantes, que tienen pensado llegar a las 10 mil unidades repartidas.
También asistieron al desayuno el nuevo presidente de la Barra de Abogados, Adrián Cruz Vargas, y el integrante del comité, el asesor jurídico de los trabajadores de playa y restaurantero, Eduardo Román, quien lamentó que ni la pandemia haya unificado al sector. Reprochó a los integrantes de cámaras empresariales que no se organicen y que si no hay una coordinación para defenderse, es porque se conforman con las dadivas que dan las autoridades.