Ramón Gracida Gómez

Las fuerzas militares del Estado mexicano conciben a las feministas como una amenaza contra la seguridad nacional, afirmó la investigadora de la Universidad Autónoma de Guerrero, Claudia Rangel Lozano, durante su ponencia Estado patriarcal versus feminismo ante la necropolítica de género en México, en el auditorio del Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados-Ignacio Manuel Altamirano (IIEPA-IMA).
En la sesión del seminario permanente La construcción del conocimiento con enfoque de género, indicó que en los documentos de la Secretaría de la Defensa Nacional filtrados en los Guacamaya Leaks, los colectivos feministas son considerados igual de peligrosos que los grupos del crimen organizado.
La especialista del periodo de la guerra sucia en México, recordó que a lo largo de la historia del país, el Ejército mexicano “no sólo ha desaparecido personas, ha masacrado a poblaciones, a organizaciones sociales, ha asesinado y lo continúa haciendo”, pero en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se les ha dado concesiones.
La doctora en Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México, explicó que el concepto de “necropolítica significa la decisión de matar, hacer vivir o hacer matar a los otros” y afirmó que el Estado mexicano es “necropolítico, no solamente nos referimos al gobierno actual de la mal llamada Cuarta Transformación, sino de los gobiernos desde los 70”.
La profesora de la maestría en Humanidades y Ciencias: Territorio y Sustentabilidad Social de la UAG, señaló que en un sistema patriarcal las mujeres son “subhumanizadas, es decir, no somos consideradas como seres humanos, somos inferiores a los hombres, así nos conciben en este sistema”.
Con base en un análisis de la desaparición y el feminicidio de distintas mujeres, afirmó que en México se observa una necropolítica de género, en la que el Ejército y la Marina tienen la concepción en la que ven a las feministas “como una amenaza contra la seguridad nacional”. En los Guacamaya Leaks, agregó, “los grupos de mujeres feministas eran igual de peligrosos que los grupos del crimen organizado”.
Indicó que las ganancias de la criminalidad hacia las mujeres no son exclusivas de México, sino se da en el mundo y no se reduce a la venta de drogas, también están la prostitución infantil, la venta de órganos, la venta de mujeres y las desapariciones de mujeres, que son “formas de despojo de sus cuerpos” para servir a los grupos criminales.
La profesora del IIEPA-IMA, Rosa María Gómez Saavedra, comentó la ponencia de Rangel Lozano, indicó que las mujeres son criminalizadas por el sólo hecho de ser mujeres y exigir un cambio, y cuestionó que la presencia del Ejército en las comunidades causa un aumento de las violaciones de derechos humanos.
La historiadora Beatriz Adriana Gaytán Villalpando presentó su ponencia Paternidad no deseada. Feminicidio en Puebla Siglo XXI, con la que planteó estudiar como una causal de los asesinatos de mujeres el que los hombres no quieren tener los hijos de sus parejas embarazadas.
Con base en entrevistas a feminicidas sentenciados, Gaytán Villalpando investigó a estos hombres como padres y concluyó que, así como hay diferentes masculinidades, también existen diversos tipos de feminicidas.
La académica de la UAG, Rosa Elena Wences Mina, comentó la ponencia de Gaytán Villalpando y explicó que a pesar de la reciente despenalización del aborto en el país por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, todavía hay resistencias culturales en distintos estados.
El acto fue moderado por Linayme Paulette Reyes Ávila y se destacó que el seminario La construcción del conocimiento con enfoque de género cumple 10 años, era coordinado por Alejandra Cárdenas Santana, pero la maestra emérita de la UAG se retiró hace unos meses y ahora lo encabeza Claudia Rangel Lozano.