Agentes de la Guardia Nacional, inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, de la Dirección de Reglamentos y Espectáculos, la Coordinación de Protección Civil, policías municipales, turísticos, Vía Pública, recorrieron las playas Caleta y Caletilla y retiraron el mobiliario de playa para evitar contagios de Covid-19.
También se les exhortó a los turistas y prestadores de servicios a que no se introduzcan alimentos, ni bebidas alcohólicas; solo se permiten actividades recreativas como nadar, correr, y caminar.
Frente al operativo, vendedores de playa, trenzadoras, masajistas y tolderos entre otros comerciantes, intentaron impedir el desmonte de toldos. El director del Centro de Atención y Protección al Turista (CAPTA) Jondalar Castillo Ledezma habló con los prestadores de servicios turísticos y explicó que deben acatar la medida para no regresar al semáforo epidemiológico en rojo lo cual indica nuevamente el cierre de playa.
Los comerciantes dijeron que no iban a permitir que cerraran las playas, porque en los más de tres meses que estuvieron sin trabajar el Ayuntamiento ni una sola despensa les dio; por ello pidieron que les permitieran instalar los toldos, para que los turistas que acuden a las playas tengan donde cubrirse del sol y de esa manera tener un ingreso.
A las 11 de la mañana las autoridades de los tres órdenes de gobierno llegaron a la playa Caletilla, donde turistas disfrutaban del mar, niños jugaban en la arena, y otros incluso disfrutaban de un paseo en la tradicional banana y empezaron a desmontar las estructuras metálicas y la tela del mobiliario de toldos. Mientras tanto un grupo de turistas que se percataron de lo que pasaba, desmontaron ellos mismos sus sombrillas y sillas.
El pasado dos de julio el gobierno estatal y municipal informaron de la reapertura de la playa y para ello dispusieron medidas sanitarias, entre ellas no instalar mobiliario, no ingresar alimentos y bebidas alcohólicas, no entrar a playas en grupos de más de tres personas.
Además, no se permiten las mascotas, ni el uso o renta de cuatrimotos; se debe portar cubrebocas y como esparcimiento, caminar, correr o nadar.
Jondalar Castillo, director del CAPTA, recordó a los inconformes que si no se atienden esas medidas se corre el riesgo que los contagios aumenten y si eso sucede “se saturan los hospitales y nos vamos a semáforo rojo. Esa es la razón y por eso pedimos su comprensión y hay que aguantar unos días más, no hay que permitir que se retroceda”, agregó.
“Quién nos va ayudar”, “tenemos 90 días sin trabajar y sin apoyo de ninguna autoridad”, “las familias no aguantan”, “nada más nos dicen no salgan de su casa, pero quién nos va a dar de comer”. Clamaron molestas las masajistas, vendedoras de playa y tolderos a las autoridades antes mencionadas.
“Este es mi trabajo, de que me sirve a mí salir sino hay trabajo”, “no nos vamos a morir de la enfermedad nos vamos a morir de hambre, de la necesidad que esta existiendo en Acapulco”, además, reprocharon a los funcionarios “ustedes tienen su sueldo, comen bien, tres veces al día, pero nosotros no comemos ni una, ¿qué les pasa pues?”, reclamaron.
Entre los reclamos y reproches altisonantes, se escucharon “¿dónde está nuestro gobierno?, cuando piden el voto dicen vamos apoyar al pueblo y ahorita que en realidad se está necesitando ¿dónde está?, usted dice que trae órdenes, pero no trae órdenes de ver por toda esta gente”.
Durante el diálogo ríspido, Castillo Ledezma respondió “aunque no lo vean ahorita a corto plazo, estas medidas sirvieron para no regresar a semáforo (epidemiológico) rojo”.
EL saldo en playa Caletilla fue de 33 toldos; en el caso de playa Caleta ahí no retiraron las estructuras, porque estas no tenían la lona que los cubriera, pero sí se llevaron las sillas que son rentadas y algunas sombrillas ya instaladas. En esa zona no hubo tanta resistencia a las autoridades se llevaron sillas que estaban para evitar que estas pudieran ser rentadas.
En tanto el director de Reglamentos y Espectáculos Julián Nicio López declaró que estas acciones son por la emergencia sanitaria. Recordó, además, que en la playa lo único que se puede hacer son actividades recreativas, “nadar, correr, caminar y grupos de máximos de tres personas y las personas que vengan con más de tres se les exhorta que acaten las medidas, que no ingresen con bebidas alcohólicas o alimentos a la playa”.
El funcionario subrayó que la indicación es que los turistas, si lo desean, ingieran alimentos en los restaurantes en la playa, “dentro del restaurante el consumo de alimentos” aclaró.